SIETE AÑOS

Ahora veo el almendro

tembloroso. Las ramas

perfumaban el aire

alrededor.

Y allá

la madre un libro rotos

pedazos de mi vida

tibias cosas en donde

mi sueño reposaba.

Yo era entonces

muy niño todavía

pero sentí el amor

de lo perecedero

de lo que pasa y pasa

como pasó aquel día

debajo del almendro.

(de Palabras para Julia)