Terminal Masurai

por Jaime Rosal del Castillo

Jaime Rosal del Castillo fue uno de los más entusiastas animadores de los primeros clubs de aficionados a la ciencia ficción que hubo en España, y uno de los pocos de aquella hornada pionera que aún sigue en activo. Es un fanático convencido de la ciencia ficción que, sin embargo, no por ello desdeña escribir otros géneros. Su obra está formada exclusivamente por relatos cortos, de los que lleva publicados varias docenas (algunos de los cuales traducidos a otros idiomas), y casi todos ellos pueden encuadrarse en lo que los anglosajones llaman new thing o new wave, la nueva experimentación en el género. Muchos de sus relatos han sido recogidos en varios volúmenes, donde mezcla la ciencia ficción con la experimentación pura.

Dentro de esta experimentación general. Terminal Masurai quizá sea el menos experimental de sus relatos, lo cual no quiere decir que su calidad sea inferior a la de los otros, sino más bien que es de los más asequibles a un público general. Personalmente, lo considero como uno de los más logrados surgidos de su pluma, quizá por el hecho de ser uno de los más recientes. Lo cual me hace sospechar en Jaime Rosal del Castillo unas espléndidas posibilidades de futuro. Porque él no deja de escribir ni un solo momento…

Nos detenemos porque el cenizo de Walthie se ha pillado el amarre del traje subG en el pasamanos rodante de la escalera mecánica. Está completamente colocado, se mueve como una nave a la deriva. Las Speedcolas que se tomó durante el viaje lo mantienen a una velocidad subjetivamente superior a la nuestra. Ya se lo advertimos: cuando se ha de arreglar un asunto, nada de cola. Pero él, que si quieres; como los viajes por el sub están exentos de impuestos en las consumiciones hechas a bordo, el muy imbécil se ha forrado de colas y ahora está como está: con unos cientos de créditos menos en el bolsillo y moviéndose con una aparente lentitud que evidencia el viaje que se está pegando.

En la fila hay varios tipos que empiezan a gritar diciendo que no interrumpamos el paso. Pero yo no puedo dejar a Walthie ahí anclado, así que me vuelvo para pedir ayuda a Dimitri, que se ha quedado como un provinciano leyendo las noticias que aparecen en el instantpress.

Instantpress, Masurai 120607: Aumenta alarmantemente el índice de violaciones. La Federación del Auténtico Amor Gay se manifestó ayer ante el Parlamento para protestar contra la sangrienta violación que costó la vida a uno de sus militantes de trece años. Los manifestantes pidieron la dimisión del Ministro de Relaciones Sexuales. El Señor Ministro, en una rueda de prensa celebrada esta mañana en la sede del Ministerio para Asuntos Sexuales, ha declarado: «La culpa es de ellos por ir provocando al ciudadano». (Noticia ofrecida por gentileza de «Las mil y una noches», Burdeles lntergalácticos Asociados, especialistas en sadomasoquismo. Recuerden: tarifas especiales para grupos y visitas colectivas).

Me acerco a Dimitri y le digo que el pol del control de pasaportes nos está mirando, así que me ayude. Entre los dos forcejeamos hasta que el amarre acaba desgarrando el traje subG de Walthie. Por suerte el pol no se ha dado cuenta, si no nos cae un registro y eso hay que evitarlo a toda costa porque no estamos limpios. Dimitri coge el equipaje de mano de Walthie que es donde está el material, mientras los tipos de la cola nos adelantan. Hemos puesto el material allí porque Walthie es lo suficientemente fuerte como para cargar con las herramientas y todo lo demás, sin que el peso le delate. Esa es otra, que con tanto peso tuvimos que pagar exceso de equipaje al embarcarnos en Reunión.

La cinta rodante nos deja frente al control de pasaportes. El pol tiene una jeta de comemuertos que me recuerda a un sargento que tuve en la Armada. Se llamaba Deseomortal Drang y usaba una prótesis dental, dos colmillos mutantes que le daban aspecto de chupasangres de celuloide rancio. Utilizaba los colmillos para acojonar a los reclutas. A los pols los escogen así para que den un susto al miedo, para que los niños malos se caguen en los pantalones sólo de pensar lo que esas máquinas asesinas son capaces de hacer con ellos si no los encuentran limpios. Todos los pols tienen la misma jeta de comemuertos, corpulentos (eso se consigue a base de hombreras de rollerball), de estatura elevada (les ponen botas con tacones altos y plataformas internas) y llenos de chatarra por los cuatro costados (chalecos blindados contra proyectiles tradicionales, espinilleras, manoplas de acero y cascos de desintoglass). El disfraz es aterrador y forma parte del carnaval del miedo que mina la conciencia de los que no están limpios.

Instantpress, boletín de urgencia, Masurai 120608: Fuerzas de la muy leal Policía Interior del Imperio desarticulan una célula activista del Frente Macrobiótico de Liberación. Los terroristas poseían numerosos pisos francos distribuidos por la Capital Imperial, ha declarado el Ministro de Interior y Buenas Costumbres en una rueda de prensa celebrada esta mañana en la sede del Ministerio para la Represión del Terrorismo. «No sé de qué se quejan, añadió el Señor Ministro, las salchichas imperiales, excelso puntal de nuestra afamada gastronomía, son una delicia para el paladar». (Noticia ofrecida por gentileza de «Chacinerías Imperiales», proveedores del Comedor Imperial desde hace diez generaciones).

El pol tira de la anilla de seguridad de su spray tranquilizante y nos mira con cara de pocos amigos. Es una advertencia. Tras sus gafas blindadas se distinguen sus ojos de acero de ave de presa. El pol hace seña a un oficial que está parapetado tras un montón de sacos de arena (medidas de protección rutinarias). El oficial quita el seguro de una enorme ametralladora de pie. Es una Thompson bastante antigua, seguramente adaptada para proyectiles sónicos, pero la carrocería también forma parte del carnaval. Las ametralladoras modernas parecen más inofensivas y claro, hay que cuidar los detalles hasta en los aspectos más insignificantes. Pienso en lo que le ocurrió al Chino cuando quiso introducir un kilo de mercancía en Petroria. Los del control se pusieron nerviosos, tiraron de gatillo y organizaron una escabechina digna de las épocas del mítico Al Capone. Luego, el instantpress dijo lo de siempre, que un grupo de incontrolados había entrado a saco en el espaciopuerto para secuestrar una nave, y a cargarles el muerto a los activistas políticos que nunca se enteran de nada. No me gusta nada, el trozo más grande que quedó del Chino no sirvió ni para que le hicieran la correspondiente clonación. Claro que nadie hubiera pagado el proceso.

Instantpress, Masurai 120609: El Honorable Hermógenes Ritten-house, Ministro Imperial para Asuntos Interplanetarios, ha recibido esta mañana en su despacho de la Capital Imperial a su colega de la Confederación de Mundos Libres, Honorable Rufus T. Firefly. El Señor Firefly, que la pasada semana huyó de la Confederación de Mundos Libres con los fondos del Crédito Galáctico Asociado (estimados en un billón de créditos), ha invocado el derecho de asilo solicitando ser admitido bajo la protección del Imperio. «El Imperio, faro y guía de los derechos humanos, no puede desatender las justas peticiones del Señor Firefly. Bienvenido al Imperio, honorable ciudadano», ha declarado el Señor Rittenhouse. (Noticia ofrecida por gentileza de la Confederación Imperial de Cajas de Ahorro, donde su dinero siempre está seguro).

Tampoco me gusta lo que le hicieron a Big-Pig Manfre cuando lo trincaron en Cartago; ahora el pobre está demolido, se le notan las cicatrices de la lobotomía que le practicaron en el hospital general para volverlo al recto sendero. No me gustaría que me hicieran la lobo, que me limpiasen, estoy bien como estoy, con mi escasa personalidad y mis bienaventurados instintos criminales que me han ayudado a sobrevivir en este mundo de mierda.

El vestíbulo del espaciopuerto es muy amplio, monumental como todas las edificaciones del organicismo imperial, en él hay un gran número de controles pol, también eso es muy propio del organicismo: controles en proporción a las dimensiones del local, que ni un metro cuadrado del espaciopuerto quede exento de vigilancia. Al fondo hay un gran cartel que dice Estar armado es ser libre. El letrero está descolorido pues hace años que los Armeros Independientes de Isher quebraron, mejor dicho, los hicieron quebrar. Ahora estar armado equivale a no estar limpio, lo que significa que si te cogen te hacen una lobo en toda regla o, en el mejor de los casos, diez años bajo el control de los tutores en un nido, y no sé por qué demonios digo en el mejor de los casos, pues si caes en manos de los tutores estás listo.

Instantpress, boletín de urgencia, Masurai 120610: El jefe del comando terrorista del Frente Macrobiótico de Liberación detenido esta mañana, y cuya personalidad aún no ha podido ser identificada, ha fallecido poco después de las 11.00 AM al defenestrarse accidentalmente desde una de las ventanas del Ministerio para la Represión del Terrorismo. Poco antes de acaecer tan embarazoso accidente, el jefe del comando había declarado ante una rueda de prensa: «Luchamos por una alimentación sana y equilibrada, las Salchichas Imperiales Soylent-Green saben a muerto». (Noticia ofrecida por gentileza de «Martin, Martin & Martin», Compañía Aseguradora de la Integridad Física del Ciudadano. Recuerde: un seguro para la integridad física librará a sus descendientes de la más abyecta de las miserias).

Sí, estar armado es una cosa antisocial, como tomar sinopsol, porque el sinopsol no está bajo el control gubernamental como la Speed-cola. Y nosotros vamos armados y con dos kilos de sinopsol refinado en la maleta de Walthie. No somos limpios, somos antisociales, y eso puede costamos un disgusto si el jefe no se ha preocupado de ablandar a los pols según convinimos antes de salir de Reunión.

Instantpress, Masurai 120611: El Ministro de Drogas, Alucinógenos y Paraísos Artificiales Derivados, a Petición de la Casa Civil de Su Majestad Imperial, presentará esta tarde en el Parlamento la memoria anual sobre el índice de toxicidad de los productos elaborados por el Monopolio Imperial de Euforizantes Orgánicos. Su Alteza Imperial Octavio XVII, a quien el espíritu galáctico guarde muchos años, ha declarado esta mañana en una rueda de prensa: «La emperatriz y yo somos unos entusiastas consumidores de los productos del Monopolio. Antes de asistir a cualquier ceremonia tomamos nuestras Speedcolas que reducen la tensión y alivian la fatiga». Inquirido sobre la peligrosidad de los productos del Monopolio, Su Alteza Imperial, a quien el espíritu galáctico guarde muchos años, respondió: «No creo que el índice de delincuencia infantil aumente con el consumo de la Speedcola, la Bebida Imperial. Incluso mis augustos hijos la toman con frecuencia. Cualquier declaración en sentido contrario debe tomarse como una artimaña de los enemigos del estado, siempre envidiosos de nuestro espíritu liberal». (Noticia gratuita).

Ahí está otra vez el maldito pol, parece que el tío sospecha algo. Bueno, sin paranoias, no vaya a caer en la trampa y me delate. Lo que ocurre es que ahora, frente al control, me parece una tontería haber venido a Masurai, pese a que, según el jefe, aquí nos larguen por los dos kilos cerca de los tres millones de créditos. Pero si nos trincan, ¡yo me llevo a alguien por delante! A mí no me hacen la lobo, a mí no me envían a los tutores, ¿estamos?

Ahora el oficial del control, acorazado como un destructor de la Armada, se acerca a Dimitri con un papel en la mano. Es una estereofoto, tal vez una identificación. Desde aquí, aguantando a Walthie para que no se caiga (el tío va de bajada en el ciclo), observo cómo el oficial y Dimitri señalan la estereofoto. Dimitri le entrega al oficial los pasaportes y con ellos el sobre con la pasta. El contacto no ha fallado. ¡Bendito sea el jefe!

Walthie empieza a moverse a toda velocidad, se ha recuperado de la bajada y comienza otro ciclo. Me está poniendo nervioso, llama demasiado la atención, y el que un oficial esté comprado no quiere decir que todos los pols del espaciopuerto lo estén. El oficial se dirige al pol y le dice algo al oído. El pol, para demostrar que no va a meterse con nosotros, vuelve a poner el seguro de su spray tranquilizante. Pasamos frente a él y el tío raja su jeta con una sonrisa llena de colmillos mutantes que quiere decir algo así como «no os preocupéis». Luego nos sella los pasaportes sin decir nada, y a mí me parece que tras sus gafas blindadas el pol nos ha guiñado un ojo. Ahora pasamos frente a la Thompson, despacito, sin ponernos nerviosos. Observo la calle tras los cristales blindados de las puertas de acceso.

Me detengo, nos detenemos, el oficial ha corrido desde su parapeto para decirnos no sé qué de un nuevo control que hay a la salida del estacionamiento de levacars. Señala una habitación y dice que más vale que esperemos en el cuarto. Esperar, ¿qué?

Entramos en el cuartito, deslumbrados por los flashes de los fotógrafos. En mis oídos suena el zumbido intermitente característico de los boletines de urgencia de…

Instantpress, boletín de urgencia, Masurai 120612: Brillante intervención de los agentes del Monopolio Imperial de Euforizantes Orgánicos. Hace unos instantes, procedentes de la colonia de Reunión, han sido detenidos por miembros de la Brigada de Represión de Estimulantes No Autorizados los súbditos imperiales Joseph Rocoe (a) Joe el Sentimental, Dimitri Alexandrovich Poliakov (a) El Violinista, y Walter Klauss (a) Walthie. Los detenidos han sido puestos a disposición del Consejo de Tutores del Ministerio de Sanidad Social, acusados de tráfico ilegal de estupefacientes. Los agentes del Monopolio Imperial de Euforizantes Orgánicos incautaron a los susodichos 200 gramos de sinopsol refinado valorados en unos 200.000 créditos. (Noticia ofrecida por gentileza de Speedcola, el euforizante adictivo que consume la familia Imperial. Recuerde: una Speedcola al día recupera la energía).