Introducción
Considero muy importante cuidar a los ancianos en el seno familiar. Hija de divorciados que soy, deseo, como casi todos los hijos de matrimonios separados, que mis padres vuelvan a estar juntos. Cuando estén necesitados de atención, sólo tendré que meter a sus nuevas parejas en un geriátrico; después los cuidaré a ellos dos en casa, donde los acostaré en la misma cama hasta que mueran. Ésta es para mí la idea suprema de la felicidad. Sé que en algún momento podré hacerlo, sólo tengo que esperar con paciencia.