Agradecimientos
Qué mejor para comenzar mis agradecimientos que mencionar a mis padres, Anne y Bob Sanderson, cuyo ánimo, interés, fondo de biblioteca y recuerdos han guiado el desarrollo de Netherwood, desde la primera frase hasta la última palabra.
A mi agente, Andrew Gordon, me gustaría agradecerle haber visto el potencial que había en mí y haberme guiado desde la concepción hasta la publicación con paciencia, consejo y sensatez. Gracias también, a Joanne Dickinson de Little, Brown, que se enamoró del mismo modo que yo de Eve, Anna y Henrietta, y del resto de los personajes de Netherwood.
He contado también con la ayuda experta de Brian Elliot, una importante fuente de información sobre Yorkshire y su herencia minera. Andrea Tanner me proporcionó amablemente detalles de Fortnum & Mason, investigando en los archivos del establecimiento para conseguirme una lista de precios y productos del momento. La investigación concienzuda de Catherine Bailey en la historia de la familia Fitzwilliam en Black Diamonds ha sido una fuente de inspiración al detalle. Gracias.
A mi amado esposo, Brian, gracias por prestarme tu sabiduría y tu ingenio y por abastecerme de café espumoso, bandejas con el almuerzo y una fe inquebrantable en mi libro y en mí. Además, a Eleanor, Joe y Jacob, nuestros tres maravillosos hijos, gracias por mantenerme tan firmemente aferrada a la realidad cuando la ficción amenazaba con tomarme prisionera.
Finalmente, un agradecimiento póstumo y muy sentido a Nellie Sanderson, mi abuela, en cuya cocina germinaron las semillas de mi libro y cuya comida, como la de Eve, alimentaba el alma, así como el cuerpo.