Escena VII
TEODORA, MERCEDES, JULIÁN y SEVERO.
El orden de los personales, de izquierda a derecha, es el siguiente: Mercedes, Teodora, Julián, Severo, Teodora y Julián formando un grupo: ella en los brazos de él.
JULIÁN Pase por primera vez,
y ¡vive Dios! que es pasar,
pero quien vuelva a manchar
con lágrimas esta tez, (Señalando a Teodora.)
yo juro, y no juro en vano,
que no pasa, si tal pasa,
los umbrales de esta casa,
ni aun siendo mi propio hermano. (Pausa. Julián acaricia y consuela a Teodora.)
SEVERO Repetí lo que la gente
murmura de ti, Julián.
JULIÁN Infamias.
SEVERO Pues lo serán.
JULIÁN Lo son.
SEVERO Pues deja que, cuente
lo que todo el mundo sabe.
JULIÁN ¡Vilezas, mentira, lodo!
SEVERO Pues repetirlo…
JULIÁN No es modo
ni manera de que acabe. (Pequeña pausa.)
SEVERO No tienes razón.
JULIÁN Razón
y de sobra. Fuera bueno
que me trajeses el cieno
de la calle a mi salón.
SEVERO ¡Pues será!
JULIÁN ¡Pues no ha de ser!
SEVERO ¡Mío es tu nombre!
JULIÁN ¡No más!
SEVERO ¡Y tu honor!
JULIÁN Piensa que estás
delante de mi mujer. (Pausa.)
SEVERO (A Julián, en voz baja.)
(¡Si nuestro padre te viera!)
JULIÁN ¡Cómo!… Severo, ¿qué es esto?
MERCEDES Silencio, que viene Ernesto.
TEODORA (Aparte.) (¡Qué vergüenza!… ¡Si él supiera!)
(Teodora vuelve el rostro y lo inclina. Don Julián le mira fijamente.)