2.5. Diagramas conformes y fronteras conformes
Hay una forma conveniente de representar modelos espaciotemporales en su totalidad, especialmente en el caso de modelos que poseen simetría esférica, como sucede en el caso de los espacio-tiempos de Oppenheimer-Snyder y de Friedmann. Es mediante el uso de diagramas conformes. Distinguiré aquí dos tipos de diagramas conformes: los diagramas conformes estrictos y los esquemáticos.[2.43] Veamos la utilidad de cada uno.
Empecemos con los diagramas conformes estrictos, que pueden
utilizarse para representar espacio-tiempos (aquí denotados por
) con simetría esférica
exacta. El diagrama sería una región
del plano, y cada punto en el interior de
representaría el equivalente a una superficie esférica completa (es
decir, un equivalente a S2) de puntos de
. Para hacernos una imagen de lo
que sucede, podemos perder una dimensión espacial e imaginar que
rotamos la región
respecto a una línea vertical a la izquierda (véase la
Fig. 2.26), que se conoce como un eje de rotación.
Entonces cada punto en
describirá un círculo
(S1). Esto es suficientemente bueno para nuestra
imaginación visual. Pero para la plena imagen 4-dimensional de nuestro espacio-tiempo
, necesitaríamos una rotación
2-dimensional, de modo que cada punto interior de
tiene que describir una superficie
esférica (S2) en
.
A menudo, en nuestros diagramas conformes estrictos encontramos
que tenemos un eje de rotación que es parte de la frontera
para la región . Entonces, cada uno de esos
puntos frontera en el eje —representados en el diagrama como una
línea de trazos— representaría un único punto (y no
un S2) en el
espacio-tiempo 4-dimensional, de modo
que toda la línea de trazos también representaría una única línea
en
. La Fig. 2.27 nos da
una idea de cómo está constituido el espacio-tiempo entero
como una familia de espacios
2-dimensionales idénticos a
en rotación alrededor del eje que es ahora la línea de trazos.
Fig. 2.26. Diagrama conforme estricto
utilizado para representar
espacio-tiempos (aquí denotados por
) con simetría esférica exacta.
La región 2-dimensional
está rotada (a través de una esfera 2-dimensional S2) para formar el
4-espacio
.
Fig. 2.27. La línea de trazos en la frontera de
es un eje de simetría; cada punto del
eje representa un único punto del espacio-tiempo, y no un
S2.
Fig. 2.28. Los «conos nulos» en , a un ángulo de 45° respecto a la
vertical, son las intersecciones de los conos en
con un
insertado.
Vamos a considerar como un espacio-tiempo
conforme, sin preocuparnos demasiado por el escalado
particular que da a
su métrica completa g.
Entonces, de acuerdo con la frase que cerraba §2.3,
está dotado de una familia completa de conos nulos (orientados en
el tiempo). De acuerdo con esto, el propio
, al ser un subespacio
2-dimensional de
, hereda de este una estructura
espaciotemporal conforme 2-dimensional,
y tiene sus propios «conos nulos orientados en el tiempo». Estos
consisten simplemente en un par de direcciones «nulas» distintas en
cada punto de
que se estiman orientadas hacia el
futuro. (Son simplemente las intersecciones de los planos que
definen las copias de
con los conos nulos futuros de
; véase la
Fig. 2.28.)
En un diagrama conforme estricto nos proponemos disponer todas
estas direcciones nulas futuras en
para que estén orientadas a 45° respecto a la vertical. Para
ilustrar la situación, he dibujado, en la Fig. 2.29, un
diagrama conforme para el espacio-tiempo de Minkowski entero
, con las líneas nulas
radiales dibujadas a 45° respecto a la vertical. En la
Fig. 2.30 he tratado de indicar cómo se consigue esta
aplicación. Vemos que la Fig. 2.29 muestra una importante
propiedad de los diagramas conformes: la imagen es meramente un
triángulo (rectángulo) finito, pese a que todo el
espacio-tiempo infinito
está englobado en el diagrama. Una propiedad característica de los
diagramas conformes es que hacen posible que regiones infinitas del
espacio-tiempo sean «comprimidas» de modo que quedan englobadas en
una imagen finita. El propio infinito está también representado en
el diagrama. Las dos líneas frontera inclinadas representan el
infinito nulo pasado
− y el infinito nulo
futuro
+, donde cada
geodésica nula (línea recta nula) en
adquiere un punto extremo pasado en
− y un punto extremo
futuro en
+. (Es habitual
pronunciar la letra
como «scri» —que significa
«script I».)[2.44] Hay también tres puntos i−, i0 e i+ en la frontera que representan,
respectivamente, el infinito de tipo tiempo pasado, el infinito de
tipo espacio, y el infinito de tipo tiempo futuro; cada geodésica
de tipo tiempo en
adquiere el punto extremo pasado
i− y el punto extremo
futuro i+, y cada
geodésica de tipo espacio se cierra en un lazo vía el punto
i0. (Pronto veremos
por qué i0 debe ser
considerado como un único punto).
Fig. 2.29. Diagrama conforme estricto del
espacio de Minkowski .
Fig. 2.30. Para obtener la imagen normal de
, imaginamos las fronteras
(cónicas) inclinadas desplazadas hacia el infinito.
En esta coyuntura puede ser útil recordar el grabado de Escher
en la Fig. 2.3(c) que proporciona una imagen conforme del
plano hiperbólico entero. El círculo que lo limita representa su
infinito, de un modo conformemente finito, de una manera
esencialmente similar a la manera en que +,
−, i−, i0 e i+ juntos representan el infinito
para
. De hecho, igual que podemos
extender el plano hiperbólico, como una variedad conforme
suave, más allá de su frontera conforme al plano euclidiano dentro
del que está representado (Fig. 2.31), también podemos
extender
, suavemente, más allá de su
frontera a una variedad conforme más grande. De hecho,
es conformemente idéntico a una porción del modelo del
espacio-tiempo conocido como universo de Einstein ε (o el
«cilindro de Einstein»). Éste es un modelo cosmológico que es
espacialmente una 3-esfera (S3) y completamente estático. La
Fig. 2.32(a) da una imagen intuitiva de este modelo (el que
Einstein obtuvo con la introducción original, en 1917, de su
constante cosmológica Λ; véase §2.1), y la Fig. 2.32(b)
proporciona un diagrama conforme estricto que lo representa. Nótese
que en este diagrama hay dos «ejes de rotación» independientes,
representados por las dos líneas de trazos verticales. Esto es del
todo consistente; simplemente consideramos que el radio de la
S2, que representa
cada punto en el interior del diagrama, se contrae hasta cero
cuando nos acercamos a la línea de trazos. Esto sirve también para
explicar el hecho bastante curioso de que el infinito espacial para
es conformemente sólo el punto único
i0, pues el radio de la S2 que parecería haber
representado se ha contraído hasta cero. Las secciones
transversales espaciales S3 del espacio-tiempo ε surgen de
este procedimiento. La Fig. 2.33(a) muestra cómo aparece
como una subregión conforme de ε, y de
hecho cómo podemos considerar la variedad entera ε formada,
conformemente, por una sucesión infinita de espacios
, donde el
+ de cada uno de ellos
se ha unido al
− del siguiente, y la
Fig. 2.33(b) muestra cómo se hace esto en términos de diagramas
conformes estrictos. Valdrá la pena tener esta imagen en mente
cuando lleguemos a considerar el modelo propuesto en la
Parte 3.
Fig. 2.31. Extendiendo el plano hiperbólico, como una variedad conforme suave, más allá de su frontera conforme al plano euclidiano dentro del que está representado.
Fig. 2.32. (a) Imagen intuitiva del universo de Einstein ε («cilindro de Einstein»); (b), (c) diagramas conformes estrictos del mismo objeto.
Fig. 2.33. Para ver por qué i0
es un único punto. (a) aparece como una subregión
conforme de ε. La variedad entera ε puede considerarse formada,
conformemente, de una infinita sucesión de espacios
; (b) muestra cómo se hace esto en
términos de diagramas conformes estrictos.
Consideremos ahora las cosmologías de Friedmann introducidas en
§2.1. Los diferentes casos K >
0, K = 0, K < 0, para Λ =
0, se ilustran en la Fig. 2.34(a), (b), (c),
respectivamente. Las singularidades se representan aquí como líneas
onduladas. Aquí he introducido una notación en la que un punto
blanco «°» en la frontera representa toda una superficie esférica
S2, mientras que los
puntos negros «•» (que ya teníamos en el caso de ) representan puntos únicos. Estos
puntos blancos representan realmente las esferas frontera del
espacio hiperbólico, en la representación conforme que utilizaba
Escher en el caso 2-dimensional. Los
casos correspondientes para constante cosmológica positiva (Λ >
0, donde en el caso K > 0
suponemos que la curvatura espacial no es suficientemente grande
para superar a Λ y producir un recolapso final) se ilustran en la
Fig. 2.35(a),(b),(c). Puede señalarse una propiedad importante
de estos diagramas. El infinito futuro
+ de todos estos
modelos es de tipo espacio, como se indica en el hecho de
que la línea frontera final está siempre a menos de 45° de la
horizontal, en contraste con el infinito futuro que ocurre cuando
Λ = 0 (en los casos ilustrados en la
Fig. 2.34(a), (b), (c) y la Fig. 2.29), donde la frontera
está a 45°, de modo que
+ es entonces una
hipersuperficie nula. Ésta es una propiedad general de la
relación entre la naturaleza geométrica de
+ y el valor de la
constante cosmológica Λ, y tendrá una importancia clave para
nosotros en la Parte 3.
Fig. 2.34. Diagramas conformes estrictos para los tres casos diferentes, K > 0, K = 0, K < 0 para Λ = 0, de las cosmologías de Friedmann.
Todos estos modelos de Friedmann con Λ > 0 tienen un
comportamiento en su futuro remoto (es decir, cerca de +) que se aproxima
mucho al espacio-tiempo de De Sitter
, un universo modelo que está
completamente vacío de materia y es extremadamente simétrico
(siendo un equivalente minkowskiano a una esfera 4-dimensional). En la Fig. 2.36(a) he esbozado
una versión 2-dimensional de
, con sólo una dimensión
espacial representada (donde el 4-espacio de De Sitter completo sería una
hipersuperficie en un 5-espacio de
Minkowski), y he dado un diagrama conforme estricto para el mismo
en la Fig. 2.36(b). El modelo de estado estacionario,
mencionado en §2.2, es sólo una mitad de
, como se muestra en la
Fig. 2.36(b). Debido al «corte» a través de
que se requiere (frontera quebrada), el modelo de estado
estacionario es en realidad lo que se denomina «incompleto», en
direcciones pasadas. Hay geodésicas de tipo tiempo ordinarias —que
podrían representar movimientos libres de partículas masivas— cuyas
medidas temporales no se extienden a valores anteriores a cierto
valor finito. Esto podría haberse considerado un fallo preocupante
en el modelo si se hubiera aplicado a direcciones futuras, puesto
que podría aplicarse al futuro de una partícula o un viajero
espacial,[2.45] pero aquí podemos decir
simplemente que tales movimientos de partículas nunca se
presentan.
Fig. 2.35. Diagramas conformes estrictos para modelos de Friedmann con Λ > 0. (a) K > 0; (b) K = 0; (c) K < 0.
Fig. 2.36. Espacio-tiempo de De Sitter: (a) representado (con 2 dimensiones espaciales suprimidas) en el 3-espacio de Minkowski; (b) su diagrama conforme estricto; (c) cortado por la mitad, obtenemos un diagrama conforme estricto para el modelo de estado estacionario.
Cualquiera que sea la idea que se pudiera asumir sobre la física de la materia, he indicado este tipo de incompletitud por una línea ligeramente irregular en el diagrama conforme estricto. El tipo restante de línea que estoy utilizando en mis diagramas conformes estrictos es una línea de puntos interna, para indicar el horizonte de sucesos de un agujero negro. En mis diagramas conformes estrictos utilizo consistentemente estos cinco tipos de líneas (de trazos para ejes de simetría, gruesas para el infinito, onduladas para una singularidad, ligeramente quebradas para incompletitud, y de puntos para un horizonte de agujero negro) y dos tipos de puntos (negros que representan un único punto en el 4-espacio, blancos que describen un S2), como se da en la clave en la Fig. 2.37.
Un diagrama conforme estricto pata el colapso de Oppenheimer-Snyder hacia un agujero negro se da en la Fig. 2.38(a). Este resulta al «pegar» una porción de un modelo de Friedmann en colapso y una porción de la extensión de Eddington-Finkelstein de la solución original de Schwarzschild, como se muestra en los diagramas conformes estrictos de la Fig. 2.38(b), (c); véase también la Fig. 2.39. Schwarzschild encontró su solución de las ecuaciones de Einstein en 1916, poco después de que este publicara las ecuaciones de su teoría de la relatividad general. Esta solución describe el campo gravitatorio externo de un cuerpo esféricamente simétrico y estático (tal como una estrella), y puede extenderse hacia dentro, como un espacio-tiempo estático, hasta su radio de Schwarzschild
donde M es la masa del cuerpo y G es la constante gravitatoria de Newton. Para la Tierra este radio sería de unos 9 mm, para el Sol sería de unos 3 km, pero en estos casos el radio estaría dentro del cuerpo y no habría distancias teóricas de relevancia inmediata para la geometría del espacio-tiempo, pues esta métrica de Schwarzschild sólo es válida para la región externa. Véase el diagrama conforme estricto en la Fig. 2.39(a).
Fig. 2.37. Clave para diagramas conformes estrictos.
Fig. 2.38. El modelo de Oppenheimer-Snyder de
colapso a un agujero negro: (a) diagrama conforme estricto
construido pegando; (b) parte izquierda de un modelo de Friedmann
invertido en el tiempo (Fig. 2.34(b)), y (c) parte derecha del
modelo de Eddington-Finkelstein (Fig. 239(b)). (En modelos locales,
tales como éstos, se ignora Λ, de modo que
se considera nulo).
Sin embargo, en el caso de un agujero negro el radio de Schwarzschild estaría en el horizonte. En este radio, la forma de Schwarzschild de la métrica se hace singular, por lo que originalmente se pensó que el radio de Schwarzschild era una singularidad real en el espacio-tiempo. Sin embargo, Georges Lemaître encontró, en 1927, que si abandonamos el requisito de que el espacio-tiempo permanezca estático, es posible extenderlo de una manera perfectamente suave. Una descripción más simple de esta extensión fue hallada por Arthur Eddington en 1930 (aunque él omitió señalar lo que se había conseguido), descripción que fue redescubierta, y sus implicaciones claramente enunciadas, por David Finkelstein en 1958; véase el diagrama conforme estricto de esto en la Fig. 2.39(b). Lo que se conoce como la «extensión maximal de la solución de Schwarzschild» (a veces llamada extensión de Kruskal-Szekeres, aunque una descripción equivalente pero más complicada fue encontrada mucho antes por J. L. Synge)[2.46] se da en el diagrama conforme estricto de la Fig. 2.39(c).
Fig. 2.39. Diagramas conformes estrictos de un vacío (Λ = 0) esféricamente simétrico: (a) solución original de Schwarzschild, externa al radio de Schwarzschild; (b) extensión a la métrica de colapso de Eddington-Finkelstein, y (c) extensión completa a la forma de Kruskal/Synge/Szekeres/Fronsdal.
En §3.4 llegaremos a otra propiedad de los agujeros negros que, aunque actualmente tiene un efecto extremadamente minúsculo, tendrá en definitiva una importancia crucial para nosotros. Mientras que según la física clásica de la relatividad general de Einstein un agujero negro debería ser completamente negro, un análisis realizado por Stephen Hawking en 1974[2.47] mostró que cuando se introducen en la imagen los efectos de la teoría cuántica de campos en fondos espaciotemporales curvos, un agujero negro debería tener una temperatura pequeñísima T, que es inversamente proporcional a la masa del agujero negro. Para un agujero negro de 10Mʘ, por ejemplo, esta temperatura sería extraordinariamente minúscula, unos 6 × 10−9 K, que es del mismo orden que la temperatura más baja obtenida en un laboratorio (al menos hasta 2006). Ésta es aproximadamente la temperatura que podrían tener los agujeros negros que puedan existir hoy. Los agujeros negros más grandes serían aún más fríos, y la temperatura del agujero negro de unas ~ 4.000.000 Mʘ en el centro de nuestra galaxia sería de unos 1,5 × 10−14 K. Si consideramos que la temperatura ambiente de nuestro universo en el momento actual es la del CMB, encontramos que ésta tiene el valor inmensamente más caliente de ~ 2,7 K.
Pese a todo, si adoptamos una visión a muy, muy largo lazo, y tenemos en mente que la expansión exponencial de nuestro universo, si continúa indefinidamente, llevará a un enorme enfriamiento del CMB, cabría esperar que su temperatura se reduzca incluso hasta la temperatura de los agujeros negros más grandes que hayan existido nunca. Después de eso, el agujero negro empezará a irradiar su energía al espacio circundante, y al perder energía debe perder también masa (por la E = mc2 de Einstein). A medida que pierda masa, se hará más caliente, y poco a poco, al cabo de un período de tiempo increíble (quizá de hasta 10100 —es decir, un «gugol»— de años, en el caso de los mayores agujeros negros actuales), se contraerá por completo hasta desaparecer finalmente con un «pop», pues esta explosión final difícilmente merece el nombre de «bang», ya que probablemente tendría sólo la energía de una pequeña granada de artillería ¡lo que tiene algo de anticlímax después de tan larga espera!
Por supuesto, esto supone una enorme extrapolación de nuestro conocimiento físico actual. Pero el análisis de Hawking está en buen acuerdo con principios generales aceptados, y parece que estos principios no nos dejan escapar de esta conclusión global. Por consiguiente, la estoy aceptando como una explicación plausible del destino final de un agujero negro. De hecho, esta expectativa será un ingrediente importante en el esquema que presentaré en la Parte 3 de este libro. En cualquier caso, es relevante presentar un esbozo de este proceso en la Fig. 2.40, junto con su diagrama conforme estricto, en la Fig. 2.41.
Por supuesto, muchos espacio-tiempos no poseen simetría esférica, y una descripción en términos de un diagrama conforme estricto no puede dar siquiera una aproximación razonable. Sin embargo, la noción de un diagrama conforme esquemático puede ser con frecuencia de gran valor para clarificar ideas. Los diagramas conformes esquemáticos no tienen las reglas precisas que gobiernan los diagramas estrictos, y a veces es necesario imaginar que el diagrama se presenta en 3 (o incluso 4) dimensiones para que sus implicaciones sean plenamente apreciadas. La idea básica consiste en hacer uso de dos de los ingredientes de las representaciones conformes de los espacio-tiempos que hacen finitas las magnitudes infinitas. Éstos son, por una parte, la introducción en nuestra comprensión finita de las regiones infinitas del espacio y el tiempo que hemos visto en nuestros diagramas conformes estrictos, que se han mostrado por fronteras de líneas gruesas; y por otra, el despliegue de las regiones que son infinitas en un sentido diferente, a saber, las singularidades espaciotemporales que en nuestros diagramas estrictos se denotaban por fronteras de líneas onduladas. Lo primero se ha conseguido por un factor conforme (el Ω de g → Ω2g en §2.3) al que se ha permitido tender suavemente a cero, de modo que las regiones infinitas se «comprimen» a algo finito. Lo segundo se ha conseguido por un factor conforme al que se ha permitido hacerse infinito, de modo que las regiones singulares se han hecho finitas y suaves al «estirar» las regiones singulares. Por supuesto, no se nos garantiza que tales procedimientos funcionarán realmente en cualquier caso concreto. Sin embargo, encontraremos que ambos procedimientos desempeñan papeles importantes en las ideas a las que llegaremos, y la combinación de los dos será fundamental para lo que propondré en la Parte 3.
Fig. 2.40. Agujero negro en evaporación de Hawking.
Fig. 2.41. Diagrama conforme estricto del agujero negro en evaporación de Hawking.
Para terminar esta sección, será útil presentar un contexto en el que estos dos procedimientos pueden ser particularmente ilustrativos, y es la cuestión de los horizontes cosmológicos. De hecho, hay dos nociones distintas que, en el contexto cosmológico, se conocen como «horizontes».[2.48] Una de ellas es la que se conoce como horizonte de sucesos; la otra es un horizonte de partículas.
Consideremos primero la noción de un horizonte de sucesos
cosmológico. Está íntimamente relacionada con la de horizonte de
sucesos de un agujero negro, aunque la última tiene un carácter más
«absoluto» en el sentido de que es menos dependiente de la
perspectiva de un observador. Los horizontes de sucesos
cosmológicos ocurren cuando el modelo posee un + que es de tipo
espacio, como sucede con todos los modelos de Friedmann
Λ > 0 que se muestran en los
diagramas conformes estrictos de la Fig. 2.35 y en el modelo
de De Sitter de la Fig. 2.36(b),
pero la idea se aplica también en situaciones de un
+ de tipo espacio
donde no se supone simetría (que es una propiedad general de
Λ > 0). En los diagramas conformes
esquemáticos de la Fig. 2.42(a),(b) he indicado (para 2 o 3
dimensiones espaciotemporales, respectivamente) la región del
espacio-tiempo que es en principio observable para un observador
O (¡considerado inmortal!) con línea de universo l
que termina en un punto o+ en
+. Este horizonte
de sucesos
−(o+)
del observador es el cono de luz pasado de o+.[2.49] Cualquier suceso que
ocurre fuera de
−(o+)
permanecerá inobservable para siempre para O. Véase la
Fig. 2.43. Nótese, sin embargo, que la localización exacta del
horizonte de sucesos depende mucho del punto terminal concreto
o+.
Por el contrario, los horizontes de partículas aparecen cuando
la frontera pasada —que normalmente se considera una
singularidad y no el infinito— es de tipo espacio. De hecho, como
puede apreciarse de los diagramas conformes estrictos mostrados
aquí en los que aparecen singularidades, un carácter de tipo
espacio es la norma para las singularidades espaciotemporales. Esto
está íntimamente relacionado con la cuestión de la «censura cósmica
fuerte» que abordaré en la próxima sección. Llamemos − a esta frontera
singular inicial. Si el suceso o es la localización
espaciotemporal de un observador O, entonces podemos
considerar el cono de luz pasado
−(o) de
o, y ver dónde corta a
−. Cualquier partícula
que se origina en
− fuera de esta
intersección nunca entrará en la región visible para el observador
en el suceso o, aunque si se permite que la línea de
universo de O se extienda al futuro, entonces cada vez más
partículas entrarán en su campo de visión. Es habitual considerar
el horizonte de partículas real del suceso o como el
lugar geométrico descrito por líneas de universo de galaxias
idealizadas, que tienen origen en la intersección de
−(o) con
−. Véase la
Fig. 2.44.
Fig. 2.42. Diagramas conformes esquemáticos de horizontes de sucesos cosmológicos que ocurren cuando K > 1: (a) 2-dimensional; (b) 3-dimensional.
Fig. 2.43. El horizonte de sucesos del observador inmortal O representa una frontera absoluta para los sucesos que son siempre observables para O; este horizonte depende de la elección de la historia de O. Un cambio de opinión en X puede dar como resultado un horizonte de sucesos diferente.
Fig. 2.44. Diagramas conformes esquemáticos de horizontes de partículas en (a) 2 dimensiones, (b) 3 dimensiones.