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La falsa racionalización estresa más
Una causa de estrés es racionalizar falsamente. “Bueno, realmente no me interesaba…” Hay que analizar lo que falta y trabajar en ello. No valen las excusas, es demasiado peligroso no conseguir un gran cliente y justificarse con “Bueno, tampoco me interesaba conseguirlo, me caía mal…”, en vez de mejorar tus argumentos o presentaciones.
Racionalizamos falsamente para encontrar un escape fácil a nuestra frustración y creamos excusas de cara a la galería. Pero es como tener mercancía robada y decir “Todo el mundo se aprovechó y yo no fui el que robó.” Si nos aprovechamos de un material que se consiguió estafando no hay justificación. Es como decir que robar indirectamente no es robar. Nunca participamos ni robamos indirectamente, estafamos y robamos directamente. No vale racionalizar “Le sobraba el dinero” o “Yo sólo me aproveché de un mal que no causé”. Así sólo estás diciendo que si alguien consigue prosperar, o sea tú mismo, merece que le roben. Todo vuelve, el karma del universo actúa sin piedad. Por mucho que racionalices con excusas el universo lo equilibrará.
Cuando justificas algo malo se enciende la luz roja. Has cometido un error y mejor revisar. No valen las excusas. Puedes engañarte justificando un fracaso y diciendo que no fue culpa tuya. No es delito. Pero la ley del karma no perdonará y lo que das volverá con creces.