“El niño se había alejado de su madre, dando
bandazos por el pasto en dirección a la estructura
de juegos. Su madre lo vio marcharse, orgullosa, conmovida, sin saber que cada vez que se alejaban de
ti tambaleándose, volvían un poco cambiados, diez segundos mayores y más cerca del momento en que
te dejaban para siempre. Igual que los pescadores de perlas cuando se entrenan, que cada vez que se
sumergen pasan unos segundos más debajo del agua.”
Telegraph Avenue, MICHAEL CHABON