340 «Esa Voz que me rodea, cual un mar reverberante, dice así:
"¿Y es ésta tu tierra, tan desfigurada, destrozada en mil pedazos?
¡He aquí que todo te elude, puesto que me eludes tú a mí!
Cuanto te he quitado, no te lo arrebaté para dañarte, sino para que lo buscases en mis brazos.
Todo lo que en tu criterio infantil, errado, juzgaste perdido, en tu hogar te lo he guardado.
¡Levántate, toma mi mano y ven a mí!"».
(Francis Thompson en The Hound ofHeaven)