44. Connor

—TÚ HAS MATADO a Megafo, a Bautista y al resto de los dorados…

—¡Estás loco!

Connor está sentado al lado de la caja 2933, secándose el sudor de la frente. La voz de Roland sale del interior, apagada pero lo bastante fuerte para entenderla.

—Te deshiciste de ellos para ocupar su puesto —dice Connor.

—Lo juro, cuando salga de aquí, te voy a…

—¿Me vas a qué…? ¿Me vas a matar como a ellos? ¿Como has matado a Papamoscas?

Roland no ofrece respuesta.

—Te dije que te propondría un trato —dice Connor—, y voy a hacerlo: si confiesas, me encargaré de que el Almirante te perdone la vida.

En respuesta, Roland sugiere que Connor se meta por cierto sitio cierta cosa.

—Confiesa, Roland. Es el único modo de que te deje salir de ahí. —Connor está seguro de que, sometido a la presión suficiente, Roland confesará lo que ha hecho. El Almirante necesita pruebas, y ¿qué mejor prueba que una confesión completa?

—¡No tengo nada que confesar!

—De acuerdo —dice Connor—. Puedo esperar. Tengo todo el día.