Escena 119 a 120

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ESCENA 119

EXT. VIADUCTO DE HOGWARTS - DÍA

Vemos que DUMBLEDORE está ojeroso. No muestra su serenidad habitual, se nota que está al límite de sus fuerzas.

DUMBLEDORE

¿Es verdad lo de Leta?

NEWT hace un gesto afirmativo.

NEWT

Sí.

DUMBLEDORE

Lo siento mucho.

NEWT saca el frasco. DUMBLEDORE se queda mirándolo, atormentado y asombrado al mismo tiempo.

NEWT

Es un pacto de sangre, ¿verdad? Juraron no enfrentarse el uno al otro.

Avergonzado y amargado, DUMBLEDORE asiente con la cabeza.

DUMBLEDORE (abrumado)

¡Por las barbas de Merlín! ¿Cómo has conseguido…?

El escarbato asoma la cabeza por el abrigo de NEWT, triste porque va a tener que separarse del colgante.

NEWT

Por lo visto, Grindelwald no entiende la naturaleza de las cosas que considera simples.

DUMBLEDORE levanta ambas manos para mostrar los admonitores.

PLANO DETALLE de THESEUS.

Levanta su varita.

VOLVEMOS a DUMBLEDORE y NEWT.

Los admonitores se desprenden de las muñecas de DUMBLEDORE.

El frasco (el pacto de sangre) queda suspendido en el aire entre ellos.

NEWT

¿Puede destruirlo?

DUMBLEDORE

Tal vez sí, tal vez…

Abrumado, triste, intenta hablar con tono alegre.

DUMBLEDORE (refiriéndose al escarbato)

¿Crees que le apetecerá una taza de té?

Dan media vuelta para dirigirse a Hogwarts.

NEWT

Mejor un poco de leche. Esconda las cucharillas.

Los demás los siguen, caminando despacio.

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ESCENA 120

INT. CASTILLO DE NURMENGARD - AMANECER

GRINDELWALD

Has sufrido la más abominable de las traiciones, perpetrada intencionadamente por tu propia familia. Sangre de tu sangre. Y además de celebrar tu tormento, tu hermano se ha propuesto destruirte.

CREDENCE inhala bruscamente. Su polluelo se sube, inseguro, a la palma de la mano de GRINDELWALD. GRINDELWALD lo lanza hacia arriba y el polluelo se enciende.

GRINDELWALD

Según una leyenda, el fénix siempre acudirá en auxilio de un miembro de tu familia que se halle en graves apuros.

El pájaro por fin tiene espacio suficiente y extiende sus alas, que alcanzan toda su envergadura. Está en llamas: es un fénix renacido.

GRINDELWALD

Es tu derecho de nacimiento, muchacho. Igual que el nombre que ahora te devuelvo.

(susurra)

Aurelius. Aurelius Dumbledore. Pasaremos juntos a la historia al reconstruir este mundo.

CREDENCE se da la vuelta. El poder de su obscurus puede, por fin, ser canalizado. Apunta con la varita a la ventana y un hechizo de una potencia descomunal rompe el cristal y desprende un trozo de la montaña de enfrente.

CREDENCE contempla su obra a través del cristal roto. Es extraordinario, y esto solo es el principio.