... Y SABRÉIS DEL SILENCIO
Y sabréis del silencio y de su inmortalidad,
tenue eco hueco, amagado en el meandro,
sabréis que del norte viene ese sordo silbido
hasta la gris cuneta de los verdes abismos.
Si os preguntan dónde podría esconderse
decid que el silencio es un grito adormecido
que lleváis dentro apunto de explosionar,
por los ojos ciegos, por la boca muda,
por las fosas ahogadas, por el oído sórdido.