Las Elegidas: Vampiresas destinadas a servir a la Virgen Escriba. Se consideran miembros de la aristocracia, aunque de una manera más espiritual que temporal. Tienen poca, o ninguna, relación con los machos, pero pueden aparearse con guerreros con objeto de reproducir su especie si así lo dictamina la Virgen Escriba. Tienen la capacidad de predecir el futuro. En el pasado, eran utilizadas para satisfacer las necesidades de sangre de miembros solteros de la Hermandad, pero dicha práctica ha sido abandonada por los hermanos.
Esclavo de sangre: Vampiro hembra o macho que ha sido sometido para satisfacer las necesidades de sangre de otros vampiros. La práctica de mantener esclavos de sangre ha caído, en gran medida, en desuso, pero no es ilegal.
Hellren: Vampiro que elige a una hembra como compañera. Los machos pueden tener más de una hembra como compañera.
Hermandad de la Daga Negra: Guerreros vampiros entrenados para proteger a su especie contra la Sociedad Restrictiva. Como resultado de una cría selectiva en el interior de la raza, los miembros de la Hermandad poseen una inmensa fuerza física y mental, así como una enorme capacidad para curarse de sus heridas con rapidez. La mayoría no son propiamente hermanos de sangre. Se inician en la Hermandad a través de la nominación de uno de sus miembros. Agresivos, autosuficientes y reservados por naturaleza, viven apartados de los humanos y tienen poco contacto con miembros de otras clases, excepto cuando necesitan alimentarse. Son objeto de leyendas y muy respetados dentro del mundo de los vampiros. Sólo se puede acabar con ellos si se les hiere gravemente con un disparo o una puñalada en el corazón.
Leelan: Término cariñoso, que se puede traducir de manera aproximada como «lo que más quiero».
El Ocaso: Reino intemporal donde los muertos se reúnen con sus seres queridos durante toda la eternidad.
El Omega: Malévola figura mística que pretende la extinción de los vampiros a causa de un resentimiento hacia la Virgen Escriba. Existe en un reino intemporal y posee grandes poderes, aunque no tiene capacidad de creación.
Periodo de Necesidad: Época fértil de las vampiresas. Generalmente dura dos días y va acompañado de unos intensos deseos sexuales. Se presenta aproximadamente cinco años después de la transición de una hembra, a partir de ahí, una vez cada década. Todos los machos responden de algún modo si se encuentran cerca de una hembra en periodo de necesidad. Puede ser una época peligrosa, con conflictos y luchas entre machos, especialmente si la hembra no tiene compañero.
Primera Familia: El rey y la reina de los vampiros, y los hijos nacidos de su unión.
Princeps: Grado superior de la aristocracia de los vampiros, sólo superado por los miembros de la Primera Familia o la Elegida de la Virgen Escriba. El título es hereditario, no puede ser otorgado.
Pyrocant: Se refiere a una debilidad crítica en un individuo. Dicha debilidad puede ser interna, como una adicción, o externa, como un amante.
Restrictor: Miembro de la Sociedad Restrictiva. Se trata de humanos sin alma que persiguen vampiros para exterminarlos. A los restrictores se les debe apuñalar en el pecho para matarlos; de lo contrario, son eternos. No comen ni beben y son impotentes. Con el tiempo, su cabello, su piel y el iris de sus ojos pierden pigmentación hasta convertirse en seres rubios, pálidos y de ojos incoloros. Huelen a talco para bebés. Tras ser iniciados en la Sociedad por el Omega, conservan un frasco de cerámica dentro del cual ha sido colocado su corazón después de ser extirpado.
Rythe: Forma ritual de salvar al honor. Lo ofrece alguien que haya ofendido a otro. Si es aceptado, el ofendido elige un arma y ataca al ofensor, que se presenta ante él sin protección.
Sellan: Vampiresa que se ha unido a un macho tomándolo como compañero. En general, las hembras eligen a un solo compañero debido a la naturaleza fuertemente territorial de los machos apareados.
Sociedad Restrictiva: Orden de cazavampiros convocados por el Omega con el propósito de erradicar la especie de los vampiros.
Transición: Momento crítico en la vida de los vampiros, cuando él o ella se convierten en adultos. A partir de ese momento, deben beber la sangre del sexo opuesto para sobrevivir y no pueden soportar la luz solar. Generalmente, sucede a los veinticinco años. Algunos vampiros no sobreviven a su transición, sobre todo los machos. Antes del cambio, los vampiros son físicamente débiles, sexualmente ignorantes e indiferentes, e incapaces de desmaterializarse.
La Tumba: Cripta sagrada de la Hermandad de la Daga Negra. Usada como sede ceremonial y como almacén de los frascos de los restrictores. Entre las ceremonias allí realizadas se encuentran las iniciaciones, funerales y acciones disciplinarias contra los hermanos. Nadie puede acceder a ella, excepto los miembros de la Hermandad, la Virgen Escriba o los candidatos a una iniciación.
Vampiro: Miembro de una especie separada del Homo sapiens. Los vampiros tienen que beber sangre del sexo opuesto para sobrevivir. La sangre humana los mantiene vivos, pero su fuerza no dura mucho tiempo. Después de su transición, que generalmente sucede a los veinticinco años, son incapaces de salir a la luz del día y deben alimentarse de la vena regularmente. Los vampiros no pueden «convertir» a los humanos con un mordisco ni con una transfusión sanguínea, aunque, en algunos casos, son capaces de procrear con la otra especie. Pueden desmaterializarse a voluntad, pero tienen que buscar tranquilidad y concentración para conseguirlo, y no pueden llevar consigo nada pesado. Son capaces de borrar los recuerdos de las personas, siempre que sean a corto plazo. Algunos vampiros son capaces de leer la mente. Su esperanza de vida es superior a mil años, y en algunos casos incluso más.
La Virgen Escriba: Fuerza mística consejera del rey, guardiana de los archivos vampíricos y encargada de otorgar privilegios. Existe en un reino intemporal y posee grandes poderes. Capaz de un único acto de creación, que empleó para dar existencia a los vampiros.
Capítulo 1
–Ah, infiernos, V, me estás matando. – Butch O'Neal rebuscó a través del cajón de los calcetines, mientras buscaba los de seda negra, encontrando los de algodón blanco.
–No, espera.-Él sacó un calcetín de vestir. No fue exactamente un triunfo.
–Si quisiera matarte, poli, entonces el calzado sería la última cosa en tu mente.
Butch miró fijamente a su compañero de cuarto. Su compañero fan de los Red Sox. Su… bien, uno de sus dos mejores amigos.
Ambos, por así decirlo, casualmente eran vampiros.
Fresco de la ducha, Vishous tenía una toalla envuelta alrededor de su cintura, exhibiendo su musculoso pecho y sus gruesos brazos.Estaba poniéndose un guante de cuero, que cubría completamente su mano izquierda tatuada.
–¿Tienes que ir vestido con mi traje?
V le sonrió, sus colmillos destellaban en medio de su perilla -Me sientan bien.
–¿Por qué no le pides a Fritz que te consiga algunos?
–Él está demasiado ocupado saciando nuestros deseos para tus ropas, hombre.
De acuerdo, tal vez recientemente Butch consiguió un contacto interno en Versace, y quién habría pensado que lo habría tenido, pero ¿cuán difícil puede ser el meter una docena de sedas adicionales en la casa?
–Las pediré para ti.
–No eres un caballero. – V retiró hacia atrás su cabello oscuro. Los tatuajes de su sien izquierda aparecieron y luego quedaron encubiertos otra vez. – ¿Necesitas el Escalade esta noche?
–Sí, gracias. – Butch metió sus pies en sus mocasines de Gucci, sin sentarse.
–¿Entonces vas a ir a ver a Marissa?
Butch asintió. – Necesito saberlo. De una u otra manera.
Y él tenía el presentimiento de que iba a ser la otra.
–Ella es una buena mujer.
Ella seguro por todos los infiernos que lo era, por lo cuál probablemente era por lo que no le devolvía sus llamadas. El ex-policía quien como buen escocés no era exactamente buen material para relacionarse con las mujeres, humanas o vampiras. Y el hecho de que él no era una de esas cosas no lo ayudaba en la situación.
–Bien, poli, Rhage y yo estaremos relajándonos en el One Eye. Vienes y nos buscas cuando lo hayas hecho.
Un golpe, como si alguien golpeara la puerta principal con un ariete, hizo que giraran sus cabezas.
V se subió la toalla. – Maldita sea, el chico volador tiene que aprender a usar el timbre de la puerta.
–Intenta hablarle. Él no me escucha.
–Rhage no escucha a nadie. – V bajó corriendo hacia vestíbulo.
Cuando el estruendo se silenció, Butch fue hacia su extensa colección de corbatas. Escogió una Brioni azul claro, volvió el cuello de su blanca camisa, y colocó la seda alrededor de su cuello. Cuando salió de la sala de estar, pudo oír a Rhage y a V hablando sobre ¿”RU still down” de Tupac?
Butch tuvo que reírse. Hombre, su vida le había llevado a un montón de lugares, muchos de ellos peligrosos, pero nunca había pensado que terminaría viviendo con seis vampiros guerreros. O estando en los alrededores de las peleas para proteger su decreciente especie oculta. En cierta forma, sin embargo, él tenía un lugar con la Black Dagger Brotherhood. Y Vishous, Rhage y él formaban un trío impresionante.
Rhage vivía en la mansión cruzando el patio con el resto de los Brotherhood, pero el triunvirato estaba fuera de la casa del guarda, donde V y Butch cayeron. El Pit, como era conocido el lugar, era un dulce alojamiento comparado con la casucha en la que Butch había vivido. Él y V tenían dos dormitorios, dos cuartos de baño, una cocina, y una sala de estar que estaba decorada con un atractivo estilo, Sótano de casa de Fraternidad Un par de divanes de cuero, TV de pantalla de plasma de alta definición, un futbolito, y bolsos de gimnasio por todas partes.
Cuando Butch entró en el cuarto principal, obtuvo una vista del conjunto de Rhage para la noche: trinchera negra de cuero que caía desde sus hombros hasta sus tobillos. Remera negra metida en los pantalones de cuero.Botas de combate, lo hacían sobrepasar los 2,05 m. Así vestido, el vampiro era sin ninguna duda, extremadamente atractivo. Aun para un hetero reconocido como Butch.
El hijo de puta realmente doblaba las leyes de la física, era muy atractivo. El cabello rubio estaba cortado corto atrás y más largo en la frente. El azul de sus ojos eran del color del agua del mar de las Bahamas. Y la cara hacía que Brad Pitt se viera como un candidato para The Swan.
Pero él no era un niño de mamá, pese a ser fascinante. Algo oscuro y letal hervía detrás de un relumbrante exterior, y tú lo sabías al minuto de verlo. Él emitía las vibraciones de un tipo que mientras sonreía, hacía la aclaración directamente con sus puños, incluso si escupía entre dientes mientras se encargaba del asunto.
–¿Qué estás haciendo, Hollywood?-Preguntó Butch.
Rhage sonrió, mostrando un espléndido set perlado con esos largos caninos. – Haciendo tiempo para salir, poli.
–Maldición, vampiro ¿no tuviste bastante anoche? Esa pelirroja parecía un asunto serio. Y también su hermana.
–Ya me conoces. Siempre hambriento.
Sí, bien, afortunadamente para Rhage, había una corriente interminable de mujeres más que felices para complacer sus necesidades. Y dulce Jesús, el tipo las tenía. No bebía. No fumaba. Pero él corría entre las damas como Butch nunca había visto.
Y no es que Butch conociese a muchos niños del coro.
Rhage miró hacia V. – Ves a vestirte, hombre. A menos que ¿Estás pensando en ir al One Eye con una toalla?
–Deja de cronometrarme, mi hermano.
–Entonces mueve el culo.
Vishous se levantó de detrás de la pesada mesa donde estaba el equipo informático que podía dar a Bill Gates una erección. Desde este centro de mando, V ejecutaba y supervisaba los sistemas de seguridad del recinto del Brotherhood, incluyendo la casa principal, las instalaciones subterráneas de entrenamiento, el Tomb y su Pit, así como también el sistema de túneles subterráneos que interconectaban los edificios. Él controlaba todo: las contraventanas replegables de acero que había instaladas en cada ventana; las cerraduras en las puertas de acero; la temperatura en las habitaciones; la iluminación; las cámaras de seguridad; las verjas.
V había preparado el equipo entero por sí mismo antes de que el Brotherhood se hubiese movido hacía tres semanas. Los edificios y túneles estaban preparados desde principios de 1900, pero en su mayor parte no habían sido utilizados. Después de los acontecimientos en julio, no obstante, la decisión había sido tomada para consolidar las operaciones de los Brotherhood, y todos ellos habían venido aquí.
Mientras V se dirigía a su dormitorio, Rhage sacó un Tootsie Roll Pop de su bolsillo, desgarró el rojo envoltorio, y se lo metió en la boca. Butch podía sentir como el tipo miraba fijamente. Y no se sorprendió cuando el hermano conectó con él.
–De manera que no puedo creerme que te vistas de la mejor manera para hacer un viaje al One Eye, poli. Supongo, éste es un servicio peligroso, incluso para ti. La corbata, los gemelos de los puños de la camisa son todos nuevos, ¿Verdad?
Butch alisó la Brioni sobre su pecho y alargó la mano para coger la chaqueta de Tom Ford que hacía juego con sus amplios pantalones negros. Él no quería comentar lo de Marissa. Solo hablar del tema con V había sido suficiente. Además, ¿qué podía decirle él?
Ella me cerró las puertas cuando me la encontré, y me evita desde hace tres semanas. Así que en lugar de tomar la indirecta, me encabezono y mendigo como un perdedor desesperado.
Bien, él realmente quería sacar a relucir eso delante del Sr. Perfecto, incluso aun cuando el tipo era un buen camarada.
Rhage dio la vuelta a la piruleta en su boca. – Dime una cosa. ¿Por qué pierdes el tiempo con las ropas, hombre? No tienes que hacer nada con tu mojo. Me refiero, te veo siempre rechazando a las mujeres en la barra. ¿Estás intentando salvarte del matrimonio?
–Yup. Tienes razón. Tienen que llevarme atado para que camine por ese pasillo.
–Vamos, Realmente tengo curiosidad. ¿Estás reservándote para alguien? – Cuando sólo hubo silencio, el vampiro se rió suavemente. – ¿La conozco?
Butch entrecerró los ojos, sopesando si la conversación terminaría más rápidamente si él cerrase la boca. Probablemente no. Una vez que Rhage empezaba, no lo dejaba hasta que él decidía que se había acabado. Hablaba de la misma forma que mataba.
Rhage negó con la cabeza tristemente. – ¿Ella no te necesita?
–Lo sabremos esta noche.
Butch verificó su nivel de dinero en efectivo. Dieciséis años como detective de homicidios no habían forrado mucho sus bolsillos que digamos. Ahora estaba colgado del Brotherhood. Tenía muchos verdes, posiblemente no podría gastarlos lo suficientemente rápido.
–Que tengas suerte, poli.
Butch lo miró de arriba abajo. ¿Cómo lo comprendes?
–Siempre me he preguntado como sería vivir con una mujer que valiese la pena.
Butch se rió. El tipo era un dios sexual, una leyenda erótica en su raza. V le había contado que historias sobre Rhage habían pasado de generación en generación cuando el tiempo era el correcto. La idea que de podría cambiar para ser el marido de alguien era absurda.
–De acuerdo, Hollywood, ¿Cuál es el golpe final? Vamos, dámelo.
Rhage se sobresaltó y apartó la mirada.
Por todos los infiernos, el tipo hablaba en serio. ¡So! Escucha, no significa nada.
–Nah, es guay. – La sonrisa reapareció, pero los ojos eran planos. Él caminó con paso lento hacia el basurero y tiró el palito de la piruleta a la basura. – Ahora, ¿Podemos salir de aquí? Estoy cansado de esperaros niños.