La broma estúpida
EDWARD GOREY
Edward Gorey nació en el Medio Oeste y desde hace más de un cuarto de siglo es una figura única del mundillo literario y artístico de Nueva York, donde hace las delicias de un pequeño grupo de incondicionales con sus maravillosamente macabros libros ilustrados, que se publican en ediciones limitadas. Sólo recientemente ha conseguido ser conocido por el gran público, gracias a la aparición de dos volúmenes que recopilan su obra, Amphigorey y Amphigorey Too. La obra de Gorey es ingeniosa, melancólica, mordaz y elegante. En ella pueden encontrarse referencias a la ópera, el teatro y el ballet, y muestra influencias que se remontan a la época victoriana y eduardiana. Pero bajo la sofisticación y el estilizado tratamiento de los temas se esconde una inocencia vulnerable, una especie de perpleja e impotente conciencia de los horrores que el destino tiene reservados para tanta gente. El efecto acumulativo de sus magníficos relatos, acompañados de dibujos igualmente soberbios, resulta al mismo tiempo conmovedor e inquietante.