Isabel Guardia Alonso

TENÍA 22 años de edad cuando ocurrieron los hechos. Vivía en la calle San Luis número 39, del barrio albayzineño de Granada, donde ocurrieron los trágicos sucesos las noches del 30 y 31 de Enero de 1990. Su padre falleció hace unos diecisiete años. Su madre: María Alonso Vaca, de 60 años, procesada y para la que el Ministerio Fiscal pide una pena de 8 años como cómplice de homicidio. Hermanos: Antonio, de 39 años, María de 37, Francisco de 36, Miguel de 34, Joaquín de 32, Enriqueta de 30 y José, el hermano menor fallecido en el año 1986 al parecer de una leucemia.

Es graduado escolar. Trabaja como ayudante de cocina en un bar. Se define católica no practicante.

Aparentemente es tímida, muy influenciable por su hermana Enriqueta, indecisa. Siempre que se habla con ella, se tiene la impresión de que oculta muchas cosas. Tal vez sea más inteligente de lo que han dado los estudios psicométricos. Se adaptó a la cárcel, yo diría que mejor que su hermana y prima. Podría decirse que es el personaje más pasivo en los hechos. Nunca se puso en duda que ella no había producido lesiones. Nadie afirmó que fuese autora de los desgarros ano vaginales. No se sabe que ella personalmente le diese a tomar brebajes a Encarnación. Pienso que aún no se ha percatado de la gravedad de los hechos y la condena que puede cumplir.

Físicamente es guapa. Tiene un cuerpo bien formado. Le falta ese algo, inespecífico, a pesar de todo, para no ser una mujer que destaque. Juega muy bien su papel de segunda, pero no sabe jugarlo nunca como primera estrella.