IV

Los planetas

Conceptos clave para los planetas

1. Principios

  • SOL: Vitalidad; sentido de la individualidad; energía creativa; yo interior radiante (armonía del alma); valores esenciales.
  • LUNA: Reacción; predisposición subconsciente; sentimientos sobre el yo (autoimagen); respuestas condicionadas.
  • MERCURIO: Comunicación; mente consciente (es decir, mente lógica o racional).
  • VENUS: Gustos matizados por las emociones; valores; intercambio de energía con los demás entregándose y recibiendo; tendencia a compartir.
  • MARTE: Deseo; voluntad encaminada hacia la acción; energía física; empuje.
  • JÚPITER: Expansión; encanto.
  • SATURNO: Contracción; esfuerzo.
  • URANO: Libertad individualista; afirmación del ego.
  • NEPTUNO: Libertad trascendente; superación del ego.
  • PLUTÓN: Transformación; transmutación; eliminación.

2. Impulsos que representan

  • SOL: Impulso a ser y a crear.
  • LUNA: Impulso a sentir un apoyo interior; impulso hacia la seguridad doméstica y emocional.
  • MERCURIO: Impulso a expresar las propias percepciones y la inteligencia por medio del lenguaje y la destreza.
  • VENUS: Impulso social y amoroso; impulso a expresar los afectos; impulso a buscar placer.
  • MARTE: Impulso hacia la autoafirmación y la agresividad; impulso sexual; impulso a actuar con firmeza.
  • JÚPITER: Impulso hacia un nuevo orden; impulso a conectar el yo con algo más grande.
  • SATURNO: Impulso a defender la estructura y la integridad del yo; impulso hacia la prudencia y la seguridad a través de logros tangibles.
  • URANO: Impulso hacia la diferenciación, la originalidad y la independencia de la tradición.
  • NEPTUNO: Impulso a escapar de las limitaciones del yo y del mundo material.
  • PLUTÓN: Impulso hacia un renacimiento total; impulso a penetrar en el núcleo de la experiencia.

3. Necesidades que simbolizan

  • SOL: Necesidad de expresarse y de ser reconocido.
  • LUNA: Necesidad de tranquilidad emocional y de sensación de pertenencia; necesidad de sentirse a gusto con uno mismo.
  • MERCURIO: Necesidad de establecer contacto con los demás; necesidad de aprender.
  • VENUS: Necesidad de sentirse unido a otras personas; necesidad de sentirse cómodo y en armonía; necesidad de expresar las emociones.
  • MARTE: Necesidad de lograr lo que se desea; necesidad de excitación física y sexual.
  • JÚPITER: Necesidad de fe, verdad y confianza en la vida y en uno mismo; necesidad de mejorar.
  • SATURNO: Necesidad de lograr la aceptación social; necesidad de confiar en los recursos y el trabajo propios.
  • URANO: Necesidad de cambio, excitación y expresión sin restricciones.
  • NEPTUNO: Necesidad de experimentar la unidad con la vida, una fusión completa con el todo.
  • PLUTÓN: Necesidad de pulir el yo; necesidad de prescindir de lo viejo a través del dolor.

Expresión positiva y negativa de los principios planetarios

Cada principio planetario puede expresarse de manera positiva y creativa o de forma negativa y autodestructiva. Dicho de otro modo, la afinidad de una persona con cada dimensión de la experiencia puede estar en armonía con la ley superior o en desarmonía y discordia. Esto tiene como resultado el uso creativo o el mal uso de las diversas energías, fuerzas y afinidades. Conviene analizar los aspectos que forma cada planeta a fin de comprender el grado de armonía o de discordia presente en el individuo.

1. Expresión positiva

  • SOL: Irradiación del espíritu; expresión creativa y amorosa del yo.
  • LUNA: Comprensión; contento interior; un sentido del yo fluido y adaptable.
  • MERCURIO: Utilización creativa de la destreza o la inteligencia; razón y capacidad de discernimiento utilizados para servir a altos ideales; habilidad para llegar a acuerdos mediante la comprensión objetiva y una clara expresión verbal.
  • VENUS: Amor; tendencia a dar y recibir, y a compartir; generosidad de espíritu.
  • MARTE: Iniciativa; coraje; fuerza de voluntad dirigida conscientemente hacia un objetivo válido.
  • JÚPITER: Fe; confianza en un poder superior o en un plan más vasto; apertura a la gracia; optimismo; necesidad de mejorar.
  • SATURNO: Esfuerzo disciplinado; aceptación de los deberes y las responsabilidades; paciencia; organización; seguridad.
  • URANO: Afinidad con la verdad, originalidad; inventiva; experimentación directa, respeto por la libertad.
  • NEPTUNO: Afinidad con la totalidad; comprensión de las dimensiones espirituales de la experiencia; compasión por todo el entorno; ideales.
  • PLUTÓN: Aceptación de la necesidad de centrar la mente y la fuerza de voluntad en la propia transformación; posesión del coraje necesario para enfrentarse a los deseos y compulsiones más profundos y para transmutarlos mediante el esfuerzo y la intensidad de la experiencia.

2. Expresión negativa

  • SOL: Orgullo; arrogancia; un deseo excesivo de ser especial.
  • LUNA: Hipersensibilidad; inseguridad; inhibición del yo.
  • MERCURIO: Mala utilización de la destreza o la inteligencia; amoralidad debida a una excesiva racionalización de todo; comunicación unilateral y terca.
  • VENUS: Autoindulgencia; codicia; exigencias emocionales; inhibición de los afectos.
  • MARTE: Impaciencia; obstinación; violencia; uso inadecuado de la fuerza o amenazas.
  • JÚPITER: Excesiva confianza; pereza; dispersión de la energía; tendencia a dejar el trabajo a los demás; irresponsabilidad; engreimiento; tendencia a hacer demasiadas promesas.
  • SATURNO: Autolimitación por confiar demasiado en las propias fuerza y por falta de fe; rigidez; frialdad; actitud defensiva; inhibición incapacitadora; timidez y negatividad.
  • URANO: Testarudez; inquieta impaciencia; necesidad constante de excitación que lleva a realizar cambios sin ningún propósito definido; rebelión; extremismo.
  • NEPTUNO: Escapismo autodestructivo; tendencia a eludir las responsabilidades y a pasar por alto las necesidades del yo; rechazo a enfrentarse a las propias motivaciones y a comprometerse con nada.
  • PLUTÓN: Expresión compulsiva de los deseos subconscientes; manipulación intencionada de los demás para conseguir los propios fines; utilización despiadada de cualquier medio para evitar el dolor de enfrentarse con el propio yo; ambición de poder.

Los planetas en los elementos

Sol

El elemento del signo donde se halla el Sol, con frecuencia es el dominante en nuestra psicología, debido a que revela la sintonía de nuestra vitalidad básica, nuestra identidad y nuestra capacidad de autoproyección, así como las características fundamentales de nuestra conciencia. También muestra lo que es «real» para nosotros, porque la asunción inconsciente de lo que es particularmente real y de lo que no lo es determina cómo concentramos nuestra energía.

Por ejemplo, los signos de aire (Géminis, Libra y Acuario) viven en el reino abstracto del pensamiento, y para ellos, un pensamiento es tan real como cualquier objeto material. Los signos de agua (Cáncer, Escorpio y Piscis) viven en sus sentimientos, y su estado emocional determina su conducta más que cualquier otra cosa. Los signos de fuego (Aries, Leo y Sagitario) viven en un estado de actividad muy agitado e inspirado, y mantenerse en ese estado es crucial para su salud y su felicidad. Los signos de tierra (Tauro, Virgo y Capricornio) tienen sus raíces en la realidad física; el mundo material y las consideraciones relacionadas con la seguridad y la realización motivan su conducta más que cualquier otra cosa.

El elemento de nuestro signo solar revela la fuerza interior básica que motiva todo lo que hacemos, y también nos ofrece una perspectiva de cómo vemos la vida y qué expectativas tenemos de la experiencia vital.

Si nos referimos al nivel de sintonización de energía, el elemento del signo solar representa un tipo de carga energética que requiere una realimentación o recarga continua para que no se agote. Dicho de otro modo, el elemento de nuestro signo solar es el carburante que necesitamos para sentirnos vivos, es el poder que nos permite revitalizarnos y enfrentarnos a las tensiones y exigencias de la vida cotidiana.

El SOL en los signos de fuego
Individuo básicamente motivado por inspiraciones y aspiraciones. Recarga la energía mediante la actividad vigorosa y grandes exigencias físicas y persiguiendo nuevas visiones para el futuro.
El SOL en los signos de tierra
Individuo básicamente motivado por las necesidades materiales y el sentido práctico. Recarga la energía mediante el trabajo con el mundo físico, siendo productivo y alimentando los sentidos.
El SOL en los signos de aire
Individuo básicamente motivado por conceptos intelectuales e ideales sociales. Recarga la energía mediante el compromiso social y el estímulo intelectual.
El SOL en los signos de agua
Individuo básicamente motivado por profundos deseos y anhelos emocionales. Recarga la energía mediante una intensa experiencia emocional y las relaciones íntimas con otras personas.

Luna

El elemento del signo que ocupa la Luna representa una sintonía con el pasado que se manifiesta de forma automática, un tipo de sentimiento y de manera de ser de los cuales hemos de ser conscientes a fin de sentirnos interiormente seguros y cómodos con nosotros mismos. Este elemento y las experiencias relacionadas con él alimentan nuestra necesidad interior de sentirnos a gusto con nosotros mismos; mediante esta forma de expresión satisfacemos una necesidad interior que puede dar estabilidad a nuestra personalidad. El elemento de la Luna también nos dice cómo reaccionamos instintivamente ante nuestras experiencias, con qué energía nos adaptamos espontáneamente al flujo de la vida.

La LUNA en los signos de fuego
Individuo que reacciona antes las experiencias cambiantes con la acción directa y el entusiasmo. Se siente bien consigo mismo al expresar confianza y fuerza.
La LUNA en los signos de tierra
Individuo que reacciona ante las experiencias cambiantes con firmeza y estabilidad. Se siente cómodo consigo mismo siendo productivo y trabajando para conseguir determinados objetivos.
La LUNA en los signos de aire
Individuo que reacciona ante las experiencias cambiantes con previsión y una evaluación objetiva. Se siente cómodo consigo mismo al expresar ideas y en la interacción social.
La LUNA en los signos de agua
Individuo que reacciona ante las experiencias cambiantes con sensibilidad y emoción. Se siente cómodo consigo mismo cuando sus sentimientos están profundamente implicados en algo o alguien.

Mercurio

El elemento del signo donde se halla Mercurio indica qué energía específica y qué cualidades influyen en nuestros procesos de pensamiento, y cómo expresamos nuestros pensamientos en esa concreta longitud de onda vibratoria. Mercurio simboliza el impulso a establecer contacto y a tener una comunicación recíproca con los demás, así como todas las formas de coordinación, incluida la coordinación del sistema nervioso. Su elemento en una carta determinada representa el flujo interno (mediante la percepción) y el flujo externo (mediante la pericia, el lenguaje y la destreza manual) de la inteligencia; muestra la necesidad de ser comprendido por otras personas que tengan ideas afines, así como la necesidad de aprender de la información procedente del mundo externo.

MERCURIO en los signos de fuego
Los pensamientos están influidos por las aspiraciones, creencias, esperanzas y visiones del futuro que tiene el individuo. La pericia y el lenguaje se expresan de manera impulsiva, demostrativa y con entusiasmo.
MERCURIO en los signos de tierra
Los pensamientos están influidos por consideraciones prácticas y teñidos por actitudes tradicionales. La pericia y el lenguaje se expresan de manera persistente, paciente, cauta y concreta.
MERCURIO en los signos de agua
Los pensamientos están influidos por los más profundos sentimientos y anhelos del individuo. La pericia y el lenguaje se expresan de manera sensible, emocional e intuitiva.
MERCURIO en los signos de aire
Los pensamientos son en sí mismos cosas reales y están influidos por ideales abstractos y por consideraciones sociales. La pericia y el lenguaje se expresan de manera objetiva, articulada y con una compresión de los principios implicados.

Venus

Al igual que Mercurio, Venus representa un flujo hacia adentro y un flujo hacia afuera de la energía, y su emplazamiento en los distintos elementos se expresa como la forma de recibir y dar amor, afecto y placer sensual. El elemento en que se encuentra Venus representa nuestra forma de expresar afecto y cariño y de demostrar nuestros sentimientos. Esta es la fase del flujo hacia afuera de Venus. Pero la fase del flujo hacia adentro es igualmente importante: representa las formas de experiencia y los tipos de expresión que alimentan nuestra necesidad de sentir intimidad con los demás y que nos ayudan a sentirnos amados y apreciados.

Venus está relacionado con el «ego femenino». Una mujer necesita experimentar las características del signo de su Venus a fin de sentirse femenina. También muestra cómo recibe y se da a sí misma en el amor y el sexo. Por lo general, Venus es un indicador sexual más en las mujeres que en los hombres; indica cómo enfocan una relación que a la larga puede llegar al sexo, así como las relaciones sociales menos íntimas.

Para un hombre, Venus se relaciona con el romance y la belleza, y con imágenes que le sean especialmente atractivas. Describe el tipo de mujer que le atrae eróticamente, que le parece atractiva estéticamente y que enciende sus sentimientos[1]. Venus se relaciona también con los ideales del hombre sobre el amor, el sexo y las relaciones. Sin embargo, no es específicamente sexual; en los hombres, es más bien Marte el símbolo de la energía sexual. Pero en las mujeres, las energías de Venus y Marte son ambas componentes importantes de su naturaleza sexual, se combinan y, por lo general, son más inseparables que en el caso de la mayor parte de los hombres.

VENUS en los signos de fuego
El afecto y el aprecio se expresan de manera enérgica, directa y espléndida. El individuo siente amor e intimidad con otras personas compartiendo actividades enérgicas, aspiraciones y entusiasmos.
VENUS en los signos de tierra
El afecto y el aprecio se expresan de manera tangible, dependiente y física. El individuo siente amor e intimidad con otras personas comprometiéndose y construyendo una vida juntos, así como mediante el placer sensual y compartiendo responsabilidades.
VENUS en los signos de aire
El afecto y el aprecio se expresan mediante una intensa comunicación intelectual y un fuerte sentido del compañerismo. El individuo siente amor e intimidad con otras personas mediante el intercambio verbal, el encuentro de las mentes y unas relaciones sociales mutuamente agradables.
VENUS en los signos de agua
El afecto y el aprecio se expresan de manera emocional y compasiva. El individuo siente amor e intimidad con otras personas mediante un intercambio de sensibilidad y sentimientos a un nivel sutil que lleva a una sensación de profunda fusión.

Marte

El elemento de Marte muestra qué tipos de experiencias y formas de actividad estimulan nuestra energía física y con qué clase de energía buscamos afirmarnos a nosotros mismos. El elemento de Marte es la energía que alimenta la necesidad de excitación física y la forma mediante la que se puede expresar la agresividad a fin de poner a prueba la fuerza. Describe el método específico que utilizamos para conseguir lo que queremos: Marte en aire utiliza la persuasión, Marte en fuego utiliza el poder y la iniciativa, Marte en tierra utiliza la paciencia y la eficiencia, y Marte en agua utiliza la intuición, la astucia y una persistencia casi invencible.

Para un hombre, Marte muestra cómo se proyecta vigorosa, afirmativa y sexualmente. Indica cómo expresa su poder en una relación sexual y cómo expresa su masculinidad en todos los campos de iniciativa y liderazgo. Por lo tanto, está conectado con el «ego masculino».

En la carta de una mujer, Marte es también una fuerte imagen masculina en su psique; está íntimamente relacionado con una imagen románticamente excitante que enciende su energía y la ayuda a expresarse. El signo de Marte y sus aspectos son a menudo una clave que indica el tipo de hombre que una mujer encuentra atractivo.

MARTE en los signos de fuego
El individuo se autoafirma mediante una acción física directa, la iniciativa y una expansiva irradiación de energía. La energía física está estimulada por el movimiento constante, un confiado entusiasmo y la acción dinámica.
MARTE en los signos de tierra
El individuo se autoafirma mediante logros concretos que requieran paciencia y persistencia. La energía física está estimulada por el trabajo duro, la autodisciplina, los retos y los deberes.
MARTE en los signos de aire
El individuo se autoafirma mediante la expresión de ideas, la comunicación activa y una imaginación pictórica de energía. La energía física está estimulada por los desafíos mentales, el activismo social, las relaciones y las ideas nuevas.
MARTE en los signos de agua
El individuo se autoafirma mediante una sutileza y una persistencia emocionales y apelando a los más profundos sentimientos y necesidades de los demás. La energía física está estimulada por profundos anhelos, el sentimiento de ser necesitado por otras personas, sutiles intuiciones y la intensidad de la experiencia emocional.

Júpiter

El elemento de Júpiter muestra qué tipos de experiencias y formas de actividad generan una fe interior y la confianza en nosotros mismos. Para decirlo de otro modo, podemos experimentar un sentimiento protector de unidad con un poder o un propósito más grandes y una sensación de bienestar cuando actuamos en el nivel indicado por el elemento de Júpiter. Las oportunidades llegan a través de la expresión de la energía de ese elemento. Indica un abundante depósito de vitalidad que fluye de manera natural, lo cual redunda en beneficio de nuestra salud.

JÚPITER en los signos de fuego
El individuo alcanza la confianza interna cuando es expansivo, entusiasta, se siente seguro de sí mismo y está físicamente activo. Las oportunidades aparecen cuando asume riesgos para expresarse a sí mismo y probar cosas nuevas.
JÚPITER en los signos de tierra
El individuo logra la confianza interna cuando sintoniza con el espíritu práctico, la seriedad y la experiencia de los sentidos. Las oportunidades aparecen cuando trabaja duro, asume responsabilidades y sintoniza con la naturaleza y sus ritmos.
JÚPITER en los signos de aire
El individuo alcanza la confianza interna cuando investiga ideas nuevas, se comunica con otras personas y se dedica a mejorar la sociedad. Las oportunidades aparecen cuando expresa sus ideas con entusiasmo y trabaja con otras personas de cara a conseguir un objetivo futuro.
JÚPITER en los signos de agua
El individuo alcanza la confianza interna cuando profundiza en la experiencia emocional y expresa de forma positiva su imaginación y su compasión. Las oportunidades aparecen cuando es sensible y cariñoso con los demás, y cuando sigue intuitivamente los anhelos interiores.

Saturno

El elemento de Saturno en una carta indica, por lo general, un desafío: trabajar hacia la aceptación completa, sin temor, del nivel de experiencia representado por ese elemento concreto. El miedo es a menudo la consecuencia de un viejo patrón de vida que ahora se ha vuelto intolerablemente rígido y opresivo; la precaución y la disciplina relacionadas con este patrón de vida pueden seguir siendo útiles para nuestro crecimiento siempre y cuando las aceptemos como fuerza motivadora hacia una expresión coherente y concreta en esa esfera de la vida.

El elemento de Saturno indica en qué nivel de expresión tendemos a inhibirnos y dónde la energía se ve bloqueada o limitada. Este bloqueo interior se produce porque ese nivel de experiencia es excesivamente importante para nosotros. Por lo tanto, tenemos tendencia a sentirnos amarrados a esa esfera de su vida. Si intentamos expresar la energía con demasiada fuerza o si la evitamos o la reprimimos, tendemos a restringir su flujo natural.

SATURNO en los signos de fuego
Necesidad de estabilizar la propia identidad y de expresar la energía creativa con más regularidad y objetividad. Hay que esforzarse para lograr una autoexpresión más libre mediante el entusiasmo y la responsabilidad.
SATURNO en los signos de tierra
Necesidad de estabilizar la eficiencia y la precisión propias en el trabajo y a la hora de afrontar las responsabilidades cotidianas. Hay que esforzarse para dominar el mundo físico y desarrollar un enfoque sistemático.
SATURNO en los signos de aire
Necesidad de estabilizar el propio pensamiento y de disciplinar la mente sin caer en el pensamiento negativo. Hay que esforzarse para comunicarse con claridad y espíritu práctico, así como para asumir efectivamente las responsabilidades sociales con sinceridad, a la vez que se mantiene una perspectiva desapegada.
SATURNO en los signos de agua
Necesidad de estabilizar las emociones y la sensibilidad, expresando los sentimientos a la vez que se desarrolla un mayor desapego con respecto a ellos. Hay que esforzarse para expresar los sentimientos con auto-aceptación a la vez que se disciplina la hipersensibilidad.

Urano, Neptuno y Plutón

Para la comprensión de la carta natal de un individuo, el elemento que ocupen estos tres planetas exteriores es de relativa importancia. Cada uno de estos planetas permanece en un determinado elemento (y signo) un buen número de años, y por lo tanto, poco significado individualizado puede derivarse de un factor tan propagado. El énfasis elemental que revelan los planetas exteriores durante un período de varios años tiene su principal interés a la hora de iluminar las diferencias generacionales y los cambios sutiles en la psicología de masas del mundo entero.