Para Frank Parker
Hace cuarenta años,
aquí, donde ahora estamos, ya estuvimos;
soplaba el mismo viento erótico de mayo
que movía los árboles de una parte hacia otra…
En la boca era el mismo
metálico sabor y era la misma suciedá acumulada
sobre los maderámenes de Cambridge.
A veces tú pareces ser más joven
de lo que por tu cara representas…
Estoy viendo (sé ahora) tu rostro de hace años,
tu imitación risible del tartamudeo
de Henry James y tu miedo
constante a atragantarte y perecer…
Es el tono de voz, no las palabras,
lo que en la escuela da carácter
a la forma de hablar, ése del que hacen gala
los cabecillas de los alumnos.
Buscamos lo que fuimos en la cara del otro.
Una vez en el patio principal de la escuela,
en junio, en Massachusetts, en el tiempo
del máximo calor, nos sentamos al borde
de la piscina hablando, iluminados
por nuestra interior luz, la noche entera,
escuchando la voz sin sufrimiento
de las ranas de todos los veranos,
mecánicas, despiertas, subidas a los árboles:
“Yo deseo escribir.” “Yo deseo pintar.”
¿Pero no fui yo, acaso, quién quiso que pintases…?
La edad es otra especie de mutismo.
Han hecho los más viejos que, a su lado,
mi abuelo pareciese un vulgar jovencito…
Cuando le acompañé a llevarles comida,
me di cuenta de ello.
Para siempre en nosotros tendremos su mirada
pensativa, como si no supiesen
quiénes habían vivido nuestras vidas.
Más rápido el pasado se mueve que el presente.
En cualquier parte donde se críe hierba
aparecerá polen, ese asma del cenit del verano.
La tentación es hacia la bebida, no a comer…
“Entremos al jardín, ¿o no sería mejor
decir a la terraza?” ¿Por qué Frank lo repites?
No tiene el jardín flores ni colores variados,
tan sólo una porción de césped denso y húmedo
que se va convirtiendo en sólo arcilla roja,
como el cráneo pelado de algún indio
que sólo conservara un mechón de cabello,
o tu cabeza misma, amigo Frank…
En una ocasión fuimos los aliados de los pieles rojas.
¿Qué hemos ganado con sobrevivir,
si dos vasos de tinto (¡incluso del mejor!)
son hoy para nosotros un veneno?