Verónica Valenzuela

Más allá de las trincheras

Agradecimientos.

Este libro es un homenaje al hombre que guío mis pasos por la vida: Miguel, mi padre; quien me otorgó un maravilloso regalo: el amor por los libros y por contar historias.

Él fue mi primer lector, su apoyo y su ternura fueron el mejor aliciente para convertirme en la escritora que hoy soy.

Mis ojos han sido sus ojos en cada palabra, en cada capítulo. Su espíritu ha llenado mi alma de inspiración con cada aventura.

La novela que tienes en tus manos, amigo lector, es mi forma de devolverle una parte del amor que me dio. De cumplir la promesa que le hice de no dejar nunca de escribir... aunque él ya no estuviera para leerlo.

Papá, tú eres la esencia de éste libro. Siempre estás conmigo.

A Sebastián Santos Petroff.

Mi estimado profesor en la lejana Budapest, que me ha ayudado con el idioma húngaro.

No tengo ni padre ni madre,

no tengo ni patria ni Dios,

no tengo ni cuna ni sudario, no tengo ni sombra de amor.

Y si nadie quiere comprármelo al diablo se lo ofreceré.

Robaré, puro el corazón,

y, si es preciso, mataré.

Attila Jozsef. Corazón Puro