A mi madre, Norma,
y a mis increíblemente maravillosas hijas,
las más fabulosas del mundo,
las más adorables: Beatrix, Sam,
Victoria, Vanessa y Zara.
Siempre, siempre se tendrán unas a otras, llenas de ternura, compasión, paciencia, lealtad y amor.
Cada una de vosotras es el mejor regalo
que he hecho a las demás.
Y a Simon, Mia, Chiquita, Talulah, Gidget y Gracie, los mejores, los más bellos y adorables perros del planeta.
Con todo mi amor,
MAMÁ/D. S