XVII

Teresa acompaña a Yolanda a su habitación. La joven está mucho más tranquila, hablar con su hermana le había hecho bien.

Teresa la ayudó a acomodarse en la cama, y la arropó con dulzura.

—¿Estas mejor? — Le preguntó a Yolanda.

—Sí— sonrió levemente.

—Verás que todo será una broma de Carlos.

No muy convencida, Yolanda asintió con la cabeza.

—Solo te has sugestionado, nada más.

—Buenas noches— le cortó Yolanda.

Teresa deja escapar una sonrisa forzada.

—Buenas noches.

Teresa se levanta de la cama, mira a su hermana, y apaga la luz.