Capítulo 9
Creación de personajes multidimensionales
A los críticos les encanta rechazar una película alegando que el personaje no crece ni cambia. A medida que el personaje se dirige hacia su meta, algo debe ocurrir en el trayecto. Un personaje bien definido siempre gana algo al participar en la historia: y una historia —a su vez— gana algo del personaje.
Antes hemos hablado de cómo Rose, en La Reina de África, cambia el curso de la historia por su personalidad, voluntad y determinación. Encontramos relaciones parecidas entre personajes e historia. Podemos verla con Edna en En un lugar del corazón, Martin y Matt en Tiburón o John Book en Único testigo.
Cada uno de ellos entra en la historia como un personaje con volumen y no como estereotipo. Todos adquieren mayor fuerza a medida que la historia y el resto de los personajes actúan sobre ellos, aconsejándoles, enseñándoles, luchando con ellos, enfrentándose a ellos, presionándoles e influyéndoles. Precisamente por haber sido personajes tan reales como la vida misma son capaces de desarrollarse y ser transformados.
Todos hemos visto personajes estereotipados, definidos únicamente por su aspecto físico. Son personajes unidimensionales. Se les puede describir con una o dos palabras: la rubia tonta; el detective irresistible; el salvavidas musculoso; la modelo despampanante. A veces, estos personajes sólo tienen un pequeño papel en la historia y actúan como mera ambientación. Pero otras veces, estos tipos son personajes principales que limitan la película debido a sus también limitadas dimensiones.
Los personajes bien definidos son más abiertos, más sustanciales. Conocemos diversos aspectos de ellos. Entendemos su forma de pensar. Los vemos actuar. Y somos conscientes de su estado emocional a través de sus reacciones.
Pensamientos, acciones y emociones pueden ser definidas como las tres dimensiones del personaje.
La mayoría de las películas suprimen una o dos de estas dimensiones. Intensifican una de ellas y crean personajes-tipo. Un personaje-tipo es aquel que está definido sólo por una categoría. James Bond es un personaje-tipo. Es un héroe definido por la acción. Sabemos poco de su actitud ante la vida (excepto que le gusta dormir con mujeres atractivas). Su vida emocional es irrelevante y casi inexistente. Nunca le verás llorar, ni mostrar miedo o inseguridad, enfadarse, ni nada que no sea sangre fría.
Todos hemos visto también otros tipos. La desconsolada viuda que es pura emoción, el pedante erudito todo filosofía y el héroe victorioso todo acción.
Cada una de estas categorías puede a su vez, subdividirse. Pensar se relaciona con las actitudes y con el modo de razonar del personaje. Actuar se refiere tanto a las acciones en sí, como a las decisiones que llevan a la acción. Y las emociones incluyen tanto el carácter sentimental del personaje como sus reacciones emocionales. Con cualquier personaje bien definido, alguna de estas categorías será más fuerte, pero todas contribuyen a la creación de un personaje tridimensional.
Modo de pensar / actitudes
El modo de pensar es lo más difícil de plasmar. Los personajes que están demasiado definidos por su modo de pensar resultan abstractos, habladores, indulgentes consigo mismos, y, por lo general, aburridos. Pero cada personaje tridimensional debe tener un modo de pensar. Creer en algo: la religión, los derechos de la mujer, la liberación homosexual, Dios, su propia madre, un pastel de manzana. Así sus creencias respaldarán a sus acciones. Un personaje que cree en la liberación homosexual probablemente lo manifieste, o lo sea él mismo. Su modo de pensar encontrará su forma dramática en lo que hace.
Los personajes tienen también actitudes ante la vida. Pueden ser cínicos, positivos, optimistas o agresivos. Todo buen personaje toma una postura ante la vida. Puede tener una apariencia saludable o ser un neurótico. Puede estar seguro o inseguro de sí mismo. Puede ver la vida de color rosa o verla gris. Y su actitud se manifestará en las acciones que realiza y en su relación con los demás personajes.
Conocemos la realidad de un personaje por su actitud y por lo que hace más que por su modo de pensar. Cuando el modo de pensar y la acción entran en conflicto nos encontramos con un hipócrita. Si te digo «yo amo a la humanidad» y me mantengo al margen de la gente o hago la vida imposible a otros, mi actitud y mis emociones me definen y mi modo de pensar no es más que un conjunto de palabras vacías.
La actitud es más «actuable» que el modo de pensar.
Se expresa más fácilmente a través de la acción. No es muy difícil mostrar compasión, amor, receptividad o cinismo. Pero el peligro para reflejar el modo de pensar y la actitud está en la tentación de hacer hablar al personaje en vez de hacerlo actuar.
Decisiones / acciones
La acción es la sangre del drama. En una novela podemos centrarnos en los sentimientos, actitudes y creencias. En el drama, el centro es la acción. La acción se divide en dos partes: la decisión de actuar y la acción en sí misma.
Cuando vemos una película, normalmente sólo nos fijamos en la acción. Pero es la decisión de actuar lo que nos ayuda a entender cómo ve las cosas el personaje. El momento de la decisión (apretar el gatillo, decir sí a una misión o comprometerse en una relación) es un momento poderoso en la revelación del personaje. James Bond raramente decide, simplemente actúa. Pero Rose, en La Reina de África toma una decisión antes de marcharse con Allnutt en su barco y toma otra decisión antes de tirar la ginebra, y otra antes de sugerirle volar el «Louisa».
En Tootsie vemos una escena divertida en la que Michael debe decidir rápidamente qué hacer. Está esperando para llevar a Sandy a cenar. Mientras espera, ve un «precioso vestidito» en su armario que parece hecho «a la medida» de Dorothy. Decide probárselo y en ese momento entra Sandy en la habitación. El momento está abierto al malentendido, a menos que Michael decida y actúe rápidamente.
SANDY (abriendo la puerta): Michael, no hace falta que salgamos a cenar. Podemos quedarnos aquí.
Ve a Michael, con los pantalones bajados, y reacciona. Michael da un salto, intentando taparse, intentando imaginar qué decir.
MICHAEL: Sandy… Yo, ¡yo te quiero!
SANDY (sorprendida) ¿Me quieres?
MICHAEL (Lentamente hacia ella, con los pantalones por los tobillos, los brazos extendidos): ¡Te quiero!
Y nos hace gracia la rápida ocurrencia de Michael.
John Book en Único testigo decide no acostarse con Raquel la noche de la construcción del granero, y esta decisión es uno de los momentos de más fuerza de la película. Rose, en La Reina de África, decide permitir que Allnutt duerma junto a ella bajo el toldo, para resguardarse de la lluvia, y esta decisión inicia el cambio en su relación.
Las decisiones deben conducir a acciones concretas. Los personajes han de permanecer activos en la historia. Es labor del personaje principal hacer progresar la historia por medio de acciones. Los personajes pueden ser activos de muchas formas. Pueden buscar, investigar, descubrir, engañar, planear una estrategia, transformar a otros y a sí mismos, crear nuevos entornos, manipular, vengar o corregir un error. Cualquiera que sea su acción, lo importante es que tiene la capacidad de conducir la historia hacia adelante, que requiere una serie de beats el ejecutar la acción y que afecta al resultado de la historia.
Hay historias en las que el protagonista comienza como un personaje pasivo. La historia le sucede a él, que se ve empujado en una dirección determinada. En este caso, el personaje principal tiene que tomar el control en algún punto. En algún momento, y por supuesto antes de la mitad de la historia, el personaje necesita empezar a empujar. Ha de comenzar a hacerla progresar en lugar de estar a merced de ella.
Vida emocional / reacciones emocionales
A veces las emociones se dejan al margen de la historia. O se limitan a unas lágrimas, un enfado y poco más. Pero los personajes tienen una vida emocional que los define, del mismo modo que ocurre con sus actitudes. Una actitud cínica puede provocar desesperanza, depresión o abandono de la vida. Como consecuencia un personaje puede resultar hosco, sarcástico o estar permanentemente enfadado. Una actitud positiva puede manifestarse en un personaje que sonríe o se ríe mucho o está siempre optimista, accesible y servicial. O un personaje puede ser frío como resultado de emociones poco accesibles o ser de duro corazón, hostil o vengativo.
La vida emocional habitual define los personajes y sus reacciones emocionales ante estímulos concretos completan esta definición. Situaciones extraordinarias producen reacciones emocionales extraordinarias. Un personaje que normalmente está feliz puede encolerizarse ante una injusticia. Un personaje desesperado puede ser tocado por el amor y generar toda una serie de reacciones emocionales nuevas.
Al igual que muchas películas pasan por alto el momento en que el personaje decide realizar una acción, también pasan por alto el momento en que se muestra la reacción emocional a la acción. Las películas con frecuencia muestran acciones poderosas, de gran impacto, sin reflejar el efecto que éstas tienen sobre los personajes. Podemos ver a alguien asesinado pero no la reacción emocional del personaje que sufre por esa muerte, ni tampoco la de la persona que aprieta el gatillo. Y sin embargo es la reacción emocional lo que hace comprensible al personaje. Sus sentimientos atraen la simpatía o antipatía del público. Hacen posible la identificación con el personaje. Las emociones nos arrastran dentro de la historia: experimentamos los sentimientos del personaje a través de ellas.
La cadena multidimensional
Estos factores crean una secuencia multidimensional que ayuda a definir al personaje en cada uno de sus niveles. El modo de pensar provoca ciertas actitudes ante la vida y estas actitudes provocan decisiones que a su vez provocan acciones. Estas acciones se integran en de la vida emocional del personaje, que le predispone para hacer ciertas cosas y no hacer otras. Como resultado de la acción de otros personajes, el protagonista responde emocionalmente de un modo determinado.
En Tras el corazón verde, Joan Wilder tiene su propio sistema de ver las cosas. Ella cree en el amor y en lo romántico y cree que «hay alguien por ahí fuera que le espera». Es sociable y leal. Su actitud hacia su hermana le empuja a actuar cuando ésta necesita ayuda. Las acciones que realiza revelan sus emociones de enfado, paranoia, inseguridad, incertidumbre, deleite, miedo y asombro. Estas emociones y acciones producen a su vez una serie de reacciones en Jack Colton, y estas reacciones llevan a Joan a posteriores acciones y respuestas.
El personaje se construye cuando todo esto funciona a la vez. Llega a la historia adoptando ciertas actitudes, acciones y emociones; y deja la historia habiendo cambiado en cada uno de estos niveles. Estos cambios crean los pasos (beats) que producen el arco de transformación.
El arco de transformación
En las buenas películas, al menos uno de los personajes se transforma a medida que transcurre la historia. Normalmente, el personaje que se transforma es el protagonista. Rose y Allnutt en La Reina de África cambian; así como John Book y Raquel en Único testigo; y Luke Skywalker y Han Solo en La guerra de las galaxias. A veces el personaje principal permanece igual, siendo los personajes secundarios los que cambian. En Regreso al futuro, Marty es esencialmente la misma persona al principio que al final; pero sus padres —George y Lorraine McFly— se convierten en personas muy diferentes.
La transformación de un personaje puede ser extrema, moviéndose a una posición opuesta, o simplemente puede moverse hacia una posición moderada. Por ejemplo, un personaje rígido puede sufrir una transformación total, volviéndose espontáneo y alegre al final de la película; O puede, sencillamente, relajar su sentido de disciplina. Podríamos trazar un arco de transformación del siguiente modo:
POSICIÓN INICIAL
- George McFly, en Regreso al futuro, comienza siendo un lerdo, un cobarde, controlado por Biff.
- John Book, en Único testigo, es un personaje frenético, insensible, sin sentimiento.
- Rose, en La Reina de África es una mujer tensa, severa, solterona.
POSICIÓN MODERADA
- Si la transformación fuera sólo moderada, George ganaría confianza en sí mismo, pero no habrían cambiado los términos en cuanto a Bill.
- Con sentimientos, se preocupa por la gente, sigue siendo fuerte y heroico pero más tranquilo y sensible.
- Si Rose sólo hubiera alcanzado una posición moderada, seguiría siendo un poco severa, pero con momentos de espontaneidad.
POSICIÓN EXTREMA
- Se convierte en lo opuesto: seguro de sí mismo, fuerte, atractivo, activo, y Biff pasa a ser su empleado.
- Si la transformación fuera total, John se habría quedado en la granja amish.
- Espontánea, cariñosa, libre, abierta, casada.
Para que los personajes cambien necesitan ayuda. Reciben ésta de la influencia que ejerce sobre ellos la historia y otros personajes. A veces un personaje es el catalizador del cambio de otros personajes. En Regreso al futuro, Marty no necesita cambiar, pero sus padres sí. Marty mantiene la misma posición a lo largo de la historia, pero es el catalizador de la extraordinaria transformación de sus padres. En La guerra de las galaxias, la Princesa Leia sufre pocos cambios. Mantiene la misma posición, pero su influencia y su presencia crean transformaciones en Han Solo y en Luke Skywalker.
En otras historias, los dos protagonistas se transforman. En La Reina de África, Rose se vuelve espontánea y libre, y el bebedor de ginebra, Allnutt, se convierte en un tipo sobrio y sociable. Ambos dan un giro de 180o en su transformación. En Único testigo, Raquel aprende lo que es la pasión y el riesgo y John se vuelve más tranquilo y sensible. En Tras el corazón verde, el independiente Jack Colton aprende a comprometerse y la romántica Joan Wilder se vuelve más realista.
Lleva tiempo transformar un personaje. No sucede en unas pocas páginas. Normalmente, crear una transformación a lo opuesto necesita de los tres actos enteros. Es un proceso que se desarrolla paso a paso, lentamente. La transformación hay que construirla momento a momento. Cada momento muestra los cambios de diversos modos. Vemos las decisiones que toma un personaje y cómo esas decisiones cambian a lo largo de la historia. Vemos nuevas respuestas emocionales a una situación distinta. Y nuevas acciones que el personaje aprende a realizar porque la historia se lo pide y por la interacción de los otros personajes.
Para entender estas transformaciones, veamos los pasos que sufre Rose en La Reina de África. Podríamos resumirlos de la siguiente forma:
La actitud de Rose hacia Allnutt y la de éste hacia ella empieza así:
ROSE (indiferentemente): Buenos días, Sr. Allnutt.
ALLNUTT: Buenos días, señorita.
Por un momento, Allnutt mira a Rose con absoluta frialdad e indiferencia.
Podemos comprobar desde este punto inicial de la disposición de los personajes que no hay el menor atisbo de simpatía entre el maleducado Allnutt y la severa y pudorosa Rose.
Cuando muere el hermano de Rose y Allnutt vuelve para recogerles, la relación ya ha cambiado. Rose está agradecida por la llegada de Allnutt y por ayudarla a enterrar a su hermano.
ALLNUTT: Escuche una cosa… Mientras yo cavo la tumba, usted vaya recogiendo sus cosas, señorita. Entonces podremos largarnos de aquí.
ROSE: ¿Marcharnos?
ALLNUTT: Los alemanes pueden volver en cualquier momento.
ROSE: ¿Por qué? No han dejado nada.
ALLNUTT: Oh, ellos volverán, seguro. Buscando el «Reina de África».
ROSE: ¿Adónde podemos ir?
ALLNUTT: Estaba pensando, señorita, en cómo podríamos encontrar algún lugar tranquilo, a ser posible una isla. Allí ya hablaríamos de lo que podríamos hacer.
ROSE (una pausa, después una rápida decisión): Prepararé mis cosas. (…) Gracias, Sr. Allnutt.
ALLNUTT: Usted haría lo mismo por mí, señorita.
Mientras lo vuelve a pensar, Allnutt considera para sus adentros si realmente ella sería capaz de hacerlo.
El siguiente paso importante en el desarrollo de su relación tiene lugar la primera noche en el río. Rose está durmiendo bajo el toldo y Allnutt está al mando de la barca. Empieza a llover. Para no mojarse, Allnutt silenciosamente intenta cobijarse bajo el toldo, sin despertar a Rose. Pero ella se despierta, piensa lo peor y él retrocede. Justo entonces se produce el fogonazo de un relámpago y el estampido de un trueno. Rose se siente avergonzada y arrepentida cuando se da cuenta de la situación.
ROSE: Sr. Allnutt, debería ponerse aquí, al resguardo de la lluvia.
ALLNUTT: Siento haberle causado una mala impresión.
ROSE: No tiene importancia. Sr. Allnutt.
Él se da la vuelta y trata de acomodarse… Se acurruca en el espacio seco, haciendo lo posible por no tocarla, pero procurando no mojarse. Apoyada en un codo, ella le mira con una extraña, fría y virginal ternura. Gotas de lluvia salpican su cara dormida. Con cortesía, pero sin especial cariño, como si se tratara de una fea muñeca, ella le cubre con una esquina de su manta, para protegerlo.
A medida que van descendiendo por el río, Allnutt se da cuenta de que Rose habla en serio de torpedear el «Louisa». Cuando se emborracha, la llama «loca cantora de salmos y vieja solterona», con lo que sólo consigue reforzarla en su decisión. A la mañana siguiente, Rose vacía todas las botellas de alcohol de Allnutt. Rose está indignada… y Allnutt intenta que cambie de humor. Se afeita e inicia una conversación trivial, pero hasta que no accede al plan de torpedear el «Louisa» ella no rompe su silencio y vuelve a mostrarse amable con él.
En este paso (beat) ambos han tenido una discusión importante y la han superado; su relación ha cambiado otra vez. Ahora están de acuerdo, listos para llevar a cabo su misión.
En el final del Primer Acto, tanto Rose como Allnutt, han recorrido ya parte de su transformación. Se han pedido perdón, se han ayudado y la excitación de la aventura está empezando a dar vida a Rose.
A lo largo del Segundo Acto, podemos ver una serie de beats que nos muestran los cambios en su relación: la primera vez que se besan, la primera vez que Rose llama a Allnutt «querido», las aventuras y preocupaciones que comparten.
Después de que consiguen pasar Shona y están a salvo de los rápidos, Allnutt y Rose lo celebran. Se produce otro punto de giro en su relación:
ALLNUTT: ¡Lo conseguimos! ¡Lo conseguimos!
ROSE: ¡Hip, hip, hurra!
ALLNUTT: Ah, esta vez sí que les engañamos, ¿verdad, señorita? No creía que nadie pudiera conseguirlo. Bien, ¡se lo hemos demostrado!
ROSE: ¡Hip, hip, hurra!
Charlie la besa. Se produce un silencio embarazoso.
ROSE: ¿He conducido bien la barca?
ALLNUTT: ¡Si, mejor que bien, señorita. Bueno, nos estamos quedando sin combustible. Mejor será que repostemos en alguna parte.
Sus planes continúan hasta que quedan atascados en el lodazal y parece que todo ha acabado para ellos.
ALLNUTT: Quieres saber la verdad, ¿no?
ROSE: Así es.
ALLNUTT: Así es.
ROSE: Aunque tuviéramos todas nuestras fuerzas, nunca podríamos salir de este barro.
ALLNUTT: No existe ninguna oportunidad.
Él pone una mano en su mejilla. Lentamente ella se da cuenta y se arregla un poco: su única preocupación antes de morir.
ALLNUTT: No creo que exista nadie mejor que tú.
Y al final de la historia, cuando están a punto de ser ejecutados por los alemanes, se produce la transformación total.
ROSE: ¿Podrían colgarnos juntos, por favor?
ALLNUTT: Un momento, Capitán. ¿Nos concedería un último deseo?
CAPITÁN: ¿Qué?
ALLNUTT: Queremos casarnos. Los capitanes de barco pueden hacerlo, ¿verdad?
CAPITÁN: Sí.
ROSE: ¡Charlie! ¡Qué idea tan maravillosa!
CAPITÁN: ¿Qué locura es ésta?
ALLNUTT: Vamos, Capitán. Sólo será un minuto. Y significa mucho para la señorita.
CAPITÁN: Muy bien, si es su deseo, no tengo inconveniente.
Y los casa.
CAPITÁN: Os declaro marido y mujer… Procedamos a la ejecución.
En ese momento, la cubierta se levanta. Se produce un golpe de aire y un espantoso rugido.
ALLNUTT: ¿Qué ha pasado?
ROSE: ¡Lo hemos logrado, Charlie, lo hemos logrado!
ALLNUTT: Pero, ¿cómo?
Rose señala un trozo de madera flotando, con las palabras «Reina de África».
ALLNUTT: Bueno, ya lo ves… ¿Se encuentra bien, Sra. Allnutt?
ROSE: Maravillosamente. ¿Y usted Sr. Allnutt?
ALLNUTT: Muy bien para un viejo casado.
ROSE: Estoy totalmente perdida, Charlie. ¿Hacia dónde está la costa sur…?
ALLNUTT: Hacia donde estamos nadando, querida niña.
Nótese cómo La Reina de África se toma su tiempo con los beats de la transformación. Nada sucede demasiado de prisa. Los cambios ocurren a medida que cada personaje afronta los rigores de la situación, sus intenciones chocan, se unen y descubren la necesidad que tiene uno del otro para conseguir su meta. Cada personaje recibe la influencia del otro y responde a través de nuevas acciones y nuevas emociones. No son las mismas personas al principio de la historia que las que resultan transformadas al final.
La Reina de África es un ejemplo excelente de historia que influye en el personaje y de personaje que influye en la historia. Es clara, consistente y realista. Como resultado, nos sentimos involucrados en los cambios que se dan paso a paso en Rose y Allnutt.
Problemas al crear el personaje tridimensional
Hace tiempo trabajé con un guionista que había escrito una de las películas de mayor éxito en 1985. En esta ocasión estaba trabajando en otro guión, que era complejo y difícil. Requería una protagonista femenina que estaba descrita como «Una rubia guapa de piernas largas». Al trabajar en el guión estaba claro que había creado un estereotipo sin el volumen ni la originalidad de sus personajes masculinos. Esto me sorprendió, ya que sabía que era un escritor excelente, y un hombre liberal, felizmente casado y con una mujer que ha logrado triunfar en su trabajo.
Cuando llegó a la reunión, antes de que tuviera oportunidad de hablarle de su protagonista femenina, empezó a reconocer su frustración con el personaje. Simplemente, no conseguía un buen personaje. Me pidió que no creyera que él era «ese tipo de hombre» que se considera superior a la mujer. Insistió en que veía a la mujer con la mayor dignidad, que quería a su esposa y que algunas de sus mejores amistades eran mujeres. Sin embargo, no conseguía dar vida a este personaje y aseguraba que era capaz de escribir personajes mucho mejores.
Cuando empezamos a trabajar con el dichoso tipo femenino le dije que se había metido en un callejón sin salida con su descripción. Una vez descrita físicamente de forma estereotipada no había manera de que este personaje pudiera librarse de ello.
Sugerí que empezáramos cambiando la descripción. En vez de describirla por su belleza tratamos de aproximarnos a ella de la misma forma que él se aproximó a los personajes masculinos. Les describía por cómo iban vestidos, por su integridad (o por la falta de ella), por sus actitudes y las miradas de desesperación o esperanza en sus caras. Una vez que él encontró una descripción más realista de la mujer, el personaje se hizo más natural.
Crear personajes tridimensionales no es fácil. Hay muchas trampas y escollos que debe sortear el escritor. A veces se cae en la tentación de fijarse en otras películas, en vez de tomar la vida como fuente para los personajes. He leído más de un guión que describe un personaje como «tipo Harrison Ford en Único testigo» o «tipo James Bond de Roger Moore».
Crear personajes con volumen requiere observación de la vida real. Los buenos escritores parecen estar fijándose constantemente en pequeños detalles y rasgos de personajes y recogiendo datos vitales para cada tipo. Intentan ir más allá de los estereotipos y aplican su propio conocimiento de la gente. Sienten respeto por sus personajes y les dan libertad para desarrollar una amplia gama de pensamientos, acciones y emociones.
Aplicaciones
Cuando rehacemos un personaje es útil a menudo comenzar con el arco de transformación. Comienza descubriendo los rasgos y características principales que necesita tu protagonista para alcanzar su objetivo. Por ejemplo, Rose, en La Reina de África, necesitará adquirir espontaneidad, habilidad, valor, determinación y amor para ser la mujer que resulta al final de la historia. Ahora mira dónde empieza tu personaje. Decide qué característica tendrá al principio de la historia y cuáles necesitará adquirir a medida que ésta transcurra.
Piensa en cómo logrará el personaje esos cambios. ¿Qué va a exigir la historia? ¿Cómo ayudarán los demás personajes a tu protagonista para que pueda alcanzar su meta?
Pregúntate a ti mismo: ¿Se advierte en la historia el modo de pensar del personaje? ¿Está expresado por acciones más que por palabras? ¿Vemos claramente sus actitudes? ¿Sabemos lo que piensa de los otros personajes y de la situación? ¿Le llevan estas actitudes a realizar acciones concretas?
Si quieres provocar la simpatía hacia tu personaje revisa las reacciones emocionales y los modos de mostramos su situación emocional. Trata de ampliar la gama de sus emociones. Algunos psicólogos agrupan las emociones en las categorías de locura, tristeza, alegría y miedo. Dentro de ellas incluyen emociones como ira, malhumor, frustración o irritación, sentirse encantado, extasiado o alegre, quedarse paralizado de terror o tener una subida de adrenalina a causa del peligro de la situación. Encuentra modos de llevar las emociones de tu personaje más allá de los habituales miedos, furia o pasión.
Observa tes acciones de tus personajes. ¿Juegan un papel activo o pasivo en la historia? ¿La hacen progresar, a la vez que los definen como personajes? A algunos tipos les gusta modelar arcilla; a otros tejer, leer o coleccionar pequeños objetos. Algunos tienen hábitos nerviosos. Otros tienen manías tales como arreglar todo lo que entra en contacto con ellos: quitar el polvo, sacar brillo a los picaportes o timarse las uñas. Todos estos detalles ayudan a desarrollar y revelar al personaje, siempre que se centren en acciones que hagan avanzar la historia.
Al revisar las distintas dimensiones y transformaciones de tu guión pregúntate:
¿Me he quedado estancado en un estereotipo? ¿He definido ciertos personajes a través de una única dimensión, en vez de crear personajes tridimensionales?
¿Cuál es el arco de transformación de mi personaje? ¿Le he dado suficiente tiempo para cambiar? ¿Resulta creíble el cambio?
¿Qué influencias reciben mis personajes que puedan hacerles cambiar? ¿Hay algún personaje catalizador? ¿Hay alguna relación amorosa?
¿Fuerza la historia algún cambio en mi personaje?
¿Vemos claramente, por medio de imágenes y acción, cómo la influencia de la historia y de los otros personajes provocan la transformación? ¿Me ayuda ésta a expresar tanto el lema como la historia?
Prestar atención a la multidimensionalidad y transformación te ayudará a crear personajes que el público no olvidará; y al insistir en estos elementos mejorarás también la identificación y la viabilidad comercial.