CLAUSTROFOBIA

Mamá. Vienen hacia mí

haciendo crujir los nudillos,

esos niños de familias demasiado bien.

La violencia toma la salida

muy educada, simpática y estudiantil,

con preguntas inocentes: ¿Tiene fe?

Un dedo apunta: ¿Tiene esperanza?

La amenaza anudada en corbata,

como pregunta suplementaria: ¿Tiene caridad?

Ahora se aflojan los nudos, ahora:

espinillas de tamaño mayor que el natural.

Esos niños de familias demasiado bien.

Se está bien aquí, incluso aunque llueva.

Sigo creyendo aún en los cigarrillos.

Mis cebolletas son verdes, mi esperanza también.

Y a veces, cuando me distraigo,

el amor me barre pacientemente con el recogedor.

Mamá. La alegría se fue

volando y hace tiempo que debía estar aquí.

Intiman los ideólogos

y esos hijos de familias demasiado bien.

Se acercan. Quiero salir.