Lección

Dado que nuestro arreglo personal provoca la primera impresión, debemos cuidar que no haya desorden alguno en nuestro atuendo, que sea pulcro, acorde al evento y que tenga la elegancia de la sencillez.

Al hablar de pie debemos asumir una posición firme, pero natural, dejando los brazos sueltos a los lados del cuerpo, con las manos abiertas; cargando el peso del cuerpo en ambos pies; empujando las rodillas hacia atrás para quedar bien anclados, mostrar seguridad y ganar el respeto y la atención del público desde el principio.