PRÓLOGO
DON FRANCISCO Gasol, Caballero del orden de Santiago, del Consejo de su Majestad, y su notario en los Reinos de la Corona de Aragón. El Alférez Francisco de Segura.
Pasando a Cataluña Alonso Jerónimo de Salas Barbadillo por esta ciudad de Zaragoza, con quien en fe de ser todos de una patria, y nacido en ese Reino de Toledo, profesé estrecha amistad, dejó en mi poder por prendas de voluntad algunos de los más felices trabajos de su ingenio, y entre ellos esta sutil novela de la hija de Celestina, donde la invención es agudísima, la disposición admirable y la elocución peregrina; leíala muchas veces, y conténtome tanto que me dolí de que esta obra no se comunicase a todos, y así tome resolución de imprimirla, y habiéndolo de hacer, halle a V.m. por dueño, y patrón, tanto por no defraudar el interés del autor que sé yo bien que si él la pusiera en el molde, lo hiciera así como por lo [que] yo me precio; y honro con el nombre de criado y servidor de v. m. cuya persona guarde N. S. mil años, en vida mi Señora doña Juana de Mendoza, y en estado y sucesión acreciente, de Zaragoza, y Mayo 22 de 1612.
EL ALFÉREZ FRANCISCO DE SEGURA.