Agradecimientos
Gracias, William J. H. Andrewes, el cuidador de la colección David P. Wheatland de Instrumentos Científicos Históricos en la Universidad de Harvard, por iniciarme primero a la erudición de la Longitud, y por organizar el Simposio de Longitud en Cambridge, del 4 al 6 de noviembre de 1993.
Las gracias, también, a los editores de Harvard Magazine, especialmente a John Bethell, Christopher Reed, Jean Martin y Janet Hawkins, por enviarme al Simposio de Longitud y publicar mi artículo sobre él, como la historia de la portada del ejemplar de marzo/abril de 1994.
Las gracias también a los jueces del Consejo para el Avance y Apoyo de Educación, División de las Publicaciones, por otorgar su Medalla de Oro 1994 a mi artículo de Longitud, como el mejor, en una revista de alumnos.
Especial gracias a George Gibson, Publicador de Walker y Compañía, por leer ese artículo, que lo ve como el principio de un libro, algo caído del cielo para mí.
Y a Michael Carlisle, vicepresidente de William Morris Agency, muchas gracias tanto por representar este proyecto, como por su usual olfato.