Capítulo 11

Demonología pronominal I.

Los pronombres personales

 

En este capítulo

triangle.png   Redescubrir los pronombres personales fuertes

triangle.png   Aprender las formas que adoptan los pronombres débiles

triangle.png   Orden y ortografía de los pronombres débiles

triangle.png   La sustitución pronominal de los complementos verbales

 

El estudio profundo sobre la naturaleza y las cualidades de los demonios, estos terribles pronombres que tanto perturban tu mente y alteran tu sueño, va a lograr que disipes todos los males que presumiblemente te asuelan, de una vez por todas. Pues, en realidad, como puedes suponer, no son nada más que pobres diablos que hacen lo que pueden... y mucho mejor de lo que te imaginas. Efectivamente, son de lo más útiles y beneficiosos para el lenguaje, para el catalán.

Seguro que muchas veces te habrás preguntado: “Pero ¿qué es un pronombre?” La respuesta es muy sencilla: un elemento que sustituye a un nombre. ¿Qué podía ser sino? Dicho de un modo más técnico: los pronombres son palabras, generalmente variables, que indican que un determinado elemento ha sido sustituido. Más claro, el agua. Existen diferentes tipos de diablos... digo de pronombres, pero en este capítulo solo vas a conocer las características de los pronombres personales, que pueden ser fuertes o débiles. Y como ocurre siempre en estos casos, los demonios fuertes van a resultar muy fáciles de comprender, pero con los débiles... habrá que realizar algún que otro exorcismo.

Así pues, los pronombres personales se refieren fundamentalmente a la persona del discurso y se clasifican en dos series diferentes: la de los pronombres fuertes (o pronombres tónicos) y la de los pronombres débiles (o pronombres átonos).

Los pronombres fuertes se caracterizan por el hecho de poseer acento fónico y porque, además, son el sujeto de una oración: Jo sóc aquell que en temps de tempesta... como decía Ausiàs March, el primer poeta catalán, en uno de sus versos más famosos; o bien ocupan posiciones propias de los nombres: Ho faran sense tu.

Los pronombres débiles, en cambio, son átonos y se apoyan necesariamente en el verbo: No em coneixen (a mi); ¿Què et sembla? (a tu), ya que no tienen sentido por sí solos.

En catalán usamos con frecuencia, con demasiada frecuencia los pronombres débiles, abusamos de ellos, porque estás tratando con una lengua que, como el francés o el italiano, los necesita y los quiere tanto para la lengua hablada como para la escrita. Cierto es que el castellano también los usa, aunque en menor cantidad. Observa este ejemplo: cuando decimos Dóna-me-la, nos referimos a dos elementos (pues hay dos pronombres), que muy bien podrían ser la llibreta y a mi. Ningún problema. En castellano es igual: mela. Pero cuando decimos Aquest matí t’he vingut a buscar però no hi eres, aparece, como por arte de magia, el pronombre hi (que indica el lugar); ese pronombre ni existe ni es necesario en castellano: Esta mañana he venido a buscarte pero no estabas. Ahí está el quid: un pronombre que ha surgido como surgen las setas en el bosque. Inesperadamente. Como por encanto.

Por tanto, no te queda más remedio, si tu deseo es aprender bien el catalán, que tener en cuenta un montón de pronombres nuevos, y casos y ejemplos que no esperabas ni por asomo. ¡Una verdadera antología infernal! Esta es la verdad, alegre y variopinta, que trataré de explicarte, para tu placer y regocijo, del modo más entretenido que pueda en uno de los capítulos más complicados de este libro. C’est la vie!

Los pronombres personales fuertes

Se llaman así porque son tónicos. Tiene, por tanto, una sílaba tónica, es decir, acentuada fónicamente. Se refieren a la persona gramatical del discurso. Así que las formas fundamentales que sustituyen a las tres personas que, desde el punto gramatical, puede tener el discurso, no son muchas y las tienes reflejadas en la tabla 11-1.

 

213.jpeg

 

La primera persona se identifica con el emisor del enunciado. La segunda representa al receptor del enunciado y la tercera alude a la persona que no participa en el acto de la comunicación. Claro que, como ya sabes, no tienen por qué ser personas, sino que en algunos casos pueden ser entes no humanos e, incluso no animados (Hay mucha gente que le habla de tú a tú a su perro e incluso a las plantas.) Para cada persona se establece una oposición entre singular y plural, de raíz muy diferente en las dos primeras personas: jo/nosaltres y tu/vosaltres, pero añadiendo una -s en la tercera: ell/ells, ella/elles. Observa, además, que tu no lleva tilde, a diferencia del castellano.

La forma básica de la primera persona del singular es jo, que es la palabra con la que el autor de un enunciado se designa a sí mismo; por ejemplo: Jo ho faré. Por tanto, realiza la función de sujeto. Además se utiliza jo en los siguientes casos:

visto.png   Después de la preposición segons. Por ejemplo: Tu deies que segons jo no calia venir tan aviat.

visto.png   Después de la preposición entre cuando introduce un complemento recíproco o dos elementos coordinados. Por ejemplo: Entre tu i jo acabarem la feina. Ho farem entre tu i jo.

En cambio, mi (también sin tilde) se utiliza después de cualquier preposición (excepto segons): Parlaven de mi. Aunque en el habla balear se usa también jo después de preposición: Vine, nina, amb jo a dormir; Duc el dimoni dins jo, como demuestran dos famosas canciones del cantautor mallorquín Tomeu Penya. Por otro lado, nós es una forma arcaica utilizada sobre todo en la Edad Media como plural mayestático, solo para papas, obispos o reyes para designar a un emisor único: Nós, rei d’Aragó.

Tu es la forma básica de la segunda persona del singular: “¿Tu també, fill?”, va dir Cèsar a Brutus. Un trato mucho más formal es vós, una forma que estaría entre el tu y el vostè. Se utiliza generalmente para dirigirse a personas que tienen una cierta edad o como muestra de respeto a aquellos que no tratas ni de tu ni de vostè: Vós m’ho heu dit. Actualmente este tratamiento está en fase de retroceso y casi se reduce a ambientes rurales y entre personas de edad avanzada. Vostè es el resultado de una contracción de la antigua forma vostra mercè. Hay que decir que hoy en día es la forma más utilizada para dirigirse a personas a las que no conocemos, a pesar de que los jóvenes cada vez usan menos el vostè en favor del tu: Vostè m’ho ha dit / Tu m’ho has dit.

Las formas básicas de la tercera persona del singular son ell para el masculino y ella para el femenino: Ni ell ni ella no havien arribat encara. Si (otro pronombre que no lleva tilde) es la forma correspondiente al pronombre reflexivo de tercera persona: Parla de si mateix, aunque habitualmente es sustituida por ell o ella: Parla d’ell mateix, d’ella mateixa. Pero si te refieres a cosas, no hagas esta sustitución: No em preocupa el resultat en si mateix.

enbanyeta.pngEs preferible que evites los pronombres ell/ella si se refieren a cosas porque tal uso no es genuino del catalán. En su sustitución, usarás otras soluciones:

Es incorrecto *Van exposar dos casos diferents, perquè ells eren molt il·lustratius.

Es correcto Van exposar dos casos diferents, perquè aquests eren molt il·lustratius.

Es correcto Van exposar dos casos diferents, perquè eren molt il·lustratius.

Es incorrecto *Va provar la nova moto i no està gens satisfet della.

Es correcto Va provar la nova moto i no n’està gens satisfet.

Nosaltres es la primera persona del plural y una de las palabras que presenta más variedad en catalán. La pronunciación más corriente es nosatres, que convive con nosatros, naltres, noltros, mosatros... Pero evidentemente la forma normativa, al menos en la escritura, es nosaltres: Ho farem nosaltres; Nosaltres els valencians (importante obra ensayística del escritor de Sueca, Joan Fuster (1922-1992)).

Los pronombres de primera y segunda persona del plural tienen una situación especial, ya que no siempre remiten al emisor y al receptor, sino que expresan una expansión hacia otras personas. Fíjate en el eslogan Nosaltres parim, nosaltres decidim (que no corresponde necesariamente a yo+yo+yo..., puesto que el valor es general). Incluso el falso plural del libro bíblico del Génesis: Fem l’home a la nostra imatge, semblant a nosaltres, en la que presumiblemente el modelo corresponde a un ser único y no a varios; pero al tratarse de un dios, como comprenderás, el singular quedaba corto (¡Vaya por Dios!).

tomanota.pngAlgunos oradores o escritores usan nosaltres en lugar de jo. Es el llamado plural de modestia, para atenuar la personalidad propia: Nosaltres creiem que, com ja vam indicar clarament en el segon capítol, la causa de l’actual crisi econòmica duu a la deflació.

La forma básica de la segunda persona del plural es vosaltres, pero también está sujeta a variaciones como vosatres, vosatros, valtres, voltros... Funciona, además, como plural de tu y de vós. La forma vostès es plural de vostè: Haureu d’espavilar-vos vosaltres sols; Vostès no hi eren.

enbanyeta.pngTienes que evitar el uso abusivo de vostè. Cierto es que tanto el lenguaje publicitario como el comercial, el administrativo o el jurídico pueden expresarse con el tratamiento de vostè, pero hay que evitar el uso de esta palabra en todos los casos en los que, si prescindes de ella, el significado de la frase no cambia:

Es incorrecto *Vostè es troba aquí. (Indicación que se da en los mapas-carteles de las grandes ciudades.)

Es correcto Sou aquí.

Es incorrecto *Digui vostè què feia en aquell moment.

Es correcto Digui què feia en aquell moment.

Las formas básicas de la tercera persona del plural son ells para el masculino y elles para el femenino, junto a la forma reflexiva si, que suele sustituirse asimismo por ells/elles: Van anar-hi ells sols; Elles sempre volen tenir raó; Parlaven entre si (o entre ells o elles).

Los pronombres personales débiles

Se denominan febles (débiles) porque son átonos, es decir, sin acento fónico, para distinguirlos de los fuertes o tónicos, que sí lo tienen (aunque no tienen por qué llevar tilde). Pueden adoptar muchísimas formas diferentes según su colocación respecto al verbo y a otros pronombres, ya que pueden combinarse entre ellos. Se clasifican según la persona (primera, segunda y tercera) y el número (singular y plural); pero también por las funciones que realizan (de complementos verbales) y por el género (masculino, femenino y neutro).

Son los verdaderos demonios, los de mayor jerarquía: los más complicados de usar. Aunque son numerosos, te los presento poco a poco, con toda cortesía. Así que empezamos. El catalán tiene los siguientes pronombres débiles:

visto.png   me

primera persona singular (funciones: CD, CI)

visto.png   nos

primera persona plural (funciones: CD, CI)

visto.png   te

segunda persona singular (funciones: CD, CI)

visto.png   vos

segunda persona plural (funciones: CD, CI)

visto.png   se

tercera persona (reflexivo)

visto.png   lo

tercera persona singular, masculino (función: CD)

visto.png   la

tercera persona singular, femenino (función: CD)

visto.png   li

tercera persona singular (función: CI)

visto.png   los

tercera persona plural, masculino (función: CD) / tercera persona plural (función: CI)

visto.png   les

tercera persona plural, femenino (función: CD)

visto.png   ho

neutro

visto.png   ne

adverbial

visto.png   hi

adverbial

Para que no te inquietes, te avanzo que los complementos verbales (el directo, CD, y el indirecto, CI) se tratan en este mismo capítulo, un poco más adelante, en el apartado “Sustitución de los complementos verbales por pronombres débiles”.

enbanyeta.pngNo confundas los pronombres lo, la, los, les con los artículos que presentan las mismas formas. No es lo mismo la casa que me la deixa (la casa). ¿Capicci?

Hasta aquí es bastante sencillo. Pero hay algunas complicaciones, ya que la mayoría de esos pronombres pueden adoptar hasta cuatro formas diferentes. Es decir, dos formas si van antes del verbo y dos formas más si van después de él. Y por si eso fuera poco, resulta que cuando estos pronombres van delante del verbo tienen formas diferentes si el verbo empieza por consonante (formas reforzadas) o por vocal (formas elididas, con apóstrofo); y cuando van detrás del verbo, si este acaba en consonante o semivocal son de una manera (formas plenas) y si termina en vocal, de otra (formas reducidas, con apóstrofo). Soy consciente de que todo este embrollo despista un poco, pero lo verás más claro en la tabla 11.2 y en los ejemplos siguientes. Solo una cosita más antes de que observes atentamente la tabla, cuando estos pronombres van detrás del verbo no se unen directamente a él como ocurre en castellano, sino mediante un guión.

 

217.jpeg

 

El asunto empieza a esclarecerse, pero también a complicarse. Solo falta complementarlo con ejemplos concretos. Fíjate en las posibilidades que puede adoptar cada pronombre según la posición en que se encuentre:

visto.png   me

em diu, matanso, traient-me, cantam

visto.png   nos

ens deixa, ens apropa, digueu-nos, parlans

visto.png   te

et canses, tatreveixes, dir-te, deixam

visto.png   vos

us donen, us agraeix, despulleu-vos, veure-us

visto.png   se

es banya, s’agraden, dir-se, treguis

visto.png   lo

el desobeeix, l’adoro, porteu-lo, estimal

visto.png   la

la veig, l’esperem, la imagines, la usaves, veient-la, fica-la

visto.png   li

li dic, li expliques, digueu-li, parla-li

visto.png   los

els miro, els admirem, veient-los, deixals

visto.png   les

les miro, les acompanyes, veieu-les, posa-les

visto.png   ho

ho sabia, ho incloïes, deixeu-ho, pensa-ho

visto.png   ne

en vinc, n’és, portar-ne, dónam

visto.png   hi

hi sent, hi havia, anar-hi, pensa-hi

A excepción de les, li, hi y ho, que son invariables, los pronombres débiles, como acabas de ver, presentan diferente formas cuando van antes del verbo, según si este empieza por consonante o por vocal. También presentan formas diferentes si van después del verbo, en función de que este acabe o bien en consonante o bien en una u que sea la segunda vocal de un diptongo o bien en vocal que no sea una u segundo elemento de un diptongo. Así se obtienen:

visto.png   Las formas reforçades (reforzadas) se usan en la mayor parte del catalán oriental cuando se requiere un pronombre débil antes del verbo y este empieza por consonante: ¿em sents?, ja et veig. En cambio, en la zona occidental suelen se usarse las plenas: ¿me sents? También se emplean en la combinación de dos pronombres: ens la deixa; els l’enviarem, y en general, después de un pronombre acabado en -s: doneu-nos-la.

visto.png   Las formas elidides (elididas) se usan antes del verbo cuando este empieza por vocal o por h. En este caso, como se elide una vocal del pronombre, hay que poner un apóstrofo, que une el pronombre con el verbo o con otro pronombre: tavisaré; satansa; mho crec.

visto.png   Las formas plenes (plenas) se usan en diversas circunstancias:

•     Cuando el pronombre débil va después del verbo, si este acaba en consonante o en una u que sea segunda vocal de un diptongo: vesteix-te; asseu-te; renteu-vos; escoltar-vos.

•     También cuando un pronombre precede a otro pronombre, tanto si ese conjunto está antes del verbo como si va después de él; es el caso de me la portava, dóna-me-la, no te l’escoltis, se us coneix. Ahora bien, toman la forma elidida si se combinan con hi o con ho: emporta-t’ho, s’hi acostumarà.

•     Asimismo, las formas plenas aparecen siempre que un pronombre débil se combina con otro apostrofado: se’n va; dóna-me’l.

•     Además, son normales las formas plenas en ciertas expresiones populares: tant me fa, com se diu, Déu vos guard...

•     Por último, ante verbos que empiecen por s, ce o ci la forma reforzada se puede convertirse en la forma plena es: es celebrarà.

visto.png   Las formas reduïdes (reducidas) se usan después de un verbo o de otro pronombre débil acabado en vocal, siempre que no sea una u que forma diptongo. Estos pronombres se separan siempre del verbo mediante un apóstrofo o un guión: veurel, emporta-tel. En cambio, la forma -us se emplea después de un verbo acabado en vocal que no forme diptongo: veure-us.

tomanota.pngEn textos orales y para los verbos acabados en -er, siempre que esa -e sea átona, como conèixer y convèncer, se admiten como formas plenas de los pronombres débiles las variantes: coneixe’ns, convence’l...

Cómo colocar bien los pronombres débiles y cómo escribirlos correctamente

Los pronombres débiles se comportan de un modo particular, ya que pueden colocarse delante del verbo o detrás de él, como acabas de ver. La primera opción es la más común:

visto.png   Et pots banyar al mar.

visto.png   Ell es banya al riu.

visto.png   Li ha dit que no.

visto.png   No li ho diguis.

visto.png   Sho emporta.

Pero cuando se trata de un infinitivo, un gerundio o un imperativo deben ir detrás del verbo:

visto.png   con infinitivo Dir-se el nom del porc. Regirar-ho tot.

visto.png   con gerundio Pensant-ho millor.

visto.png   con imperativo Fica-tho al cap. Matem-ho aquí. Fes-te enrere. Telefona-li.

Si los pronombres se combinan con una perífrasis verbal (construcción formada por un verbo auxiliar más un infinitivo o un gerundio) se puede colocar el pronombre tanto delante como detrás:

Ho va dir

Va dir-ho

Se nhavia danar

Havia danar-sen

Hi he d’anar

He d’anar-hi

enbanyeta.pngNo hace falta que te diga que es incorrecto repetir un mismo pronombre antes del verbo y después de él, como se oye en registros vulgares:

*Hi haig d’anar-hi; o aún peor: *Hi tinc que anar-hi (usando la incorrecta construcción tenir que en lugar de haver de).

norma.pngDebes tener muy presente que todos los pronombres débiles relacionados con un verbo tienen que ir juntos, bien antes del verbo o bien después de él, como puedes observar en los siguientes ejemplos:

Tho emportes

emporta-tho

No nhi trobaràs

posa-lhi

Me la dones

Dóna-me-la

Recuerda, además, que en catalán, a diferencia de lo que ocurre en castellano, los pronombres van siempre separados de los verbos y de otros pronombres; aunque algunas veces se puede decir que van unidos, eso sí, mediante un guión o un apóstrofo. Los criterios para su correcta escritura son los siguientes:

visto.png   Delante de un verbo que comience por consonante, los pronombres se escriben separados, como em somriu, ens canta, et mira, us respon, es pentinen, el veig, els maten, les diuen, li dic, ho faran, hi són, en tenen.

visto.png   Delante de un verbo que comience por vocal (precedido o no de h) los pronombres em, et, el, la, es, en adoptan la forma elidida y se escriben con apóstrofo. Observa estos ejemplos: m’escolta, t’odia, t’han vist, l’ha perduda, s’alça, n’ha comprats. El pronombre la en posición átona y ante un verbo que empieza por i, u, hi, hu se comporta igual que el artículo femenino (capítulo 6) y no lleva apóstrofo: la introduïen, la untaven, la humilia, la hipnotitza.

visto.png   Después de un verbo acabado en consonante o en u (si es la segunda vocal de un diptongo), se unen al verbo mediante un guión. Fíjate bien: dir-me, escriu-me, digueu-nos, fer-te, dir-vos, pren-lo, porteu-lo, trenca-les, truca-li, fes-ho, vés-hi, pren-ne.

visto.png   Después de un verbo acabado en vocal que no sea una u segundo elemento de un diptongo, los pronombres em, et, es, el, ens, els, en adoptan la forma reducida y se escriben con apóstrofo, como en mira’m, mira’t, perdre’s, dóna’l, mira’ns, torna’ls, omple’n; pero: mengeu-ne, veure-us, dóna-la, dóna-les, escriure-li, estudia-ho, corre-hi.

norma.pngCuando los pronombres débiles se combinan entre ellos se suprime una de las vocales que entran en contacto y se escribe el apóstrofo lo más a la derecha posible:

me + el + pren

me’l pren

te + els + don

te’ls dono

se + en + menja

se’n menja

el + hi + torno

l’hi torno

se + en + ha comprat

se n’ha comprat

menja + et + ho

menja-t’ho

deixa + el + hi

deixa-l’hi

enbanyeta.pngMucha atención con algunos pronombres débiles, ya que su escritura no siempre es uniforme:

visto.png   Las combinaciones la + hi y se + us no pueden llevar apóstrofo. Observa estas formas correctas: Ella la hi donarà; se us demana una cosa.

visto.png   El pronombre el adopta la forma elidida l’ cuando se combina con en. En una frase como El van nomenar director del curs, si quieres sustituir el complemento (director del curs) mediante un pronombre, debes decirlo y escribirlo de la siguiente manera: L’en van nomenar.

visto.png   Los pronombres li y ho son invariables. Por tanto, nunca pierden letras ni llevan apóstro. Fíjate en estos ejemplos: Li agrada, dóna-li; ho entenc, li ho diré.

norma.pngLa forma vos se conserva en posición antes del verbo en algunos dialectos, o en expresiones fosilizadas de la lengua como ¡Déu vos guard!, que aún puedes oír como saludo en algunos pueblos, sobre todo en personas de edad; pero en la lengua escrita y en los registros formales conviene usar en esta posición la forma us.

Sustitución de los complementos verbales por pronombres débiles

Los verbos suelen ir acompañados de nombres o grupos nominales que los complementan. Y, precisamente porque están formados por nombres, el papel de esos complementos a menudo lo desempeñan pronombres, que pueden ir antes del verbo o después de él (como ya has visto en el apartado anterior). Por tanto, los pronombres pueden ejercer la función de los siguientes complementos:

visto.png   El complemento directo, como en Veig aquell noi. El veig.

visto.png   El complemento indirecto, como en Han dut aquesta carta a la Joana. Li han dut aquesta carta.

visto.png   El complemento preposicional o de régimen, como en El Lluís pensava en la pel·lícula. El Lluís hi pensava.

visto.png   Los complementos circunstanciales, como Caminava de pressa. Hi caminava.

visto.png   El complemento predicativo, como en: El Toni es tornava vermell. El Toni s’hi tornava.

visto.png   El atributo, como en: El Fèlix és alt. El Fèlix ho és.

visto.png   El complemento del nombre, como en No conec la història de Catalunya. No en conec la història.

El ejemplo de cada caso te indica los complementos verbales cuyos pronombres sustituyen. Pero voy a darte a continuación las instrucciones pertinentes para identificar cada uno de esos complementos en las oraciones y saber qué pronombres debes usar para sustituirlos en cada caso, puesto que un mismo complemento puede requerir pronombres diferentes.

Sustitución del complemento directo

El complemento directo (CD) es el objeto (persona, animal o cosa) sobre quien recae directamente la acción del verbo. Los pronombres que sustituyen al complemento directo son los que te indico en la tabla 11-3.

 

222.jpeg

 

La tabla se complementa con los siguientes ejemplos ilustrativos, para que tengas claro qué pronombres usar en cada caso con el fin de sustituir el complemento directo:

visto.png   El CD es la primera o la segunda persona, singular y plural en oraciones como estas: En Joan em mirava malament; Mai no ens escolta; Ja et veig; Ja us ho he dit.

visto.png   Si el CD tiene como núcleo un nombre introducido por el artículo el, la, els, les, un demostrativo o un posesivo, entonces realizarás la sustitución con los pronombres el, la, els, les. Observa las oraciones siguientes:

Veig aquell cotxe. El veig.

Trobo la Neus. La trobo.

Han comprat els contes. Els han comprat.

Collien les cireres. Les collien.

visto.png   Si el núcleo del CD es un nombre indeterminado o introducido por un cuantitativo o un numeral, entonces sustituirás por en:

Busca cargols. En busca.

Volien tres cerveses. En volien tres.

visto.png   Cuando el CD es toda una oración, entonces se usa ho; y lo mismo si el CD está representado por las palabras això, allò:

Volien que la dependenta els emboliqués el regal. Ho volien.

No oblidem això. No ho oblidem.

visto.png   Además, debes fijarte en los usos reflexivos y recíprocos:

Ella es pentina amb els dits; Es miraven l’un a l’altre.

Sustitución del complemento indirecto

El complemento indirecto (CI) indica quién es el destinatario o quién recibe la consecuencia de la acción verbal. Suele introducirse con las preposiciones a o per a. Los pronombres que sustituyen al complemento indirecto aparecen en la tabla 11-4.

 

223.jpeg

 

Como siempre, sin ejemplos no es fácil entenderlo bien:

visto.png   Los pronombres que sustituyen al nombre en función de CI en el caso de la primera y la segunda persona son los mismos que cuando la función es la de CD. Observa: No em donis res; No ens ho vol dir; La música et dóna tranquil·litat; Us estimo molt.

visto.png   Fíjate en que los pronombres li y els no distinguen entre masculino y femenino:

Vaig demanar al Marc que vingués. Li vaig demanar que vingués.

Vaig demanar a la Judit que vingués. Li vaig demanar que vingués.

Ho va dir als alumnes. Els ho va dir.

Ho va dir a les alumnes. Els ho va dir.

visto.png   Los reflexivos y recíprocos: En Pere es renta les dents; En Joan i la Maria van fer-se un petó.

enbanyeta.pngLos pronombres de tercera persona li, los, els, ‘ls desempeñan la función de complemento indirecto (CI). No cometas el error de pluralizar li en la incorrectísima forma *lis (propia del habla xava, como te explique en el capítulo 4); el plural correcto en estos casos es els (o los, ‘ls). Observa los ejemplos:

visto.png   *Digueu-lis que vinguin (a ells, a elles).

visto.png   Digueu-los que vinguin (a ells, a elles).

visto.png   Els enviaré un correu electrònic. Voldria enviar-los un correu electrònic. Envia’ls un correu electrònic (a vostès, a ells, a elles).

Sustitución del complemento preposicional

El complemento preposicional (CPrep) o de régimen verbal en catalán siempre va precedido por las preposiciones a, en, amb, per o de. Estas proposiciones están exigidas por el verbo. Por eso se llama complemento regido, es decir, exigido.

Los CPrep introducidos por las preposiciones a, en, amb o per se sustituyen con el pronombre hi:

Negar-se a fer una cosa. Negar-s’hi; ¿Renuncies a Satanàs? Hi renuncio.

Mai no penses en mi. Mai no hi penses.

Estic dacord amb vosaltres. Hi estic dacord.

Sinteressa molt per aquella xicota. S’hi interessa.

Y los CPrep introducidos por de se sustituyen con el pronombre en:

Es van adonar de la meva presència. Sen van adonar.

Para que recuerdes los verbos que exigen una preposición y, por tanto, llevan CPrep, he preparado una lista con los principales. Puedes verlos en la tabla 11-5. Recuerda los pronombres que sustituyen al complemento; como acabas de verlos, si es necesario, repásalos.

 

225.jpeg

226.jpeg

 

Sustitución de los complementos circunstanciales

Los complementos circunstanciales (CC) indican las condiciones en las que se produce la acción verbal, como el lugar, tiempo, modo, instrumento, etc. Los pronombres que sustituyen a estos complementos son los mismos que los que desempeñan la función del complemento preposicional, es decir, en y hi. La diferencia está en las cosas que expresan o se desarrollan en la oración.

Veamos algunos detalles.

visto.png   Los CC introducidos por la preposición de (excepto si se trata de CC de modo) se sustituyen mediante el pronombre en: Ell ve del teatre, i jo també en vinc.

visto.png   A los CC introducidos por otras preposiciones los sustituye el pronombre hi: Van a Barcelona, on hi tenen la feina; Estic contra la violència i sempre hi he estat.

visto.png   Los CC de modo se sustituyen mediante el pronombre hi: No sempre parla quequejant, però quan hi parla costa d’entendre’l.

Sustitución del complemento predicativo

El complemento predicativo (CPred) es un complemento que aporta información (predica) sobre algún elemento nominal a través de un verbo no copulativo (es decir, que no sea ser o estar). Dicho de otro modo: ese elemento nominal que complemente el CPred puede ser el sujeto, el CD o el CI. Normalmente se sustituye con el pronombre hi:

Els nens anaven despullats. Els nens hi anaven.

Observa que en el ejemplo anterior, despullats complementa al sujeto (els nens) y depende de él.

Pero cuando se trata de los verbos dir-se, elegir, fer-se (exceptuando fer-se en el sentido de tornar-se), nomenar y otros verbos de significado parecido, entonces se sustituye con el pronombre en:

Sha fet soci del Barça perquè ja feia temps que sen volia fer.

Em dic Ferran. Hi ha molta gent que sen diu.

 

Pero:

 

Sha tornat vermell. És molt vergonyós i de seguida shi torna.

Sustitución del complemento atributo

El atributo es muy fácil de reconocer porque es el complemento que acompaña a los verbos copulativos, como ser, estar o semblar. Estos verbos solo tienen una función: unir el sujeto con el atributo, sin añadir nada al significado de la oración.

Los pronombres que sustituyen al atributo son el, la, els y les o bien ho (y en ciertos casos en). Veamos lo que puede ocurrir.

visto.png   Cuando el atributo está determinado, es decir, va precedido de un artículo definido (el, la, els, les), de un posesivo (el meu, el teu, el nostre...) o de un demostrativo (aquest, aquell...) se sustituye por el, la, els, les. Observa los ejemplos:

Sí que els són, els escollits.

¿És el teu pare o no l’és?

¿En Florenci és aquell noi? No, no l’és.

visto.png   Cuando el atributo no está determinado o se forma con el verbo semblar, entonces lo sustituye el pronombre ho:

Estava malalt, però ara ja no ho està.

Jo no sé si és boig, però ho sembla.

visto.png   Cuando el atributo se junta con el CI, entonces su sustituto es en:

Jo sóc el padrí del Felip. Jo li sóc padrí (solo se sustituye el CI, ‘del Felip’).

Jo lin sóc (se sustituye el CI y el atributo).

Sustitución del complemento del nombre (CN)

El complemento del nombre (CN) indica pertenencia, especificación del nombre que acompaña. Va introducido con la preposición de y se sustituye con el pronombre en:

Conec molt bé l’art romànic de la vall de Boí, però no en conec la història.

norma.pngMucha atención con el CN del complemento directo, que no se puede sustituir por un pronombre. En la oración No sé on he deixat el raspall de dents, el complemento directo es raspall, que, a su vez, tiene un complemento del nombre: de dents. Pues bien, solo es posible sustituir el complemento directo, por tanto un solo pronombre: No sé on l’he deixat (el raspall de dents). Pero no se puede sustituir además, con el pronombre en, el fragmento de dents, es decir, el CN del CD. Toda pronominalización tiene un límite. No te pases.

tomanota.pngDejando de lado los complementos verbales, también hay que decir que el sujeto de una oración se sustituye, en ciertas oraciones, por el pronombre en, cuando se encuentra pospuesto al verbo; pero nunca si va delante de él:

¿Que ha arribat cap convidat? No, encara no n’ha arribat cap.

Combinaciones y estratagemas de los pronombres débiles

En teoría son posibles las combinaciones de cuatro pronombres... ¡o más! Pero no te asustes, las más habituales son las combinaciones de dos. La fórmula mágica, el orden más general y estándar en una secuencia de pronombres como la que te muestra la tabla 11-6. Ten en cuenta que las rayas horizontales señalan la imposibilidad de combinar los pronombres que están en la misma columna. Por su parte, las rayas verticales gruesas indican la imposibilidad de combinar los pronombres de las celdas contiguas.

 

229.jpeg

 

Por lo tanto, según esta tabla, no serían posibles las combinaciones del tipo em + ens, en + ho ni hi + ho; tampoco pueden ir juntos los de tercera persona (el, els, la, les) con ho.

paramatricula.pngLa tabla 11-7 contiene las combinaciones posibles entre dos pronombres (llamadas también combinaciones binarias), cuando no forman parte de combinaciones con más pronombres. Los cuadros que veas vacíos son combinaciones imposibles. Esta tabla no es para aprendérsela de memoria, sino para consultar si una combinación pronominal que has escrito es correcta o no.

 

230.jpeg

231.jpeg

 

En la mayoría de los dialectos del catalán, excepto el valenciano, cuando el pronombre li, que ejerce de complemento indirecto, entra en contacto con los pronombres que realizan la función de complemento directo —el, la, els, les— adopta la forma hi y se pone a continuación de los pronombres del complemento directo. Así, se forman las combinaciones l’hi, la hi, els hi, les hi, como puedes ver en la tabla 11-8.

 

232.jpeg

 

tomanota.pngPara las formas n’hi o li’n, la normativa establece como forma preferente o recomendable la combinación pronominal li’n frente a n’hi:

visto.png   Si no té ordinador, li’n deixarem un (li = a ell, a ella, a vostè; d’ordinador).

visto.png   Si no té ordinador, n’hi deixarem un (hi = a ell, a ella, a vostè; d’ordinador).

Ambas soluciones son correctas, pero es preferible reservar la segunda opción para el lenguaje coloquial. Algo parecido ocurre con las combinaciones l’hi y li ho, ambas correctas si bien la primera es propia del lenguaje coloquial mientras que la segunda es la recomendada por la normativa:

visto.png   ¿Li faràs saber que demà no cal que vingui? , l’hi faré saber.

visto.png   ¿Li faràs saber que demà no cal que vingui? , li ho faré saber

(li = a ell, a ella; ho = que demà no cal que vingui).

enbanyeta.png En cambio no es nada recomendable utilizar la combinación l’hi en lugar de la correcta li hi en una frase como:

visto.png   * ¿Li posaràs lanell al dit? Sí, lhi posaré.

visto.png   ¿Li posaràs l’anell al dit? , li hi posaré

(li = a ell, a ella; hi = al dit).

 

Pigmalión y los pronombres débiles

 

Pigmalión es una obra de teatro muy divertida que el dramaturgo irlandés George Bernard Shaw (1856-1950) escribió en inglés en 1913. El argumento es conocido mundialmente: una florista pobre (Liza Doolittle, Rosita en la versión catalana), que habla el cockney, un dialecto popular londinense, va transformando su modo de hablar con la ayuda de un profesor de fonética que pretende convertirla en una señorita de la alta sociedad, al menos por el habla, londinense.

En la traducción catalana de esta obra, la sintaxis, el léxico y los pronombres se destrozaron de un modo muy elocuente, propio del habla xava y del lenguaje callejero. Transcribo algunos fragmentos con la esperanza de que no hables como estos personajes.

XULO: Al tanto, nena, que aquí radera hi ha una bòfia que apunta tot ho que dius. Dóna-li una flor que si’s pensa que demanes caritat, palmes.

ROSITA: ¿Al prenda éh al seu fii? pueh pagui la mercansia que m’ha estropellat. ¡Miri quin fahti de claveii! que a mi no me lo regalaan. Tinc que retratam-me, m’antén.

ROSITA: Vostè no té entranyes. Es preocupa de vostè i ja està. Ja tinc bastant. Me largo. Vergonya me donaria a mi.

ROSITA: Digui que no li guindao na, senyor, digui la veritat. No deixi que m’acusin. Salvi’m si me porten al jusgat. La meva reputació per terra. A mi que me registrin.

Comentarios suculentos:

visto.png   En primer lugar se nota el uso de las formas plenas (me, lo) en lugar de las reforzadas (em, el) antes del verbo, que no son propias de los dialectos orientales.

visto.png   También la ausencia de pronombres: ja tinc bastant en lugar de ja en tinc prou.

visto.png   Se hacen reducciones y duplicaciones extremas, como retratam-me en lugar de retratar-me; o si’s en vez de si es.

visto.png   Aparte de los pronombres surge un vocabulario específico, que se refleja en palabras como bòfia (policia), palmar (morir) o guindar (robar), etc.

visto.png   También pronunciaciones incorrectas, como la aspiración en fahti (fàstic) o los yeísmos de claveii (clavells) y fii (fill), etc.

En definitiva, un mundillo de incorrecciones en un lenguaje rico, rico, con matices lingüísticos, verbos coloreados y expresiones más que estupendas.

 

Por favor, no te cargues los pronombres débiles

 

Una de las mejores manifestaciones en favor de los pronombres débiles, aguda y divertida al mismo tiempo, la popularizó la escritora catalana de novelas, cuentos y artículos periodísticos Montserrat Roig (1946-1991), un año antes de su prematura muerte, en un artículo que se publicó en el diario Avui (21-11-91) dirigido a un tal Amadeu, director de la televisión valenciana en aquel tiempo. Vale la pena reproducir un fragmento de aquel artículo para que te des cuenta de la importancia que tienen los pronombres en nuestra lengua, el catalán (observa, además, la cantidad de pronombres débiles que surgen en este pequeño texto, de manera natural):

Amadeu (...) te m’has carregat un pronom feble, tot ignorant que els pronoms febles són la nineta dels nostres ulls. El programa Tria’n tres, lhas convertit en Tria tres. Has fet caure l’en, lhas fet rodolar pels viaranys del no-sentit. Tant que els estimem, els pronoms febles. Si en despareix un, ens toquen el voraviu. Durant segles, els francesos, els italians i els catalans hem matisat fins a tornar-nos primfilats gràcies al pronom feble. Hem estalviat la llargada de les paraules per arrodonir-ho tot en un hi, un en. I ens enteníem. Un hi o un en posats a temps era com afegir una goteta de mel al paladar.

Ara dius: el programa Tria’n tres s’ha de dir Tria tres. Si dius Tria tres, ens falta un què, algun objecte ha volat, esborrat a l’ordinador. Si dius Tria’n tres, sé que m’estàs parlant d’algú, o alguna cosa, que existeix. I sé que existeixo, no estic penjada al buit. El pronom feble, Amadeu, és el tou de la cama de la Ben Plantada, el voraviu de Plaerdemavida, la barba de Pere Quart, Carles Riba passejant per Bierville, la Rodoreda escanyant una flor de magnoli, la Víctor Català amb papada i fent de senyoreta de casa bona, l’Ausiàs March perseguint un falcó. El pronom feble, Amadeu, exterioritza o representa un munt de significats. Tot un paisatge hi cap, dins un pronom feble. Què vols que hi fem.

Diu el valencià Andrés Estellés en un poema molt trist:

...Reportar, anar fent l’inventari, escarbant entre tot l’enderroc, entre les tristes coses l’edifici abatut; tossint, entre la pols; persistint tenaçment –un setrill, una taula, una ansa d’un pitxer, o bé el tros d’un espill–, agafant cada cosa tot i prenent-ne nota...

Feliç aquest “prenent-ne nota” del poeta! Perquè darrere hi ha un setrill, una taula, un tros d’espill... Si no en prengués nota, tots aquests objectes se li esborrarien, i ell es quedaria només amb la tristesa del fill perdut.

 

En el siguiente capítulo conocerás los pronombres relativos en catalán. También las oraciones que forman: oraciones de relativo, sustantivas y adjetivas. Estos pronombres no constituyen parte de los demonios que hemos tratado en este capítulo, sino que son un grupo de diablillos aparte, que tienes que ver como simples trasgos o gnomos del bosque, mucho más simpáticos y sencillos... ¡aunque no te fíes demasiado! Lo sencillo, a menudo es lo más engorroso. Pero no quiero amedrentarte. En realidad, lo que quiero decirte es que los usos y las formas de los pronombres relativos son mucho más sintéticos. Con un poco de atención bastará.

testbreve.pngLas recetas para preparar un plato están, por lo general, repletas de pronombres débiles, pero en la que observarás a continuación, que describe la elaboración de las espinacas a la catalana (acuérdate que espinacs es masculino en catalán) han desaparecido inesperadamente. ¿Serías tan amable de volver a colocarlos, para que no se enfade el editor? Gracias. ¡Ah!, además, si lo haces bien podrás entender la receta y cocinar sin problemas este plato, de lo contrario, lo veo difícil...

Espinacs a la catalana

Trieu i netegeu bé els espinacs, fulla per fulla, de manera que no …………… quedi gens de terra. Bulliu-…………… en una olla amb poca aigua i una mica de sal, durant aproximadament cinc minuts. Un cop bullits, escorreu-…………… bé i deixeu-…………… refredar. Seguidament, talleu-…………… a trossets mitjans. Escalfeu una mica d’oli en una paella grossa i enrossiu-…………… l’all. A continuació, retireu-…………… de la paella i, en el mateix oli, poseu-…………… el pernil tallat a bocins, sofregiu-…………… i, quan sigui ros, afegiu…………… les panses, sense les cues. Aneu-…………… remenant i, quan les panses s’hagin inflat, aboqueu-... també els pinyons, doneu un parell de voltes a la barreja i, abans que es torrin els pinyons, afegiu-... els espinacs. Salteu-... a foc mitjà, rectifiqueu-... de sal i afegiu-... una mica de pebre al vostre gust.

 

236.jpeg