Nota
En Cinco pistas falsas, la trama se adaptaba al lugar; en Un cadáver para Harriet Vane, el lugar se adapta a la trama. En ambos casos, tanto los lugares como los personajes son imaginarios.
Todas las citas que encabezan los capítulos pertenecen a obras de T. L. Beddoes.
Mi más profundo agradecimiento a John Rhode, que me prestó su generosa ayuda en lo más difícil.
DOROTHY L. SAYERS