Capítulo 4

LA VERDADERA BEATRIZ

LOS ojos de Beatriz se hicieron rojos, su mirada emitía mal por donde sea que la mirara, sus uñas crecieron increíblemente, no ya no eran uñas, eran garras, se desplegaron alas desde su espalda, terror, la ropa que tenía puesta se desprendió de cómo si fuera un envoltorio, su piel se pintó de figuras extrañas, las líneas rodeaban su busto paseaban por su cuello, rodeaban a su cintura, eran marcas de una cazadora mortal, los reflejos de Bastian le ayudaron boto su silla, su respiración se calmó por un segundo, el mundo estaba paralizado, dio un gran giro seguido de una rápida salida de su cuarto, estaba en estado de shock, sabía que él no era humano pero que alguien tan cercano fuera un ser tan surreal era difícil de imaginar, pero el tiempo de escape era limitado. —Qué demonios puedo hacer, no quiero hacerle daño es mi amiga pero dudo que ella piense de esta manera, no es un vampiro su descripción no encaja ¿Qué demonios eres Beatriz?— pensaba el muchacho en evidente peligro.

—Al patio si la atraigo seguro la encerrare en lo que sea que puso Altair, ahí aunque no sé qué hizo intentare traer a Shadow para que la detenga usare el nivel 5 supongo podré detenerla de esta manera— planeaba para preservar su seguridad pero también pensando en lo que sea que fuere su amiga. Ella salió disparada de la habitación, sus alas eran enormes parecida a las de un murciélago, planeaba en forma horizontal directamente hacia Bastian, él se agacho rápidamente, él tampoco era un debilucho indefenso, pero esquivar no era una opción si tenía que detenerla, intento llamar su atención para que ingresara en el rango suficiente para activar a Shadow esperando que le atacase, logro atraerla era muy sencillo, él era su único blanco, sonó un golpe estruendoso salió Shadow en forma de ninfa pero esta vez su color era todo oscura hasta su ropa lo era, ella consiguió de alguna manera activar el campo de energía atrapar a que cubría el patio de Bastian, Shadow era muy ágil consiguió

Beatriz y salir del rango del campo de energía definitivamente Shadow era algo más que un aparato de entrenamiento, entonces Shadow hablo mirando directamente a Bastian. —Que ha ocurrido chico como has podido traer a un súcubo a tu casa estás loco o que— dijo —No sabía que mi amiga podría ser eso, de hecho no sabía que tú podrías hablar por cuenta propia explica eso-decía Bastian. —Está bien Bastian yo soy Shadow y esta es mi verdadera forma disculpa si no te lo dijo Altair pero no sabía que ibas a pensar si es que sabias que yo era tu protectora pensó que te enojarías si te dejaba a mi protección-respondió Shadow. Ella pronuncio: sello de protección nivel 2 actívate; de repente el campo se hizo visible, su color totalmente cúbica, se golpeando la barrera pero no pudo por el contrario se hizo daño, el campo de energía repelía todo lo que se le acercara pero Bastian tomo la calma estos hechos parecían ya tomarse a la ligera por parte suya, total su perro era un hombre lobo disfrazado; se acercó lentamente a una parte del campo, lo toco pero nada, al parecer podrías dañarte solo estando dentro del cubo pero por fuera era firme pero no causaba daños indirectos por intentar tocarlo entonces. — Bastian perdóname, ha sido mi culpa no quiero hacerte daño, ha sido instinto, te pido me perdones, te juro no lo volveré hacer, pero si intento darle sentido tu tampoco eres humanos, hay algo en ti que he podido sentir, un poder sobrenatural, y obviamente este campo energético lo demuestra— decía Beatriz.

Para luego volver a su forma normal, estaba totalmente desnuda lo que puso a Bastian muy rojo cuando la miro de reojo, pero cogió una toalla para cubrirse su cuerpo ahora vuelto a la normalidad. —No lo sé amiga, lo que sentiste tal vez te descontrolaste porque yo soy un hombre lobo, aunque recién lo he descubierto, pero tu desde cuando puedes hacer eso, no me lo imaginaba que tú serias como yo — exclamaba con intriga pero entusiasmo por descubrir que no era el único con capacidades excepcionales. —Veras no somos tan parecidos nuestras habilidades son totalmente diferentes, yo soy un súcubo, me alimento de la energía vital de los seres humanos, soy como un vampiro pero la diferencia es que no necesito su sangre, nuestras victimas disfrutan de nuestra compañía, pero no todo es bueno para ellos, si por alguna razón no relacionamos profundamente, la persona será nuestro esclavo por el resto de su vida— decía Beatriz con recelo.

—Interesante pero si te alimentas de humanos porqué yo llame tu atención— pregunto Bastian. —Muy sencillo amigo tu poder no es comparable con el de un humano corriente, si me alimentara de ti solo un poco bastaría para saciar mi sed por un mes— charlaban hombre lobo y súcubo hasta que Shadow interrumpió. —Ya veo tu eres nueva, sin experiencia, todavía no has tenido relaciones con ningunas de tus víctimas no Beatriz— pregunto Shadow. era un amarillo trasparente, el área que cubría era podía ver claramente a Beatriz, ella intento escapar —Mmm....., esto es muy personal no quiero responder tus preguntas, además que eres tú— decía Beatriz con inseguridad. —Ya veo es cierto, no necesitas decírmelo, pues para que lo sepas yo soy la única ninfa capaz de tomar la forma de los soldados y hasta del mismo vampiro Cecil— se presentaba Shadow. — ¿Cecil? ese ser despreciable, ojala Bastian tu gente acabe con él-decía Beatriz —No lo creo, Altair no me dijo mucho sobre eso, no pensé que cualquiera supiera lo que ocurría con nosotros, no llevo ni una semana pero esto va llevar tiempo asimilar— decía el muchacho con algo de confusión en su rostro. Bastian tenía que tomar una decisión creer que Beatriz no le dañaría o dejarla dentro en un lugar seguro para los dos, pero Bastian era buena persona tota l ella podía controlar sus poderes si se mantiene calmada así que le dijo a Shadow. —Libérala no podrá hacerme daño si ella intenta algo dejare que la ataques sin interponerme— dijo casi a manera de orden no podía tratar a un ser de esta manera sin importar su protección, tenía que comprender la situación de su amiga. —Lo haremos a tu modo supongo espera que lo desactive-respondía Shadow Todos pasaron a la sala de la casa se sentaron Bastian quería despejar todas sus dudas, pero sin incomodar a cualquiera de las chicas así que comenzó preguntando a Shadow —De dónde vienes, porque acompañaste a Altair— pregunto intrigado Bastian. —Tienes poco tino no muchacho, pero te lo diré, yo fui creada por Cecil era uno de sus experimentos pero afortunadamente en una de las interminables batallas que tuvo tu gente, Altair logro entrar al castillo de Cecil para luego encontrarme, me libero pero yo no conocía nada todo lo que sabía había sido creada para confundir a los enemigos, era un nuevo tipo de soldado para él, mi único propósito era acabar con los enemigos de Cecil— narraba Su historia Shadow. —Entiendo así que él te dio un hogar por que se apiado de ti, pero como es que vives en ese caja no creo que tengas espacio suficiente a no ser que tenga algo en especial podrías explicar eso-agregaba Bastian. —Claro, obvio que si esa caja no tuviera algo especial no podría estar ahí, Altair le puso un sello a esa caja, solo yo puedo ingresar en esa caja ahí tengo mucho espacio para mí, además yo solo necesito agua para vivir, todas las ninfas viven en los bosques a salvo —contaba Shadow. —Me ha ayudado tu respuesta creo que has despejado mis dudas por el momento, ahora quiero saber que tanto control tienes Beatriz de tus poderes— volvió a preguntar esta vez dirigiéndose a Beatriz. — Presentía que dirías algo así, normalmente, durante el día me controlo totalmente pero durante la noche no puedo evitar transfórmame menos si hay alguien con tanta energía vital me es muy difícil evitar no querer algo de su poder total no hubieras resultado herido si no hubieras intentado escapar aunque si te hubiera hecho mi esclavo— decía Beatriz para luego acercarse a Bastian para abrazarlo tiernamente y pedirle perdón por todo lo sucedido él acepto, aunque con un poco de recelo, podía confiar en Shadow ella lo había defendido pero por el otro lado su amiga no era mala pero no podía evitar atacarlo, si ella no se mantenía calmada. La charla era muy calmada de hecho parecía que Bastian se estaba acostumbrando a su nuevo estilo de vida, pero luego se retrajo un poco dejando a las muchachas conversar para que se conocieran mejor, al parecer Shadow no tenía muy buenas impresiones de las súcubos pero eso no era un asunto que tomara mucho importancia en el momento; lo cierto era que ver a su amiga convertida en un ser que carecía casi en su totalidad la personalidad de su amiga, solo parte de su aspecto físico se conservó. —Sí eso le sucedió a mi mejor amiga no se me ocurre que me pueda pasar a mí, yo no conservare nada de mi forma humana pero y mi conciencia ¿Quién mandara en mi cuerpo, mis instintos?— era las dudas que no dejaban tranquilo al joven que sin poder escoger había nacido con habilidades extraordinarias. Su mente volvía a su cuerpo después de una charla poco esclarecida entre él y sus pensamientos pero la idea no abandonaba su cabeza cual sería el resultado de volverse el lobo; las chicas continuaban charlando, buscando conocerse, pero se percataron de que Bastian había dejado de intervenir en la conversación por un largo rato. —Te pasa algo, en que estás pensandopreguntaban las chicas al ver tan pensativo a su amigo. —Nada solo pensaba en que estaría haciendo Altair espero este con mi padrerespondía para no angustiarlas por su idea pues creía, si alguien sabía que ocurre cuando se es un hombre lobo seguramente lo sabría Altair después de todo él había experimentado muchas veces la transformación. —Ha sido muy liberador conocer que un compañero de la universidad sea parecido a mí— decía Beatriz con su voz dulce de siempre en vez de emitir algún sonido como de murciélago. —Estaremos agraciados de recibir tu visita cuando Bastian continúe su entrenamiento— decía Shadow con una sonrisa en su rostro. —Claro estaré esperando tu llamado Bastian será un gusto ayudarte gracias Shadow por la invitación— respondía. La petición de Shadow le pareció extraña, pero sí tendría cerca a su amiga aliviaba la carga de dominar algo que nunca conoció en su vida. —Claro amiga espero me puedas enseñar algo sin morderme— decía él a modo gracia con el fin de aliviar la charla. —No te preocupes no volveré a intentar morderme— decía Beatriz algo preocupada. —Pero me tengo que ir muchas gracias por todo el recibimiento volveré cuando me lo pidan— exclamaba para luego levantarse y retirarse. —Espera amiga te acompañare a tomar un taxi-decía Bastian con actitud caballerosa. —No creo que sea necesario no pienso tomar un taxi saldré por tu patio espero no te incomode-aclaraba Beatriz. —No creo que lo haga es mejor así me hago a la idea de que sea una súcubo además te vez muy sexy en esa forma— expresaba Bastian. Aunque era cierto que se veía muy tentadora en su metamorfosis también era verídico que trasmitía temor a cualquiera que la viese de esa forma. Las cosas nunca fueron más densas para Bastian no podía distinguir lo correcto, real, solo confusión en su cabeza, si Altair era en quien debía confiar entonces por qué le oculto a Shadow; pero todo valía la pena, después de mucho tiempo vería a su padre, poco le importaba los secretos, lo importante bloqueaba el resto, si su padre estaba vivo haría lo que fuese, lo inverisímil no era obstáculo.

Capítulo 5 NUEVO DESPERTAR

Fresca era la mañana, una sonrisa pintada en la cara de Bastian hacia parecer los hechos ocurridos algo livianos, aunque él sabía que esto recién empezaba tenía que disfrutar los momentos, se alisto con mucho esmero, el desayuno sabia mejor que nunca, estaba físicamente preparado para lo que sea al menos su aspecto sostenía esta teoría. —Shadow donde estas quiero comenzar a entrenar— anunciaba con una vigorosa exclamación. El patio se ilumino, la caja o casa de Shadow emanaba un brillo, era radiante al igual que la figura que aparecía casi como de la nada, si Shadow estaba en el campo de batalla muchos hombres, bestias, lo que fuere caería ante tremenda figura. La guerrera estaba lista, pero tenía expresión de sorpresa.

—Creo que deberías estar descansando niño descansa no tienes por qué entrenar— decía Shadow. —No, tengo ganas de aprender a usar mis poderes antes de ser un lobo— decía con mucha seguridad Bastian.

Shadow se tomó un momento para pensarlo. —Si así lo deseas podemos hacer un calentamiento interesante; por cada vez que me venzas te responderé una pregunta sobre los hombres lobos-afirmaba Shadow para motivar a Bastian. —Genial prepárate para caer transfórmate Shadow-decía Bastian.

Así lo hizo, tomo la forma del ogro el nivel más bajo era ideal para empezar. —Espero estés listo voy a por ti— decía ella para iniciar la contienda. Todo las fuerzas eran mínimas para los espíritus con amor a la batalla, corazón más que la pasión son necesarios no hay rendición solo frenesí y descanso, cada golpe era un vaso de champaña embriaga pero no lo suficiente. Bastian era ágil, aunque no tanto como la rival, pareciera que en forma de ogro sus movimientos no cambiaran, el escudo y espada eran pesadas a simple vista pero aparentemente para ella era como cargar plumas, golpe tras golpe el siguiente con más fuerza que el anterior —No creo que pueda hacer lo mismo, pero no encuentro patrón en sus movimientos— pensaba él calculando que hacer —Solo piensas esquivar, si no puedes atacar no te diré nada de lo que pasara en tu cumpleaños— vociferaba para darle aliento a Bastian, él pudo darse cuenta de algo pequeño pero vital, a pesar de no tener movimientos rítmicos, se fijó que como máximo Shadow atacaba cinco veces y se defendía solo 2 veces. —Ella asimila la forma más no la actitud de lo que copia— supongo que un ogro atacaría sin más, de hecho así le cortara un brazo el no pararía, lo tengo— seguía con una charla consigo mismo para hallar la respuesta a su enfrentamiento. Seres vagos, oscuros, llenos de odio en su ser; difíciles de ver pero nadie los quiere hallar, si los encuentras mejor macharte o será lo último que hagas, solo desprecio hay en su corazón pues son una raza de malditos, resignados a ser despreciados, escondidos por ser diferentes, alejados por agresivos sin esperanza. Hijos bastardos de los dioses su única esperanza recae en el poder y la venganza de quienes los humillen. Primer golpe certero cae en el brazo derecho de Bastian

—El segundo lo esquivare tendré que rodar— seguía sin estrategia aparente más que en convertirse en saco de arena. Dos golpes en el abdomen casi todo está finiquitado unos cuantos golpes y todo lo que iba a descubrir se quedaría en los labios cerrados de Shadow.

Lo que era tenía que ser. Un golpe de parte de Bastian al parecer las posibilidades se le había acabado. — No, no debo mantener el control no parecía obvio pero parece que no se ha dado cuenta— pensaba mientras la defensa cerrada impedía que sus golpes fueran efectivos, todo comenzó a hacerse lento los agiles y sutiles movimientos de los cuerpos en batalla denotaban gracia pero una espiritualidad abstracta impecable, cada vez más lento parecía, mucho más adrenalina soltaba su organismo.

La esencia del movimiento provocaba explosiones en sus corazones —Todo desencadena un hecho —pronuncio para que luego el cuerpo de Shadow cayera perdiendo su forma espantosa y se trasformara en la bella mujer que era — Ahora supongo he de preguntar ¿un hombre lobo escoge su transformación o solo lo hace en luna llena?-pregunta el victorioso —Muy buena idea, limitar mi flujo de ataque a tan solo dos posibilidades: ataque o defensa; brillante tan como lo idearía alguien como tú, un guerrero por naturaleza— Bastian ayudo a levantar a Shadow, sin importar el resultado él era un caballero antes que un peleador

—Si pero también pudiste atacar y yo hubiera salido lastimado pero como tenías una espada tu radio necesita un poco de espacio pero tu escudo no así que sabía que escogerías— pronunciaba con una elocuencia de batalla desconocida incluso para él. — No creo tener tanto conocimiento sobre lo que he dicho— pensaba algo angustiado.

Se tomó unos cuantos segundos para luego platicar. — Eres increíble muchacho no puedo creer hayas conseguido tanto en tampoco tiempo parece que tienes mucho potencial — Al grano Shadow quiero la respuesta a mi pregunta— pronuncio casi sin inmutarse. —Estas impaciente, pero tu respuesta es sencilla; podrás transformarte cuando quieras incluso de día pero tan solo no abuses de tu poder— respondía para poner fin a su duda— Ahora vamos transformarte en nivel dos todavía estoy fresco para continuar dándote una paliza— decía él con mucha seguridad en su voz— estas ansioso pero desde luego esta vez seré más ruda de lo que esperas. Esta vez Shadow tomo una forma total mente distinta —Voy a ser un ogro procura no sorprende demasiado empezare a atacar inmediatamentedecía para intimidar, pero de repente tomo la talla de un gigante de dos metros y poco más no estaba más decir que su fuerza era superior a la de un orco, sus rostro era intimidante con nariz achatada, ojos vacíos carentes de iris; solo una pupila vacía, colmillos, orejas puntiagudas, piel de un tono verde oscuro con un sutil marrón aunque era lo único sutil de eso, un fétido olor, con cadenas en su cuerpo y un mazo simple de batalla lo convertían en el ser más abominable visto por Bastian. — Eso sí que está bien feo pero sobre todo debe ser poder bruto aunque dudo ella ataque con un patrón como antes— pensaba para luego decir-No creo que sea sencillo derrotarte pero pensé que atacarías sin avisar. —Que poco experimentado eres muchacho, si eres un niño fingiendo saberlo todo, ya has caído en la trampa del ogro; pensabas que solo con fuerza se gana— exclama Shadow dejando perplejo al joven intenta indagar qué había ocurrido hace unos instantes. De repente un peso abominable ocupaba el cuerpo de él— ¡cuando!, un momento, no puede ser cierto sus cadenas donde están— pronto se sentía tan pensado que se puso desvaneció hasta llegar al piso —No era cierto que me ibas a derrotar, eres muy confiado pero es por tu inexperiencia, pero ya sabes no te confíes— declamaba la maestra para poner en su lugar al “niño” carente de maestría en la batalla — No creo que esto termine tan pronto es imposible todavía puedo moverme esto no ha acabado — dichas estas palabras ella arremetió con un terrible golpe en el rostro de Bastian con tanta fuerza que hacía dudar sobre si esto era un entrenamiento o un castigo. La guerrera dio una vuelta inexplicablemente, para luego hacer referencia a su pasado —Crees que lo que has heredado te liberara de la atadura de una vida real o que... Todo lo que has imaginado, un lugar donde harás lo que quieras, estas equivocado, crees que yo desee esto para mí, yo ya era un ser mágico no pedí convertirme en esto— decía para luego ser acercarse Bastian — Soy un insensible no pregunte tu historia solo me he limitado a ver el lado malo de tener poderes puedes decir lo que quieras pero por favor deshaz la metamorfosis. —Es cierto me veo horrible en esta manera— manifestaba para luego volver a su forma normal. Se tomó un tiempo para luego comenzar su relato. —Todo comenzó con el ascenso al poder de Cecil, el vampiro al que temen los vampiros; muerto Drácula hacía más de 500 años, los descendientes se pelaban por el mando de sus pares, pero el menos codicioso propuso poner en división entre los cinco hijos del poderoso; y así lo hicieron-decía Shadow — Perdona la interrupción pero la historia de Cecil como se cruzó contigo — articulaba el muchacho intrigado — Muchos años, es más siglos después fue cuando nos vimos las caras, él había amasado un ejército enorme no solo de vampiros, sino de seres extraños nunca conocidos, criaturas hechas por el mismo; manipulo sus genes, destruyó su esencia. Pero su frio corazón le hizo pedir más, su maldita mente maquinaba un experimento aun terrorífico, distraer al enemigo para luego emboscarlo con la misma criatura— narraba para luego escuchar — Así que te tomo a ti para volverte en un arma. — Si pero no solo a mí, cientos de mis semejantes, todas iban muriendo, por que algo no funcionaba, su cuerpo no soportaban, solo yo: maldita mi suerte. Pude convertirme en lo que el necesitara orco, ogro, drow o incluso él mismo. La verdad triste, pero verdad es. De repente algo en el corazón de Bastian lo hacía callar, en verdad él conocía poco sobre mundo que lo rodeaba— todo es extraño el ser más fuerte no te libera, la responsabilidad, nunca deja de existir ni siquiera si eres sobrehumano — se preguntaba. —Ahora vamos a seguir o no pequeño — decía en tono burlón para aplacar el momento. —A qué esperas ahora te enseñare que no soy ningún pequeño — respondía el caballero y guerrero. Tomo devuelta la forma de ese ser increíble y apestoso — No solo fuerza recuérdalo— anunciaba para recordar el primer instante del anterior encuentro —Lo tendré en cuenta— era la respuesta de Bastian. Todo es un torbellino vuelto agua, hecho fuego; no hay lugar donde escapar pero tampoco se gana huyendo. La realidad ¿Existe? o a que nos referimos con ese término, amo y señor de lo que conocemos ¿Quién es?, no hay respuestas porque tampoco hay quien lo investigue, ¡solo existo y ya! Para que más. — ¿Qué hago?, evidentemente esta vez no ha lanzado su ataque pero, cuando lo hará o solo fue una ilusión, no lo entiendo y si pregunto no obtendré respuesta seguramente. —Solo vas a quedarte mirando, pensé que lucharías a que esperas enano— decía Shadow— Creo que estoy pensando en algo, maldición debí leer más del libro necesito el “mounstrario”, tal vez debe haber algo para activar sus poderes— más preguntas sin respuestas. Primer ataque, tal vez el ultimo — duele... — salía casi fuera de combate tras un golpe propiciado por el duro mazo del ogro — Bastian no piensas levantarte— manifestaba la triunfante. Pero para su sorpresa el joven todavía tenía aguante aunque se sentía como muy adolorido — eso fue innecesario no crees mujer— exponía pero sin acierto el debilitado Bastian. —Vamos no seas llorón, no creo que alguien interrumpiera tu lucha solo porque te quejas-decía Shadow — Buen punto pero tampoco es para tanto, vamos paralízame como antes. —Ya rugiste león— contestaba la increíble ogra por así decirlo, pronto adopto una posición diferente a la que tenía, intento mirar fijamente a Bastian pero él se lo impedía moviéndose entre sus piernas para luego mantenerse fuera de su rango. —Así que eres lenta, pero no tan solo eso, ya descubrí tu poder, los ogros necesitan adoptar la posición del enemigo para luego paralizarlos, es todo tan obvio contigo — exclamaba airoso. Lo siguiente fue sonido sordo que se transformó en un ruido estruendos llenando toda la casa pero sin salir de ella, el imponente ser había caído a manos del animal, no hay golpes fuertes, solo golpes, si insistes logras, pero antes de eso piensa, no hay victoria para los tontos y presumidos. —Ahora mi pregunta no, si se supone que pueda convertirme en cualquier momento, entonces ¿Qué tan consiente soy en modo lobo?— cuestionaba esperando alguna respuesta. —No estoy muy segura, no lo sé, dado que ya conocía a Altair con su total control de sus poderes, aunque él dijo que tenía que dominar algo en su ser para que su transformación fuera del todo exitosa, pero no estoy segura. —No puede ser enserio pero se supone que me darías respuesta de lo que te preguntase, pero igual déjalo no esperaba enterarme de todo total solo ha pasado una semana, vamos come conmigo. —Seguro tengo provisiones en mi caja no tienes por qué preocuparte— —Tendría porque, de hacer sabido que eran tres desde un principio te habría tratado como mi invitada— enunciaba para recibir una respuesta positiva a su petición — Claro te acompaño no te preocupes— Tomaron sus alimentos, pero Shadow pensaba que era momento de retirarse a su hogar dentro de la casa pero aún no era tiempo. — Quédate a donde te vas, vamos veamos una película, el mundo no es solo oscuridad aún hay luz para ti sabes. Lo siguiente era plano juvenil, unos chicos viendo una buena película, algo de charla amena, “lo normal” también era posible para los seres extrahumanos, la mitología podría disfrutar al verse a sí misma interpretada por la raza dominante en la tierra. —Si su ustedes están en por todo el mundo por qué no los vemos digo, no hay donde esconderse para ustedes— preguntaba Bastian —Tú lo crees, porque has sido criado por el humanos de hecho hay muchas criaturas ficticias para ustedes que son más reales, yo no soy tan solo la prueba, lo que ocurre es que no están en el mismo plano. — ¿Mismo plano? A que te refieres— volvía a preguntar — Es muy sencillo los humanos hace mucho tiempo sintieron que el mundo no bastaría para ellos así que le informaron a los dioses, dividir la tierra para todos equitativamente. —Ya pero no creo que hayamos respetado ese acuerdo, ósea ocupamos todo el planeta— exclamaba con duda Bastian. —Cierto pero para eso los dioses partieron un continente de la tierra en un plano distinto donde solo los seres especiales cruzaban, hubo un puente por mucho tiempo pero con el tiempo el hombre necesito menos de nosotros y cada vez menos cruzamos para este mundo lo vemos innecesario — reflexionaba con voz intrigante. —Entiendo algo de lo que dices, pero no pueden interferir en la vida de los humanos— decía Bastian —Exacto no podemos hacer eso además tenemos nuestros problemas al igual que ellos, por eso esta guerra— Donde hay belleza, hay pasión; donde hay voluntad, hay compatibilidad así poco a poco, despejando sus dudas, volviendo a Bastian más susceptible a su realidad se lograba que en su empeño se volviera más salvaje y menos humano. Tener una ninfa totalmente oscura además vestida como de un cuento e las mil y unas noches deja de ser raro para el joven de apenas 17 años, su cumpleaños definitivamente no sería lo más genial que le ocurriría después de todo, la adultez le traería aparte de madurez una verdad que para cualquiera seria descabellada, pero con el tiempo se hacía más arraigado a ella. Pronto el silencio hacia su trabajo de manera rara y especial, tanto ejercicio los adormilaba pero no del todo, tener tan cerca el cuerpo de una mujer de voluptuosidad innegable hacia que las sensaciones adultas aparezcan, frenarlas era como detener un tren. —No sientes calor creo que deberíamos tomar aire no crees— decía acalorado Bastian —No seas aguafiestas tómatelo con calma imagina que no eres el único que intenta contener su libido, además no te dejare hacer nada, ya habías perecido de intentar algo mi cuchillo está conmigo siempre. —Buen punto pero no me siento cómodo teniendo esta sensación, no creo que la atracción física valga para esto — terminaba diciendo Bastian. —No hay duda que ser lobo te va cambiar radicalmente, sabes según lo que se tu temperatura corporal interna llega a los 40 grados, eso quiere decir que ardes por dentro todo el tiempo — —No pensé que fuera así, eso quiere decir que mi temperamento cambiara— preguntaba —No tanto así pero ya no serás apacible hasta que te controles del todo, molestar a un licántropo es lo último que harías así que ten cuidado con tus colegas— charlaban para al parecer tensionar a Bastian —Creo que se fue todo mi calor, podríamos estar así por horas, pero que tan cercana eres a Altair. —Bueno, tenemos una gran relación, desde que me rescato lo acompaño siempre, casi no me dejan acompañarlo a esta misión pero como no ocupo poco espacio todo estuvo bien. Toda la habitación era un relajante espacio, para la especial y tan amena charla pero el descubrir cosas nuevas sobre sí mismo y el mundo que lo rodeaba llevaba a la reflexión pronta sobre lo que le ocurriría en su cumpleaños. —No lo sé no creo comprender del todo sobre lo que soy, bueno despejare la duda el miércoles, pero aun así, no se sí pueda asimilarlo— decía el confuso Bastian. —Relájate disfruta de lo que puedas, mientras aún puedes, no te pasara nada Altair te protegerá y te enseñara todo lo que hay que saber solo hay que esperar a su regreso— pronunciaba ella para despejar un poco lo angustiante posición en la que se encontraba. —De acuerdo creo que estoy tomando muy sobradamente al tema, todo llegara a su tiempo creo de tomar un poco más distendido lo que está ocurriendo— decía Bastian sin conocer del todo la situación pero era mejor esperar a conocer lo que ocurría a formular teorías. Pasaron un gran rato conociéndose, tomando control de la situación, se preguntaban como era su vida, — ¿Cómo es el bosque?, ¿Qué tal la ciudad?— era preguntas que se barajaban con tal de conocer un poco más del otro más sino evitar pensar en cosas que los alejaran de tan buena conversación que estaban manteniendo.

—Creo que se está haciendo tarde deberíamos ir a dormir no crees-decía Bastian. —Si al parecer tienes que descansar mañana Altair vendrá temprano y no sabemos qué noticias traerá— así para terminar de dialogar se dirigieron a su cuarto para luego descansar. —Puedes dormir conmigo en el camarote si deseas no sé cómo es dentro de tu caja pero creo que en una cama estarás mejor— le decía esperando su aprobación o negación. —No sé si tengas razón, no sé cómo es dormir en una cama así que habrá que descubrirlo— respondía positivamente a la petición de Bastian.

Ya en el cuarto se dispusieron a dormir pero sin antes comentar. —Puedo dormir arriba no lo sé creo que está bien para mí, ya que yo duermo en una hamaca. —Claro como tú quieras, además creo que te va gustar sentir una cómoda cama antes que una hamaca. La noche era calma los pasos de los pequeños insectos de verano arman un armonía antes que un escándalo ruidoso que provoca la sociedad, lento y rítmico era los grillos, pequeños animalejos de lluvia. Ya se encontraban descansando para que en medio de la madrugada Bastian comenzara a soñar. —Papá porque te fuiste, no era necesario que me ocultes lo que somos, nunca debiste dejarnos-decía Bastian en medio de un lago blanco con un humo rodeando todo el ambiente sin posibilidad de ver. —Yo nunca quise dejarte, pero te tenía que protegerte, porque sin ti me sentiría perdido, no era mi intención dañarte tan solo era necesario mantenerte alejado mientras estuvieses preparado-decía una voz algo extraña pero le recordaba su padre, por alguna razón comenzó a sonar un ruido misterioso parecido a metal doblándose con algún objeto contundente. —No me queda mucho hijo, protégete, no permitas que te hagan daño no me lo perdonaría, hazte fuerte más de lo que yo soy incluso más de lo que deberías hacer... La voz comenzaba hacer incompresible, hasta que de la tenebrosa niebla una figura masculina comenzaba a acercarse cada vez más, no emitía sonido alguno pero tampoco parecía que caminase, era como si su imagen se moviera sin necesidad de mover músculo alguno, de repente el miedo y la pena invadió el corazón de Bastian llenándolo de una sensación extraña pero terrible. —Las sombras son sombras, y tú no eres nada que un cadáver andante, no temas lo que sientes es normal no te preocupes pronto sabrás lo que es sentir nada. Unos ojos rojos comenzaban a deslumbrar de las sombras y la niebla, era mejor que no lo vieses, ¡maldad! era peor que eso, el odio no es mucho pero peor son las almas atormentadas, las serpientes pecadoras no tienen miedo, pero este ser era peor, pronto el corazón helado tomaba forma, no era su padre era un hombre con el fuego en sus ojos pero negro por dentro. —Que me pasa no me puedo mover no es normal, se supone que estoy soñando pero quiero que me ayuden no me quiero quedar, maldición porque no despierto— pensaba asustado sin idea de que hacer para despertar de su pesadilla. —Amas lo que se rompe no nene, niño tú no eres diferente del anterior, creo que eres más débil que el otro, quieres ver algo que te sorprenda— decía para luego un pájaro apareciera del tamaño de un murciélago, cabeza grande y roja, ojos amarillos como los de un insecto y el pico largo y arqueado listo para hacer daño. — ¿Qué es eso?— preguntaba Bastian a la forma pero no lograba obtener respuesta pero el pájaro se acercó posándose en su pecho. —Me gusta que no tengas medio, pero se ve que eres estúpido— proclamaba la voz dejando ver apenas sus colmillos enormes. Sin más el pájaro ataco el corazón de Bastian mordiendo logrando penetrar con su pico muy profundamente en su cuerpo un agudo dolor acompañado de un grito por parte de Bastian hacían sonreír a la forma. La sangre que fluía por su cuerpo pasaba directo al pico de ese monstruoso animal, pero no dejaba de doler pero también dejaba de existir, —papá donde estas— eras las palabras que apenas lograba articular Bastian. —Así que quieres ver a tu padre de acuerdo aquí está— pronunciaba el ente para luego sacar lo que parecía una cabeza del padre de Bastian. —No, No, no lo creo ayuda Shadow donde estas, maldito te voy a encontrar así sea lo último que haga, sé que eres Cecil, no soy tonto ahora sé cómo eres, no sé qué quieres lograr pero has cometido tu peor error, despídete de tu ejército porque voy a disfrutar con tu cabeza en mis manos maldito desgraciado. —Tú, no tienes idea de lo que puedo ser capaz, no sabes lo que hecho, pero pronto averiguaras lo que tu padre está a punto de volverse parte de mis experimentos, tú y toda raza de débiles morirán incluido tu diosa de porquería — Un crujido y Bastian comenzaba a tomar conciencia, su sueño comenzaba a dividirse temporalmente para tornarse confuso visual y auditivamente, el escenario se desvanecía, la imagen se dividía en dos. La realidad y los sueños, solo se diferencian en los hechos, quisiera que mis sueños sean reales, pero solo son deseos, las pesadillas son iguales a la realidad, siempre hay una manera de que se pongan peor, todos tienen la esperanza de que la realidad sea mejor que sus pesadillas, pero rara vez terminan siendo mejores porque hasta nuestro atormentado cerebro sabe que la realidad te tiene preparada peores cosas. Sus ojos comenzaban a abrirse lentamente, cada que lo cerraba volvía a la pesadilla, pero pudo ver a Shadow atacando al pájaro en su ventana, su cuchillo atravesaba el delicado cuello del animal antinatural. Segundo a segundo, el tiempo parecía eterno, el dolor en el pecho de Bastian volvía en lo poco que quedaba de alucinación, pudo deslumbrar a su padre que le pedía ayuda, pero para su angustia solo podía ver la cabeza de su padre llevada por la manos de Cecil, era el momento más crítico de toda su vida, los peores temores de Bastian llenaban su corazón de miedo y odio, tan solo le escucho decir a su padre: lucha por mí. No era comprensible que un engendro fuera capaz de tremendo acto tan atroz, pero el odio era más que la tristeza, se acercó corriendo con la intención total de destrozar al esperpento delante de él; pero el punto final de la pesadilla. Se levantó fuertemente sin pensar que todo era una pesadilla, aunque no lo era del todo, obviamente era una advertencia sobre lo que le esperaba, Shadow se le acercó para sostenerle y confortarlo, le dio un fuerte abrazo para que su corazón compartiera sus latidos como si los cuerpos no existiesen. —No tengas miedo estoy contigo — le pedía a Bastian que se encontraba totalmente pálido pero pronto comenzó se puso dispuesto a soltar unas palabras— que acaba de ocurrir, que ha pasado — era la duda. —Cecil ha traído una estrige para hacerte alucinar, no tengo idea como ha pasado; nunca debió saber que estábamos contigo tal vez sintió nuestros poderes usarse o Beatriz capto la atención de él pero sea como fuere solo podemos esperar a Altair— —Tan solo podemos hacer, ¡maldición! como lo odio cuando lo vea no me contendré; aunque qué es una estrige— pronunciaba un poco calmado. —Es el animal que acompaña a Cecil son muchos de ellos, son como los murciélagos para los vampiros comunes, cada hijo de Drácula tiene un animal que los acompaña el anterior al tenia lobos como su servidores. —Creo entenderlo, pero si conoce nuestra posición deberíamos huir no crees— palabras sabias pero no del todo se escuchaban por parte de Bastian. —No, él no podrá llegar hasta a ti, nosotros no podemos salir de la barrera sin autorización, este mundo está separado, conoces el Bosque verde— mencionaba Shadow. —Si conozco, está a 5 Km de la ciudad mucha gente va ahí, no ha habido noticia sobre algo extraño en ese lugar— comentaba Bastian— No, pero es porque los humanos no conocen la barrera y así pasen junto a ella no lo notarían. —Puede ser, pero ahora como podemos protegernos es muy necesario informar esto no crees nos podrían atacar en cualquier momento si Beatriz se transformó sin mucha dificultad él podría tomarnos por sorpresa— —Se ve que eres demasiado astuto muchacho, no te preocupes vendrá mañana con buenas noticias seguramente no hay mucho porque alterarse no puede atacarnos mientras estemos en fuera de su alcance a lo mucho ha podido traer ese miserable pajarraco — Tomo la sabana para acurrucar a Bastian sin más dándole un tierno beso de buenas noches como si de su mamá se tratara aunque Bastian formulo la última pregunta de la noche. —Shadow sé que a las mujeres no les gusta que se los pregunte pero cuántos años tienes—Tienes razón a las mujeres no, pero a una ninfa le encanta esa pregunta. Muy simple la respuesta estoy aquí desde hace 1200 años— —Eres inmortal así que por eso escogieron a tu raza, eres genial Shadow pero para tener esa edad eres demasiado sexy— agregaba Bastian poco antes de dormir.