Prólogo
La Biografía del príncipe Idoine no es sino la historia de alcoba de la emperatriz Wu Zetian. Aunque este relato pueda atentar contra el decoro, no por ello deja de ofrecer materia de reflexión.
Antaño, cuatro ancianos de cabellos canos acudieron en ayuda del heredero imperial, contribuyendo así a la consolidación del linaje Han. En realidad, el máximo artífice de todo esto fue el marqués de Liu, personaje del que sólo puede decirse que fue un leal servidor de la patria. Durante todo el tiempo en que el marqués de Liu, asistido por los cuatro ancianos sabios, estuvo al frente del estado, nada nefasto ocurrió.
De la emperatriz Wu Zetian, en cambio, conocemos su crueldad sin límites y su vida cada vez más disoluta. Cuando destituyó al príncipe heredero y se sentó ella en el trono, sin que nadie pudiera hacer nada por evitarlo, el regreso de la descendencia de Zhongzong al poder fue obra de los esfuerzos desplegados por un tal Aocao. Que el éxito de éste se debiera a su lujuria no nos impide reconocer que actuó como un leal servidor de la patria.
El Yi jing dice: «Alimentad a los prisioneros por la ventana y los tendréis tranquilos». Aocao no actuó de otro modo. Vista de esta manera, y por muy licenciosa que pueda parecer, la presente narración no deja de ser un reflejo de la Historia.
Otoño del año jiawu
Huayang Sanren (una persona retirada a [o de] Huayang).