REGLA NOVENA

EL IMPERIO DE LOS SENTIDOS

 

Volviendo a los placeres carnales, en el capítulo anterior hemos aprendido a preparar platos muy estimulantes, pero todavía falta algo para preparar esa maravillosa noche de sexo. Si vamos a preparar una noche de placer con “todo incluido”, debemos pensar que el placer para el paladar debe ir acompañado de placeres para los otros sentidos también, de esta manera, conseguiremos el ambiente adecuado para una noche de sexo incomparable. Vamos a intentar construir ese entorno propicio a los escarceos amorosos.

Nuestros sentidos están siendo continuamente atacados por sonidos, imágenes, olores… Estamos hiperestimulados en todo momento. No somos conscientes de esta sobreexposición, que nos va estresando a lo largo del día: la tele, el claxon de los coches, las discusiones en el trabajo, los sonidos de los móviles... Lo que necesitamos después de un día enervante en la ciudad es otro tipo de estimulación sensorial. Algo más tranquilo, que nos permita encontrarnos con nosotros mismos, que nos permita ver y oír a la persona que tenemos a nuestro lado.

Analicemos paso a paso cómo podemos conseguir este estado de bienestar.