181. En el médium puramente mecánico el movimiento de la mano es independiente de la voluntad; en el médium intuitivo, el movimiento es voluntario y facultativo. El médium semi-mecánico participa de los otros dos, siente una impulsión dada a su mano a pesar suyo, pero al mismo tiempo tiene conciencia de lo que escribe a medida que se forman las palabras. En el primero, el pensamiento sigue al acto de la escritura; en el segundo le precede; en el tercero le acompaña. Estos últimos médiums son los más numerosos.
Médiums inspirados
182. Toda persona que ya sea en estado
normal, ya sea en estado de éxtasis, recibe por el pensamiento
comunicaciones extrañas a sus ideas preconcebidas, puede colocarse
en la categoría de los médiums inspirados; como se ve, es una
variedad de la mediumnidad intuitiva, con la sola diferencia de que
la intervención de esta potencia oculta es todavía mucho menos
sensible, porque en el inspirado es aún más difícil de distinguir
el pensamiento propio del que es sugerido. Lo que caracteriza a
este último, sobre todo, es la espontaneidad.
La inspiración nos viene de los Espíritus que nos influyen en el
bien o en el mal, pero antes es la obra de aquellos que nos quieran
bien, y cuyos consejos dejamos de seguir muy a menudo; se aplica a
todas las circunstancias de la vida, en las resoluciones que
debemos tomar; bajo este aspecto se puede decir que todos son
médiums, porque no hay persona que no tenga sus Espíritus
protectores y familiares que hacen todos sus esfuerzos para sugerir
a sus protegidos pensamientos saludables. Si nos penetráramos de
esta verdad, recurriríamos más a menudo a la inspiración de nuestro
ángel guardián en los momentos en que no sabemos qué decir o qué
hacer. Que se le invoque con "fervor" y "confianza" en caso de
necesidad y nos admiraremos de ideas que muchas veces surgirán como
por encanto, ya sea que debamos tomar un partido, ya sea que tenga
que componerse alguna obra. Cuando no acude ninguna idea es porque
será preciso esperar. La prueba de que la idea que sobreviene es
extraña a uno mismo, es que si hubiera estado en nosotros siempre
hubiéramos sido dueños de ella y no habría motivo para que no se
manifestara cuando quisiéramos. El que no es ciego abre los ojos
para ver cuando quiere; del mismo modo aquel que tiene ideas en sí
las tiene siempre a su disposición; si no acuden como lo desea, es
porque está obligado a tomarlas en otra parte que en su propio
fondo.
Se pueden también colocar en esta categoría las personas que, sin
estar dotadas de una inteligencia fuera de lo vulgar, y sin salir
del estado normal, tienen rayos de una lucidez intelectual que les
da momentáneamente una facilidad desusada de concepción y
elocución, y en ciertos casos el presentimiento de las cosas
futuras. En estos momentos que se llaman justamente de inspiración,
las ideas abundan, se siguen, se encadenan, por decirlo así, por
ellas mismas y por una impulsión involuntaria y casi febril; nos
parece que una inteligencia superior viene a ayudarnos, y que
nuestro espíritu se desembaraza de un peso. 183. Los hombres de
genio en todos los géneros, artistas, sabios, literatos, son, sin
duda, Espíritus avanzados, capaces por si mismos de comprender y de
concebir grandes cosas; precisamente porque se les juzga capaces es
por que los Espíritus que quieren el cumplimiento de ciertos
trabajos les sugieren las ideas necesarias, y por esto muy a menudo
son "médiums sin saberlo". Tienen, no obstante, una vaga intuición
de una existencia extraña, porque el que recurre a la inspiración
no hace otra cosa sino una evocación; si no espera ser oído, por
qué exclama tan a menudo: ¡Mi buen genio, ven en mi ayuda! Las
respuestas siguientes confirman esta aserción. - ¿Cuál es la causa
primera de la inspiración? "Espíritu que se comunica por el
pensamiento." - ¿La inspiración sólo tiene por objeto la revelación
de las grandes cosas? "No, tiene muchas veces relación con las
circunstancias más ordinarias de la vida. Por ejemplo, tú quieres
ir a alguna parte, y una voz secreta te dice que no lo hagas porque
hay peligro para ti; o bien te dice que hagas una cosa en la cual
tú no pensabas, esto es la inspiración. Hay muy pocas personas que
no hayan sido más o menos inspiradas en ciertos
momentos."
- Un autor, un pintor, un músico, por ejemplo, en los momentos de
inspiración, ¿podrían ser considerados como médiums?
"Sí; porque en estos momentos su alma es más libre y está como
separada de la materia; recobra una parte de sus facultades de
Espíritu y recibe más fácilmente las comunicaciones de los otros
Espíritus que le inspiran."
Médiums de presentimientos
184. El presentimiento es una intuición vaga de las cosas futuras. Ciertas personas tienen esta facultad más o menos desenvuelta; pueden deberla a una especie de doble vista que les permite entrever las consecuencias de las cosas presentes y la filiación de los acontecimientos; pero a menudo también es el hecho de comunicaciones ocultas, y en este caso, sobre todo, es cuando podemos dar el nombre de "médiums de presentimientos" a los que están dotados de ella y son una variedad de los "médiums inspirados".
CAPÍTULO XVI
MÉDIUMS ESPECIALES
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