1. Jeremy Brown asistió dos años a la escuela técnica pero la dejó sin graduarse. Más tarde fundó una compañía de éxito, la escuela lo invitó para que hablara a los estudiantes como protagonista de una "historia de triunfo", sin darse cuenta de que su victoria provenía de haber dejado el programa para establecerse por sí mismo. "La charla fue un poco incómoda —comenta— pero a los estudiantes les gustó."