La avalancha humana que se abatió sobre Francia desbordó todas las previsiones del gobierno francés.
Un gendarme socorre a una criatura que crecerá en el exilio.
Pero la guerra sigue en Madrid. O, mejor dicho, dos guerras. El coronel Segismundo Casado se ha rebelado contra el gobierno de Negrín. En la fotografía, Julián Besteiro anuncia por radio que el Consejo Nacional de Defensa da por terminada la resistencia en Madrid. De pie, a su derecha, el coronel Casado.
La rebelión ha estallado en Cartagena y el destructor Sánchez Barcáiztegui (que fue, en Barcelona, cárcel de Azaña) ha sido alcanzado por los aviones nacionales.
A los republicanos no les resta más que huir. Pero no todos pueden: dos niños esperan en el puerto de Barcelona para embarcar en el Vicente Puchol.
3500 refugiados han conseguido embarcar en el Stanbrook, que zarpa del puerto de Alicante el 28 de marzo de 1939.
Los refugiados republicanos fueron instalados en campos de concentración improvisados en las playas del sudeste francés. En la fotografía, el campo de Argelès-sur-Mer, atestado.
Cautivos y desarmados, los republicanos son hacinados en cárceles, como los que vemos aquí en el castillo de Montjuïc, de Barcelona.
Madrid, 9 de abril de 1939, domingo de Resurrección. La imagen mutilada del Cristo de la Victoria es sacada a hombros por militares y falangistas con pistola al cinto.
El guión de las fuerzas de artillería antiaérea de la Legión Cóndor se inclina ante el general Franco, quien, brazo en alto, preside la parada militar en la Castellana el día 19 de mayo de 1939.
El general Franco trató de subirse al carro de quienes creía iban a ganar la Segunda Guerra Mundial: las potencias fascistas. Franco acompañado por Hitler, hace el saludo nazi ante la guardia alemana que le presenta armas en Hendaya el 23 de octubre de 1940 (es un montaje fotográfico no falso).
Mussolini no parece prestar demasiada atención ni a Franco ni a su cuñado Serrano Súñer en los jardines de la Villa Mortola, en Bordighera, el 12 de febrero de 1941.
Una de las contribuciones españolas a la Segunda Guerra Mundial fue la división de voluntarios llamada «División Azul», que lucho en Rusia desde julio de 1941 hasta noviembre de 1943. Una multitud, brazo en alto, despide en la estación del Norte de Madrid, a los integrantes de la División Azul.
La División Azul, con el uniforme alemán de la 250 División de Infantería, desfila tras la bandera de la España de Franco camino de Leningrado.
Las guerrillas republicanas, los «maquis», fueron un último intento, totalmente desesperado, de luchar contra Franco. En la fotografía, una partida deambula por el Pirineo catalán hacia octubre de 1944.
En agosto de 1948, el general Franco y el conde de Barcelona, Juan de Borbón, acordaban, a bordo del yate Azor, que el joven Juan Carlos, hijo del pretendiente, se educara en España. Cuatro meses antes, Franco había dado por terminado el estado de guerra.