XVIII

Pero creo que fue en el bar de un hotel donde coincidimos por primera vez Denise y yo; Denise estaba con ese hombre que sale en las fotos, ese Freddie Howard de Luz, mi amigo de la infancia, y con Gay Orlow. Estaban viviendo en aquel hotel una temporada porque volvían de Norteamérica. Gay Orlow me dijo que estaba esperando a una amiga, una chica a la que había conocido hacía poco.

Se nos acercaba y su cara me llamó la atención enseguida. Una cara de asiática, aunque fuera casi rubia. Ojos muy claros y rasgados. Pómulos altos. Llevaba un sombrerito muy curioso que recordaba la forma de los sombreros tiroleses; y el pelo, bastante corto.

Freddie y Gay Orlow nos dijeron que los esperásemos un momento y subieron a su cuarto. Nos quedamos uno frente a otro. Sonrió.

No decíamos nada. Tenía unos ojos pálidos por los que cruzaba de vez en cuando un algo verde.