Esta segunda entrega de la novela había sido mi sueño desde que acabé de escribir El Club de los Corazones Solitarios. Son muchas las personas que me han ayudado a convertir aquel sueño en realidad. Así que, All Together Now («Ahora todos juntos»):
Do you want to know a secret?, «¿Quieres saber un secreto?», David Levithan es un editor increíble. Aunque, en realidad, no es ningún secreto. Gracias por participar conmigo en este viaje de locos a través de seis libros (ahora hay que decir: ¿Qué?). Agradezco hasta tal punto tu paciencia y tu sabiduría que sonrío radiante (y, de vez en cuando, pongo los ojos en blanco). Ah, y I’m Happy Just to Dance with You, «Me conformo con bailar —y cantar karaoke— contigo».
Lo he conseguido con un poco de ayuda de mis amigos (With a Little Help from my Friends) de Scholastic (vale, DEPENDO MUCHO de la ayuda): Erin Black, Sheila Marie Everett, Elizabeth Parisi, Kelly Ashton, Tracy van Straaten, Bess Braswell, Emily Morrow, Alan Smagler, Leslie Garych, Lizette Serrano, Emily Heddleson, Antonio González, Joy Simpkins, Elizabeth Starr Baer, Sue Flynn, Roz Hilden, Nikki Mutch, y todos los agentes comerciales de Scholastic.
La perseverancia de Rosemary Stimola hizo que esta segunda parte fuera posible. Thank You, Girl, «Gracias, chica».
All my Loving, «Todo mi cariño», para mi familia que, lamentablemente, NO son fanáticos de los Beatles, pero los aprecio de todas formas.
Hay muchas personas en mi vida que se han unido (Come Together) para ayudarme con este libro y en mi vida como autora: Kirk Benshoff, que tan bien cuida de mi página web; Natalie Thrasher, que leyó un borrador y me devolvió una información fabulosa, y Marcus Zusak, que respondió mis preguntas sobre el argot de Australia. ¡Eres lo más! Ah, no, un momento… ¡Eres bottler!
Soy muy afortunada al tener tantos amigos escritores (Paperback Writer) a los que puedo acudir cuando necesito ayuda (Help!). Gracias especiales a Jen Calonita, Sarah Mlynowski y Jennifer E. Smith, que me ayudaron cuando lo único que yo quería era llorar (Cry Baby Cry).
Me alucina lo mucho que El Club de los Corazones Solitarios se ha extendido a escala mundial (Across the Universe). Muchas gracias a mis editores extranjeros de todo el mundo, en particular a Alfaguara.
Por descontado, nada de esto habría sido posible sin John, Paul, George y Ringo. P. S.: I Love You. «P. D.: Os quiero».