DEDICATORIAS:

 

Sobre todo a Berta y a Alex, mi esposa y mi hijo,

los mejores maestros que he tenido y tendré en mi camino por la vida.

También a Yumi, mi yorkshire terrier,

que me acompañó fielmente muchas horas mientras escribía este libro y ya no podrá verlo impreso.

 

 

 

 

…y a todas las personas que disfrutan ayudando a los demás, sean quienes sean.