… hay una oscuridad. Es para todos… Sólo algunos griegos y admiradores de lo suyo, en su líquido apogeo, donde la amistad de la belleza por las cosas humanas era perfecta, creyeron estar claramente apartados de esta oscuridad. Y esos griegos también estaban en ella. Pero aun así son la admiración del resto de la humanidad, toda aflicción y cartílago, salpicada de lodo, acuchillada por el hambre, pateando las calles, maltratada por la guerra, difícil, afanosa, golpeada en el vientre, la multitud, unos bajo un Vesubio de humo caótico que mama carbón, otros sumidos en una palpitante noche de Calcuta, quienes saben muy bien dónde están.

SAÚL BELLOW

Bueno, esto es el Infierno, y yo no estoy fuera de él.

CHRISTOPHER MARLOWE