¿Qué hago si mi chico no responde mis sms’s?
¡Cómo molesta eso! Es incluso hasta una falta de educación, ¿verdad? Cuando pasa eso una piensa que la otra persona no tiene respeto por una misma. Que no le importas a la otra persona. ¿Tanto cuesta escribir unas pocas palabras de respuesta? Pero no solo queremos una respuesta, claro. Porque si nos responde con un escueto "ok" tampoco estamos contentas. ¿Qué es lo que esperamos de la persona con la que compartimos nuestro sms?
Si te encuentras en esta molesta situación, seguramente tu relación con el receptor de tus sms acaba de empezar o se ha iniciado hace poco tiempo. Porque normalmente estas situaciones se solucionan de una manera u otra con el tiempo, ya que seguir de este modo es insostenible. Pues te diré que tiene fácil solución. Aunque dependerá de cada situación.
Por otro lado, un aspecto que aparentemente es muy trivial, sin importancia, como son unos sms, encierran una gran relevancia ya que se trata del inicio de la relación. Y el comienzo de una relación es muy importante. Es el momento de establecer muchas de las reglas que se seguirán en el curso de la misma. Lo que establezca como "normal", como una regla a seguir, va a seguir siendo así. Aunque más adelante, por supuesto, se puede cambiar, modificar o matizar, ya que nunca está todo perdido. Aunque resultará más difícil con el tiempo que pase. Por eso es importante ser consciente de que al principio se establecen conductas que se perpetuarán en vuestra relación. Si no te gusta cómo está resultando, cámbialas. Está en tu mano hacerlo y sentirte más feliz. Porque quieres ser una mujer fuerte y segura. Y la mujer fuerte y segura es lo que hace, trabaja para ser más feliz, sentirse más cómoda con lo que vive y más orgullosa de lo que tiene. Contenta, tranquila y afortunada.
Me gustaría matizar un aspecto. Cuando hablo de tu chico, lo hago por ampliación, porque pienso que va a ser la predominancia de las lectoras. Pero siempre me refiero a la persona con la que compartes tus sentimientos, ya sea chico, hombre, mujer, chica, lo que sea. Eso no importa. El resultado es el mismo. Y el foco de importancia es el mismo: tú. Tú que eres mujer. Tus necesidades, anhelos, sentimientos y deseos. Y el objetivo es que consigas la tranquilidad de sentirte fuerte y segura. Lo que hagas con eso lo decides tú. Porque tu vida es tuya y solo tuya, para decidir y hacer lo que tú quieras.
Muy bien, una vez aclarado eso, vayamos al foco del problema. Tu chico no responde tus sms. ¿Qué puedes hacer tú? Pues tienes mucho margen de acción, tienes diferentes opciones que puedes elegir y llevar a cabo. Y también hay muchos aspectos que me gustaría que observaras antes de enfadarte o sentirte triste porque no responden tu sms.
Como para todas las cuestiones, para entender la situación de lo que está pasando, es bueno intentar ponerse en la piel de la otra persona. Lo normal, o a lo que tendemos, es a medir a todo el mundo con nuestro propio rasero, con nuestras normas de actuación y con nuestro modo de pensar. Pero eso no podemos hacerlo. En el momento en el que se trata de otra persona, todo lo dicho deja de ser la unidad de medida. ¿Por qué? Porque cada persona somos un mundo, todos tenemos nuestra manera de pensar, el modo en el que hemos sido educados, lo que hemos aprendido, lo que nos gusta, lo que nos parece importante y lo que no. Entonces, no puedes juzgar o medir a la otra persona con tus herramientas de medida personales. Tienes que dejar un espacio a lo que desconoces, a todo eso que puede y es diferente en la otra persona. Cosa que a su vez, enriquece la relación, te hace aprender, te abre miras y te da qué pensar. ¿Qué intento decirte con todo esto? Que es probable que lo que piensas que pasa no suceda así. Y que hay mil variables que tú puedes pensar y hay mil más que no se te han ocurrido. Por eso mi consejo es tener paciencia. No puedes condenar a alguien sin escuchar sus argumentos. Y ahora te voy a dar una clave increíble. De aquellas que hablaba en la introducción cuando decía que ibas a encontrar cosas que ya sabías pero que a veces se olvidan pero son la clave. Pues aquí viene: hablando se entiende la gente. Ahora quizás no ves su relevancia. Pero recuérdalo, porque te va a ser útil en infinidad de situaciones. A quién de nosotras no le ha pasado tener clarísimo algo, estar segurísima de algo y darse cuenta después al hablar y escuchar una explicación de que estaba equivocada. Por eso te digo: tranquila.
Si tu chico no responde tu sms pueden pasar mil cosas. Puede ser que si está en el trabajo no pueda responder. Puede ser que lo haya leído, le haya encantado, se haya liado con otra cosa y piense en contestar pero no lo ha hecho. Puede ser que no lo haya visto. Puede ser que lo haya leído pero prefiera llamarte y está esperando a un buen momento para hacerlo. Puede ser que no le haya gustado tu sms y que no sepa cómo responderte. Puede ser que no le gusten los sms. Puede ser que no le guste escribir sms por no hacer faltas de ortografía. También es verdad que todas estas cosas deben solucionarse en poco. Y otra cosa, puede ser que en el trabajo no tenga tiempo de responderte. Claro, no pretendemos que nos responda en medio de una reunión o con un cliente, paciente, un reparto, lo que sea. Pero… ¿es que no hace nunca una pausa? ¿No para para hacer un pipí? Juzga siendo justa, pero sin ser engañada.
Aunque te diré una cosa: tiene que responderte. No importa la vía de hacerlo. Tiene que hacerlo. La pelota está en su campo y le toca responder. No cometas un error: le has escrito un sms, no responde pero tú le envías otro sms. Si haces eso él pensará que no importa si no te responde porque tú le envías otro igualmente y se puede repetir. Y eso no nos gusta. La mujer fuerte y segura merece respeto y eso es lo que vamos a exigir. Ante todo respeto hacia nuestra persona.
Ahora viene la parte de la negociación. Puedes tomar tú sola la decisión o puedes hablar con él para llegar a un acuerdo. Te preguntarás ¿cómo voy a tomar yo sola la decisión? Sí. Mira, si no te gusta que no te responda o que responda tarde, es porque tú le escribes y no recibes respuesta. No le escribas tú primero. Espera que sea él quien escriba y tú responde al sms. De este modo no esperas, no estás a la expectativa y también te da la oportunidad de ver el ritmo que lleva el chico. Es una opción muy válida y muy eficaz. Inténtalo, ya verás como funciona. Es que el estar siempre a la expectativa, esperando y pendiente no es muy bueno para la salud. La cosa debería ser más como yo hago mi vida y mis cosas y cuando recibo un sms me encanta y estoy muy contenta, ¿no?
Si no te convence esta opción, lo que tienes que hacer es hablar con él. Hablando se entiende la gente. Hablas con él y le dices lo que te gusta, lo que quieres, lo que te molesta. Siempre, siempre, siempre hablando. No discutiendo. El mal rollo nunca puede traer buen rollo. Entonces caben dos posibilidades: que la situación después de hablar cambie o que siga igual. Si sigue igual siempre tienes la opción de seguir el consejo anterior. Y también puedes decirle que no es eso lo que habíais hablado. Si el chico en cuestión no reacciona… ¿valdrá realmente la pena? Porque si sigue igual tú vivirás situaciones desagradables que ves que no cambian. Pero no estamos en esta vida para soportar cosas feas, ¿no crees? Porque, ¿sabes qué? Hay muchos chicos a los que les encanta escribir sms.
Me gustaría repetir que antes de juzgar tengas paciencia y escuches lo que la otra persona tiene que decir. Por mucho que puedas imaginar o por mucho que estés segura de algo es muy probable que otra cosa que no hayas pensado sea la respuesta. ¿Te la vas a perder? El poder de decisión lo vas a tener siempre. Pero siempre es mejor entender las cosas antes de actuar. Pero también te diré: no pierdas el tiempo con alguien que en el fondo sabes que no lo merece. No cometas el error de adaptarte tú a las reglas que impone la otra persona. No renuncies a lo que sabes que te hace feliz a ti. No renuncies a lo que quieres y necesitas. Esa actitud te hará conseguirlo.