45. Redonda como la bola

me mantengo por la cola,

tantos hijos como tengo,

a todos les doy corona,

y a mi amo pesadumbre

cuando me caigo en el suelo.

 

46. Príncipe fuí sin ser noble

de un Estado muy pequeño,

me concedieron poder

de predicar sin ser clérigo;

mi nombre lleva una silla,

donde me senté el primero.

 

47. ¿Quién es el ser infeliz

que hasta la gloria llegó,

y por querer subir más

para siempre se perdió?

 

48. ¿Qué cosa tiene el molino

precisa y no necesaria,

que no molerá sin ella,

y no le sirve de nada?

 

49. Más alta que Dios subí,

y en el cielo y en la tierra,

nadie se encuentra sin mí.

 

50. Soy clara y espero yema.