ESCENA VI
LUKÁ (entra). ¿Qué le ocurre?
SMIRNOV. ¡Dame un poco de agua o de kvas!
(Luká sale.)
SMIRNOV. Pero, ¡dónde está la lógica! Uno necesita dinero como el aire que respira, está a punto de echarse la soga al cuello, y la señora no paga, ¡figúrense!, porque no tiene el ánimo para ocuparse de cuestiones de dinero. ¡Auténtica lógica femenina, lógica de miriñaque! Por esto no me ha gustado nunca, ni me gusta, hablar con las mujeres. Prefiero estar sentado sobre un barril de pólvora que hablar con una mujer. ¡Brrr! Hasta se me pone la piel de gallina. ¡Hay que ver cómo me ha enfurecido este vestido de cola! Me basta distinguir, aunque sea de lejos, una poética criatura para que la furia me ponga calambres en las pantorrillas. Es como para echarse a gritar pidiendo socorro.