El seductor
-¡Gisela, disculpa que te interrumpa!, sería interesante comenzar a recordar aquello que un día escribió un argentino en uno de sus papeles con un alto contenido erótico, cuando expresó:-“Lo que más me gusta de tu cuerpo es el sexo; lo que más me gusta de tu sexo es la boca; lo que más me gusta de tu boca es la lengua; lo que más me gusta de tu lengua es la palabra”. -¿Eso, acaso, no se lo dijiste a una de tus conocidas? -ella le pregunta. -¡No, eso lo leí de Julio Cortázar! -Por favor, pides dos Brandy más cargados y, abrázame un poco más para poder continuar, ¡y no me interrumpas!