Capítulo 19

 

 

Lejos de allí en el castillo Yurikov, Arkanian observa como Straush debilitado, pierde el conocimiento. Rocía sus labios con algo de sangre, lo justo para que no muera. Gracias a él, Ragnar caerá en su trampa.

 

Saloa entre en el calabozo y se postra ante él, Arkanian lo mira impaciente.

 

—¿Está preparado?

 

—Sí, mi Bastión el espejo ha sido colocado junto a los cuadros en el salón principal.

 

—Excelente. Prepara el equipo de grabación, tenemos que rodar una película. —sonríe Arkanian.

 

 

 

Ragnar de regreso, entra en el palacio y deambula por los pasillos confundido por los nuevos recuerdos.  De camino a sus aposentos, se cruza con Láyonel.

 

—Deberías descansar. —pide Láyonel cortésmente.

 

—¡Sí mama! —responde Ragnar sorprendido por su contestación—. Perdona Láyonel, no suelo ser maleducado pero los recuerdos de mi vida como Logan parecen estar afectándome.

 

—No te disculpes. No puedo ni imaginar por lo que debes estar pasando.

 

Ragnar asiente con la cabeza y se aleja por el pasillo, necesita descansar. Láyonel se queda mirándolo, sonriendo. Logan era un incordio, pero reconoce que echa de menos su humor irónico y mordaz. ¿Será posible que algún día Ragnar vuelva a ser Logan?

 

Por la mañana, Irynae está sentada en un pequeño saloncito de una de las torres. Ragnar entra en la estancia y se sorprende al verla, ese es uno de sus escondrijos favoritos.

 

Irynae bebe un sorbo de su copa de sangre, mira a Ragnar con tristeza y regresa la mirada a la ventana.

 

—Veo que te gusta mi salón privado. —dice Ragnar sonriendo.

 

—¿Si quieres estar sólo me marcho? —responde Irynae algo cortante.

 

—Tu compañía es como un bálsamo para mí. —responde Ragnar cortés.

 

—Lodhar me dijo que tú no los habías convertido. ¿Por qué te siguen entonces?

 

—Los vampiros y nosotros descendemos de la misma fuente. Según la leyenda los vampiros fuisteis creados primero, luego Arkanian para comandaros. Al demostrar Arkanian que era un ser cargado de maldad, me crearon a mí. Se supone que yo existo para evitar que él se haga con el poder y os esclavice.

 

—¿Y quién o qué nos creó?

 

—La leyenda dice que un Dios al que adoraban en el antiguo Egipto, de ahí que la guardia imperial descienda de sacerdotes egipcios. Sólo sé que lo llamaban Phoenix. Son leyendas al fin y al cabo, nadie ha podido demostrar su veracidad.

 

—¿Me cuentas la historia de tu clan? —pide Irynae.

 

Ragnar toma asiento, recostándose en el mullido sillón. Parece confundido, pero en el fondo le gusta hablar de los que considera sus hijos.

 

—Aradhian fue el primero. Era uno de los generales de Alejandro Magno, un vampiro sediento de sangre lo convirtió por error. Quedó abandonado a su suerte sin saber lo que era, yo lo acogí, le expliqué su nueva naturaleza y él decidió servirme, es el cerebro del clan. Zarod y Zared, mis gemelos, pertenecían a una tribu africana. Su sacerdote era un vampiro, que los convirtió para servirles. Hartos de ver como estaba diezmando a la población de su tribu, lo mataron. La propia tribu ciega por los engaños a los que habían sido sometidos por el sacerdote durante años, intentaron matarlos. Les salvé la vida y ellos se convirtieron en los músculos de mi clan. Como habrás comprobado apenas si hablan, pero no encontrarás mejores guerreros. Lodhar pertenecía a un clan escocés, lo convirtió una vampira y pasó de ser un feroz guerrero a vampiro sanguinario. Sus hazañas llegaron hasta mis oídos, iba a matarlo pero vi en él algo y decidí dominarlo, ahora es el corazón del clan.

 

—¿Y Martha?

 

—Es mi protegida. Pertenecía a un clan de Rusia, era tan condenadamente rebelde que su Bastión la condenó a muerte, entre otras cosas por no querer acostarse con él. Acabé con el clan y la adopte, es como mi hija.

 

Irynae suspira aliviada al comprobar que no hay nada entre ellos, al menos no como ella creía.

 

Aradhian entra en la habitación muy alterado, los mira sin pronunciar palabra.

 

—Mi Bastión, debería ver un video que circula por la red.

 

—No me interesan los videos de internet. —le espeta Ragnar.

 

—¡Este sí! —contesta tajante Aradhian.

 

Ragnar lo mira, Irynae se levanta y los tres caminan hasta el cuarto de Aradhian. Nada más entrar, Aradhian muestra el video a pantalla completa y sube el volumen.

 

Ragnar contempla rabioso la expresión de júbilo en los ojos de su hermano, Irynae se tapa los ojos horrorizada.

 

—Hola hermanito. Estoy disfrutando de lo lindo con tu querido emperador. —dice Arkanian clavando sus garras una y otra vez en el cuerpo de Straush, que se limita a cerrar los ojos.

 

—Te espero en mi hogar. Puedes venir acompañado, cuantos más mejor, será para mí un placer acabar con todos. —la sonrisa diabólica de Arkanian es lo último que se ve antes de que el video termine.

 

—¡Tenemos que ayudar a Straush!

 

—Lo rescataré, no temas. —contesta Ragnar apretando los puños sin quitar la vista de la pantalla.   

 
Una extraña en mi ventana
titlepage.xhtml
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_000.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_001.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_002.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_003.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_004.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_005.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_006.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_007.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_008.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_009.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_010.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_011.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_012.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_013.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_014.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_015.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_016.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_017.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_018.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_019.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_020.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_021.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_022.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_023.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_024.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_025.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_026.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_027.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_028.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_029.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_030.html
CR!RJ67J2JCYX75V8NB000H6QB1GJR7_split_031.html