Guardapolvos
¿Por qué los guardapolvos de los médicos resultan tan irresistibles para las mujeres?Detrás del guardapolvo blanco que utiliza la gente que busca curar, se oculta un mundo de deseos y actos sexuales nunca contado hasta ahora: médicos con pacientes, con enfermeras, cirujanos con instrumentadoras, con madres de enfermos y otros varios etcéteras imaginables.Todo vale en la búsqueda de placer y cualquier escenario es el indicado: consultorios, salas de internación, terrazas y ascensores. Casi como cualquier hijo de vecino, pero con aliados extra, su aura de conocimiento (del cuerpo y las drogas) y la posibilidad de las guardias, que son como un cheque al portador, con tiempos ociosos y convivencias amistosas.Este libro cuenta, con lujo de detalles y con detalles lujuriosos, el lado oculto de doctores y doctoras. Además, arriesga una posible explicación a tanta exagerada manifestación corporal: el sexo, brutal y continuo, es la única manera de soportar la presión de la profesión y la constante ronda de la muerte.Martín De Ambrosio realizó decenas de entrevistas a médicos de hospitales públicos y clínicas privadas y, en la mayoría de los casos, obtuvo con inesperada facilidad los sorprendentes testimonios que integran la trama de este libro descarnado. Tipos diversos de infidencias de una comunidad cerrada como la sanitaria quedan al descubierto en estas historias dramáticas o desopilantes, siempre verídicas.