Prólogo dos.

Por Eva Collado

 

Hoy tengo el lujo de escribir este prólogo para un libro que ha escrito un gran profesional y mejor persona, pero sobre todo, un buen amigo que me ha regalado las redes sociales y que ha llegado a mi vida para quedarse.

A través de su lectura y de la historia de su protagonista (una historia que bien puede ser la tuya),  José Barroso nos ofrece 7 claves a modo de preguntas y ejercicios de introspección que nos ayudan a resolver un cambio sobrevenido a nuestra vida de una forma quizás inesperada o que sabemos que tenemos que hacer para avanzar y no sabemos cómo.

Una invitación útil y reveladora que nos ayudará a reflexionar fehacientemente sobre porque,  a veces de forma consciente y a veces de forma inconsciente, nos negamos nuestra propia felicidad.

Somos muchos los que ante este cambio de época que nos está tocando vivir, nos vemos atrapados y sin saber qué hacer ante una pérdida de trabajo.

Los hay que se han dado cuenta más rápidamente de que ya nada volverá a ser como antes y se han deshecho de los viejos paradigmas poniéndose a caminar firme y capeando miedos e inseguridades.

Los hay, también, que se han quedado atrapados y paralizados por el miedo con todo lo que eso conlleva y no saben por dónde empezar.

José Barroso nos ofrece la posibilidad a través de los capítulos de su libro, de ponernos a andar partiendo del autoconocimiento y a sacar las fuerzas suficientes,  para gestionar esas acciones que nos llevarán a un futuro mejor.

La vida sólo se vive una vez, las cosas llegan y pasan. Lo que hoy vivimos como un problema,  es posible que mañana o en unos meses se convierta en anécdota y nos haya ayudado a crecer y a cambiar cosas que no funcionaban.

Lo verdaderamente importante (como en todo en la vida),  es darnos cuenta de que todo puede ser posible, pero para que las cosas sucedan hay que perseguirlas y trabajarlas desde la pasión, la realidad y el convencimiento más absoluto.

A veces, ni aun así suceden. Entonces sólo nos queda no perder la ilusión y seguir perseverando en ello. En el peor de los escenarios, hay que abandonar y tampoco pasa nada... A veces se gana, otras se pierde y en el mejor de los casos, se aprende.

Si estamos negativos, el malestar nos atrapa, nada avanza... Estamos tan ocupados y obcecados que nos perdemos todo. Si estamos positivos, el bienestar se materializa, somos capaces de apreciar las pequeñas cosas y hasta lo más pequeño nos parece más grande.

En todo caso, no dejes que nunca nada vaya en contra de tu evolución y avance, tú marcas los tiempos, tú eliges de quien te rodeas para que tu ciclo vital no sea interrumpido por los demás.

A veces, no somos conscientes de que cada momento que pasa no vuelve y eso conlleva perder multitud de oportunidades.

Hay que aprovechar cada hora, cada minuto para cambiar aquello que no funciona y no nos deja avanzar.

En mi humilde opinión, es la única forma posible de mirar al futuro con confianza y al pasado sin tristeza. Hay que construirse un cielo propio y ser valientes para compartirlo después.

Y recuerda siempre que si tú no apuestas por ti nadie lo hará y tienes la llave en tus manos para que así sea.

No renuncies a tus sueños y anhelos, se valiente y lo suficientemente consciente para arriesgar sólo si crees que vale la pena de verdad, sólo si vibras al pensarlo. Haz de los problemas que surjan en el camino un capítulo más a superar.

Es responsabilidad tuya construir y luchar por el futuro que quieres tener, sólo así podrás tener una vida “vivida”.

Así que, te invito desde estas líneas a vivir este momento, porque la vida es lo que está pasando ahora, en este mismo instante... Tú decides si sigues con el "revival" de tu pasado o te conviertes en el verdadero protagonista de tu vida y del aquí y ahora. 

Os dejo ya y os invito a la lectura de “Siete excusas para no optar a la vida que deseas”… ¡¡ Feliz travesía amigos!!

Eva Collado Duran

Abril de 2014