Prueba de la Comunión

Resumen

Aunque las explicaciones sobrenaturales proporcionan pruebas sorprendentemente irrefutables de que el Monstruo Volador de Espagueti (1) está presente en el universo y de que (2) usa activamente Su Apéndice Tallarinesco para extender sus bondades y una alimentación asequible para sus verdaderos creyentes, es importante ofrecer pruebas cuantificables que apoyen nuestras reivindicaciones. Para ello hemos ideado un experimento que demuestra Su existencia. Este experimento es a la vez reproducible y fácilmente verificable por una tercera parte, y la Iglesia del MEV anima a todos los incrédulos a realizar la siguiente prueba experimental para demostrarse a sí mismos lo que nosotros ya sabemos que es verdad.

Antecedentes

Se ha apuntado que la comunión que se sirve en la Iglesia del Monstruo Volador de Espagueti conducirá a unos mejores y más duraderos beneficios que, digamos, la comunión cristiana. A través del razonamiento deductivo esto nos llevará a ofrecer pruebas de Su Tallarinidad.

Método

Para apoyar esta tesis, hemos elegido a dos sujetos^[35] de peso, altura e inteligencia medios, y los hemos sometido a setenta y dos horas de ayuno para reducir los factores externos. Después de setenta y dos horas, a uno de los sujetos se le administró la comunión cristiana, consistente en una oblea fina como un papel, y al otro la comunión del MEV, consistente en una gran ración de espaguetis con albóndigas.

Resultados

Se registraron las constantes vitales de ambos sujetos antes y después de la comunión. Tras terminar el experimento, el cristiano se mostraba desganado, con ritmo cardíaco, temperatura corporal y función cerebral disminuidos. El pastafari registró un ritmo cardíaco, temperatura corporal y función cerebral mejorados, y comentó que se sentía «lleno», lo que nosotros interpretamos como pleno.^[36]

Apéndice

Sacrilicioso

Algunos dirán que comparar las 1.200 calorías del espagueti contra las 2 calorías de la oblea no es ni justo ni un experimento válido, y pueden tener algo de razón.^[37] Hemos intentado mantener el experimento lo más cerca posible de lo que es una comunión, pero por el interés de la ciencia hemos ideado un experimento adicional por el que cada sujeto recibe el mismo número total de calorías. Nuestros hallazgos fueron que el cristiano se ponía gravemente enfermo después de consumir 2.500 calorías en obleas (unas 1.250),^[38] mientras que los resultados favorables se repitieron en el pastafari, lo que ilustra Su Tallarinesca Presencia.