Jesús explica a sus discípulos los tormentos del gran dragón de las tinieblas exteriores
XLVII 1. Y cuando el Salvador hubo hablado así, María Magdalena le dijo: Señor, ¿las almas conducidas a esos lugares han de pasar por esas doce puertas para sufrir los tormentos que merecen?
2. Y el Salvador contestó a María: Ningún alma es conducida hacia el dragón por esas puertas, no siendo
las almas de los blasfemos y de los que siguen una doctrina falsa.
3. Y de los que enseñan a mentir, y las de los que pecan contra natura, y las de los hombres manchados de vicios y enemigos de Dios.
4. Y las de todos los impíos, adúlteros y envenenadores.
5. Porque todas las almas de esos pecadores, si no han hecho penitencia en este mundo, y han persistido en su pecado, cuando se cumpla su hora, serán conducidas por la puerta de la cola del dragón a las tinieblas exteriores.
6. Y cuando hayan sido llevadas a las tinieblas exteriores por la puerta de su cola, colocará la cola en su boca, para cerrar la puerta.
7. Y de este modo serán llevadas las almas a las tinieblas exteriores.
8. Y los doce nombres del dragón están escritos en las puertas de las distintas divisiones.
9. Y estos nombres son diferentes, y alternan entre ellos para que quien diga un nombre diga los doce.
10. Y éstas son las tinieblas exteriores, que son las mismas que las del dragón.
11. Y cuando el Salvador hubo hablado, María le replicó: Señor, ¿son más terribles los tormentos del dragón que todos los demás que existen?
12. Y el Salvador contestó a María: Esos tormentos son los mayores que existen.
13. Mas las almas que vayan a esos lugares serán atormentadas también por un frío riguroso y un fuego violentísimo.
14. Y dijo María: ¡Desventuradas almas de los pecadores!
15. Mas dinos, Señor, ¿qué fuego es más violento, el del infierno o el del mundo?
16. Y el Salvador contestó a María: En verdad te digo que el fuego del infierno es nueve veces más ardiente que el fuego del mundo.
17. Y el fuego de los suplicios del gran caos es nueve veces más ardiente que el del infierno.
18. Y el fuego del tormento de los archones en el camino del medio es nueve veces más ardiente que el de los suplicios del gran caos.
19. Y el fuego del dragón de las tinieblas exteriores y de los lugares de castigo que hay en él es siete veces más terrible que el fuego de los tormentos de los archones del medio.