De Sueños Geodesicos ha dicho Joe Haldeman: '…es amargo, sutil, exótico, único: ciencia ficción para el connaisseur verdadero'. En efecto, se trata de una antología inusual: como si la fantasía de recrear las dimensiones de la Tierra encerrara todas las perspectivas, temporales y psicologicas, de ella.

Ciencia ficción en estado puro, tiempos cuya inquietante familiaridad nos lo hacen inmediatos -desde el vampiro en el campo de concentración nazi hasta el presidente de Estados Unidos sin un pais que gobernar- en los que se desarrollan historias de generosidad, cariño o desesperación teñidas de escepticismo, pero que revelan que lo insólito no son las personas y sus comportamientos, sino las situaciones en que se encuentran.

Brillante o magistral son calificativos que ha merecido esta antología, a los que habría que añadir su variedad y densidad: pocas veces el sueño se ha revestido de tanta verosimilitud, ha resultado tan realmente temible.

Relatos:

Nacido por la mañana

La cena

Clemencia ejecutiva

Una mañana muy especial

Entre los muertos

Alivio

Bailando un lento con Jesús

El pacificador

La espuela

Las cadenas del mar

Un sueño al mediodía

Discípulos

Apres moi

Un reino junto al mar