Miré la parte superior de la página; era una copia de la curiosa y rara obra Las meditaciones de Danneker, y el dedo índice de la señora se quedó descansando sobre el siguiente párrafo:

«La versatilidad bifurcativa se da para poder separarse, para poder mantenerse aparte de este cuerpo durante una temporada. Y así, como ríos concurrentes que en su fluir se entrecruzan entre sí y el más débil es arrastrado por la corriente del más fuerte, existen también algunos seres cuyas sendas se cruzan entre sí y sus almas pasan a hacerse compañía mientras sus cuerpos se separan, se alejan, sin saberlo.»

…Un apresurado sonido de pasos se oyó en la cubierta; el capitán, que había sido llamado desde abajo, se unió al primer oficial… «¡Dios mío!», le oí exclamar…

AMBROSE BIERCE, A Psycological Sbipwreck