En un hotel de Atenas
En agosto fuimos a Atenas, en Grecia, por 10 días, todo el año habíamos pensado en estas vacaciones. Nos alojamos en un hotel de cuatro estrellas, allí había 4 turistas negros y a la hora de cenar siempre nos miraban fijo, se sentaban cerca y se reían mirándonos.
Una noche ellos estaban muy alborotados y reían mucho, en su mesa había muchas botellas de un vino llamado retsina, los 4 nos hacían gestos con la mano y se reían, pero nosotras no les hacíamos caso. Al terminar de cenar, subimos a nuestra habitación y ellos subieron detrás, por las escaleras, pero pensamos que ellos iban a su habitación.
Cuando estábamos por entrar en la nuestra, vinieron por detrás y nos empujaron dentro, uno sujetó a mi amiga por detrás y otro a mi, mientras otro de ellos cerró nuestro cuarto con llave, comenzamos a gritar para que alguien nos pudiera ayudar, pero los que nos sujetaban nos taparon la boca.
Nos arrastraron violentamente a nuestras camas, y tenían todo previsto, porque traían unas cintas gordas y 2 servilletas grandes del restaurante en su bolsillos, nos ataron a la cama, nos taparon la boca con las servilletas, y trataron de quitarnos las bragas, pero empezamos a dabar patadas, finalmente lograron sujetarnos las piernas y nos despojaron de las bragas y nos desnudaron por completo. Estaban muy borrachos, nos violaron uno tras de otro, nos hablaban en francés, eran seguramente de un país africano de habla francesa, eran muy bruscos, también nos obligaban al sexo oral, nos quitaban la servilleta y metían rápido su penis salvajemente en nuestra boca, eran asquerosos y sucios.
Lo pasamos muy mal, toda la noche abusaron de nosotras y aunque llorábamos y queríamos gritar, las servilletas en la boca no nos dejaban, fue horrible, parecía que no tenía fin. Al día siguiente le contamos al concierge del hotel, pero él no entendía bien lo que decíamos o no quería entender, luego fuimos a la comisaría de plaka, (este era el nombre en athenas) los policías no entendían francés y tampoco español ni inglés, todo el tiempo hablaban griego y nos sonreían, no entendieron o tampoco les interesaba entender. Nunca tomaron ninguna acción ni trataron de hacer nada, los negros después desaparecieron, nadie los arrestó por sus agresiones, a nadie les interesó su crimen. Nosotras nos fuimos de Atenas, para no volver nunca más.