Agradecimientos

Este tercer libro de la serie «El joven samurái» trata de lealtad y sacrificio. Las siguientes personas han demostrado una inmensa lealtad hacia mí y muchos han sacrificado su tiempo, energía y reputación por «El joven samurái». Me gustaría agradecerles a todos su esfuerzo y dedicación: a Charlie Viney, mi agente, por ser un guerrero valiente y valeroso siempre protegiendo mis derechos y luchando por mi carrera; a Shannon Park, la daimyo al mando de edición en Puffin, por el respeto que ha mostrado al corazón de la historia y sus cortes tipo espada; a Wendy Tse por sus ojos de halcón en la verificación de las pruebas; a Louise Heskett, Adele Minchin, Tania Vian-Smith y a todo el equipo de Puffin por ejecutar una campaña de éxito en el campo de batalla editorial; a Francesca Dow; Pippa Le Quesne; Tessa Girvan de ILA por conquistar el mundo con «El joven samurái», a la sensei Akemi Solloway por su apoyo continuo a la serie (lectores, por favor visiten: www.solloway.org); a Trevor, Paul y Jenny de Autores en el extranjero por sus incansables esfuerzos en la gestión de todos los eventos de mi agenda; al sensei David Ansell del dojo Shin Ichi Do, un profesor inspirador y un espadachín de gran visión y conocimiento; a Ian, Nikki y Steffi Chapman por hacer correr la voz; a Matt, por su entusiasmo; a mi madre por ser todavía ¡mi fan número uno!; a mi padre por ser el acero contenido en la espada; y a mi esposa, Sarah, para quien sé que este viaje ha sido duro, pero las recompensas durarán toda la vida.

Por último, ofrezco una respetuosa reverencia a todos los bibliotecarios y maestros que han apoyado la serie —¡ya seáis ninja o samurái!— y a todos los lectores de «El joven samurái»: gracias por vuestra lealtad a Jack, Akiko y Yamato. Por favor continuar leyendo y enviándome correos electrónicos y cartas. Hace que el trabajo duro valga la pena. Arigatō gozaimasu.